La primera plataforma del parque eólico, tras haber sido conectada el 31 de diciembre, podrá proveer a la red eléctrica de Portugal con la energía producida por su aerogenerador de 8,4 MW, el más grande instalado en una plataforma flotante en el mundo.
La puesta en marcha de este parque eólico flotante fomenta la diversificación del origen de la energía, posibilita un acceso a áreas marinas sin precedentes y supone un avance tecnológico relevante de cara a la descarbonización de la economía.
Windplus es un consorcio conformado por EDP RENOVÁVEIS, ENGIE, REPSOL y PRINCIPLE POWER.
Lisboa, 02 de enero de 2020: WindFloat Atlantic ya está operativo. Tras la alimentación del cable que recorre los 20 kilómetros de distancia que separan el parque eólico con la estación instalada en Viana do Castelo, la primera de las tres plataformas del proyecto del consorcio Windplus ha sido conectada con éxito el pasado 31 de diciembre. Las otras dos unidades del proyecto le sucederán, hasta alcanzar los 25MW de capacidad del parque.
La estructura de la plataforma —con una altura de 30 metros y una distancia de 50 metros entre sus columnas— permite albergar los aerogeneradores más grandes del mundo instalados en una superficie flotante, de 8,4 MW cada uno, lo que contribuye a incrementar la generación de energía y fomenta una reducción considerable de los costes asociados al ciclo de vida. El proyecto recientemente ha dado otro paso adelante cuando la segunda de las tres plataformas llegó a su enclave definitivo hace unos días. Una vez operativo al 100%, el parque eólico que, con sus 25 MW de capacidad instalada, podrá generar la suficiente energía como para abastecer al equivalente a 60.000 usuarios al año.
La puesta en marcha de este parque eólico posibilita un acceso a áreas marinas sin precedentes y supone un avance tecnológico relevante de cara a la descarbonización de la economía de Portugal. Las plataformas de Windfloat Atlantic están ancladas al lecho marino por medio de cadenas a más de 100 metros de profundidad. Además, están diseñadas para que puedan ser trasladadas por remolcadores corrientes, a diferencia de las instalaciones fijas que, al tener un mayor calado, requieren de buques más caros para su transporte. A esto se añade su armado en tierra que permite ahorrar costes logísticos, económicos y medioambientales vinculados con la construcción marítima. Todas estas ventajas tecnológicas redundan en su viabilidad para ser replicado en cualquier otra punta del planeta y a mayor escala.
El proyecto pertenece al consorcio Windplus, que es propiedad conjunta de EDP Renováveis (54,4%), Engie (25%), Repsol (19,4%) y Principle Power Inc. (1,2%). El proyecto WindFloat Atlantic está avalado por el éxito del prototipo WindFloat1. Este prototipo de 2 MW, que estuvo operativo entre 2011 y 2016, fue capaz de generar energía de forma ininterrumpida durante cinco años, superando condiciones climatológicas extremas, como oleajes de hasta 17 metros de altura y vientos de 60 nudos, sin sufrir daños.
Las plataformas han sido construidas entre los dos países de la península ibérica: dos de ellas en los astilleros de Setúbal (Portugal) y la tercera en los astilleros de Avilés y Ferrol (España). Un proyecto que aplica una tecnología disruptiva, denominada WindFloat, que permite la instalación de plataformas eólicas en aguas profundas, inaccesibles hasta la fecha, donde se pueden aprovechar abundantes recursos eólicos.
Esta iniciativa ha contado con el apoyo de instituciones públicas y privadas, lo que se ha traducido en la participación de empresas líderes en sus mercados y en el apoyo, vía financiación, del Gobierno de Portugal, la Comisión Europea y el Banco Europeo de Inversiones.
Entre los proveedores que han hecho posible la realización de este proyecto destacan, junto a Principle Power, la joint-venture Navantia/Windar, el grupo A. Silva Matos, Bourbon, el proveedor de turbinas MHI Vestas y el proveedor de cables dinámicos JDR Cables.