Además, la compañía continúa con el desarrollo de nuevas tecnologías para avanzar el desarrollo de los fabricantes de automóviles de vehículos impulsados por pilas de combustible.
‘Dana posee una gran capacidad en las áreas tradicionales de tecnología térmica y de sellado, y hemos llevado esa experiencia a nuevas e innovadoras áreas como el desarrollo de vehículos eléctricos y pilas de combustible’, explicó Roger J. Wood, consejero delegado y director general de Dana. ‘La generación de energía alternativa para los automóviles necesitará de los esfuerzos colectivos de los fabricantes de equipamiento original y proveedores para llegar a la masa crítica. Continuaremos apoyando estas tecnologías, no solo para participar en el crecimiento del mercado, sino también para ayudar a crear un mercado viable para la energía verde’.
La tecnología de aleta ligera de Dana amplía la vida de la batería permitiendo un enfriamiento óptimo de la batería de ión litio del vehículo eléctrico de su cliente europeo mientras se carga. El sistema pendiente de patente ayuda a los fabricantes de automóviles a superar los retos de eliminar el calor de células de batería firmemente empaquetadas mediante el uso de aletas de aluminio flexibles, excepcionalmente diseñadas que crean un canal para que el aire alcance la superficie de cada módulo de la célula.
‘Empleando nuestro conocimiento en tecnologías térmicas, Dana desarrolló un montaje de enfriamiento con aire que funciona en el espacio limitado entre las células firmemente empaquetadas de la batería’, comentó George T. Constand, responsable tecnológico de Dana. ‘Nuestra experiencia en ingeniería nos permite proporcionar una solución flexible y a medida para nuestros clientes con el fin de cumplir las mejores y únicas demandas de este fascinante vehículo’.
Diseñada para ofrecer una complejidad reducida, la tecnología de enfriamiento de la batería de Dana es lo suficientemente flexible como para satisfacer las diversas necesidades de las baterías avanzadas de hoy en día. Además, la tecnología está realizada empleando aluminio reciclable fácilmente, lo que contribuye a un beneficio medioambiental total del sistema.
Los ensamblajes son fabricados en la instalación de Dana en Guiscard, Francia.
Las tecnologías avanzadas de enfriamiento de batería de Dana se han incluido en 16 vehículos híbridos eléctricos y eléctricos, incluyendo el Chevrolet Volt, Ford Focus, Ford Transit Connect, y Tesla Roadster Sport.
Dana continuará ayudando a avanzar las tecnologías de pila de combustible como parte de su estrategia de energía verde. La compañía ha sido un líder mundial en las tecnologías de pila de combustible durante más de 10 años, desarrollando y fabricando productos de lámina separadora metálica y compuesta, intercambiadores de calor de equilibrio de planta, reformadores de combustible de hidrógeno para los mercados de movilidad de vehículos, portátil, estacionaria e industrial.
Además de optimizar el rendimiento de los paquetes de batería para los vehículos, la experiencia de Dana se amplía a la gestión de la eficiencia de la transferencia de energía térmica y el almacenamiento de los mercados de energía renovable.
Dana es líder mundial en el suministro de productos de transmisión (ejes, árbol motor y transmisiones), tecnologías de potencia (sellado y productos de administración térmica) y servicio auténtico de partes para los fabricantes de vehículos ligeros y pesados. La base de clientes de la compañía incluye a casi todos los principales fabricantes de vehículos del mundo del automóvil, vehículos comerciales y mercados de fuera de ruta. Con sede central en Maumee, Ohio, la compañía emplea a unas 22.500 personas en 26 países, indicando unas ventas en 2010 de 6.100 millones de dólares.
Los vehículos eléctricos con baterías de litio no emiten CO2 ni dañan el medio ambiente, siempre que la electricidad provenga de energías renovables, como la eólica, la energía solar fotovoltaica y la termosolar. Los aerogeneradores podrán suministrar la electricidad al vehículo eléctrico, que en un futuro servirán también para almacenar y regular la electricidad intermitente del sector eólico.
