Eólica

Correos de Valladolid implantará vehículos eléctricos

Son los inicios de la incipiente carrera del vehículo eléctrico en Valladolid, y la verdad es que están encantados con sus vehículos eléctricos. Ni una avería, ni un contratiempo, ni una diferencia importante en la velocidad de conducción con respecto a los modelos a gasolina o a puro pedal.

Una es Carmen Sanz Blanco, más conocida como Pamen, piloto de la única bici eléctrica de Correos en la provincia y su compañero es Ángel Fraile, el conductor de la primera moto eléctrica en Valladolid. Su base de operaciones, con el acumulador correspondiente, está en el muelle de la oficina de la calle Ultramar.

"En un mes no he tenido un solo percance y, por ponerle un pero, diría que le falta un poco de reprís en las salidas de los semáforos. Lo demás igual, porque alcanza los 60 o 65 kilómetros hora y en ciudad no hace falta más", explicó el cartero.

¿Engorros en la recarga? "Tampoco", contesta Fraile. "Se enchufa la batería de la moto al acumulador que tenemos en Ultramar y del acumulador sale un cable a la red. Se carga por la noche y ya está. Aunque no haría falta, el fabricante, Intermurcia SL, me aconsejó recargar todos los días porque mejora la vida de las baterías", indicó, precavido.

Si la moto de Fraile está suscitando curiosidad en Valladolid, qué decir de cuando los vecinos de La Cistérniga ven volar por las calles a Pamen con su bici eléctrica. Lo de volar no es exageración. Lo dice ella. "Al principio tienes que dar un poco a los pedales y ya empieza… ¡puedes llegar a alcanzar los 40 ó 50 kilómetros a la hora!", señala esta Indurain del reparto postal.

A este beneficio hay que sumar otro: el económico. Como sucede con la moto eléctrica, el coste por kilómetro recorrido es en torno a cinco veces más barato que en los vehículos de combustión. Y todo ello con una recarga más simple que la moto a baterías y además se autorrecarga con el uso. "En tres meses y medio la he recargado sólo dos veces", afirma.

Los vehículos eléctricos con baterías de litio no emiten CO2 ni dañan el medio ambiente, siempre que la electricidad provenga de energías renovables, como la eólica, la energía solar fotovoltaica y la termosolar o solar termoeléctrica. Los aerogeneradores podrán suministrar la electricidad al vehículo eléctrico, que en un futuro servirán también para almacenar y regular la electricidad intermitente del sector eólico.

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