Un total de 750 personas se inscribieron a este congreso, cuyo precio asciende a 1.250 euros más el 6% de IVA, y en el que 24 líderes de opinión exponen sus ideas sobre los temas que afectan a la humanidad y a su futuro. En un marco propio de un espectáculo televisivo, con 110 periodistas acreditados, Molina intervino en el primer bloque temático Planeta Gaia, en el que también participaron el abogado, economista y divulgador científico español Eduardo Punset y la antropóloga Helen Fisher.
Molina hizo hincapié en que uno de los problemas de la Tierra es "la enorme población", que alcanza ya los 6.800 millones de habitantes. "Estamos en un planeta pequeño con recursos naturales limitados" por lo que si este crecimiento continuara de manera indefinida sí sería catastrófico.
El premio Nobel de Química recordó que la causa del cambio climático es que la composición química de la atmósfera ha cambiado, "sobre todo desde la revolución industrial". Estos cambios no han afectado a los principales constituyentes de "la capa fina que envuelve el planeta" como son el oxígeno y el nitrógeno, sino que los cambiantes han sido los "compuestos trazas", elementos que "juegan un papel muy importante", sobre todo en temas relacionados con la temperatura del planeta.
Tal es así, que en el último siglo el dióxido de carbono ha aumentado en un 30% a causa de la quema de combustibles fósiles, originada por la mano humana. La temperatura también ha experimentado una ligera subida en las últimas décadas. "Desde la revolución industrial se ha incrementado en 0.7 u 0.8 grados celsius. Si se continúa sin aportar soluciones, la temperatura podría subir hasta 7 grados celsius.
"Han aumentado la frecuencia de las inundaciones por todo el mundo, se están derritiendo los glaciares, se están incrementado las sequías, cada vez hay más huracanes intensos. Todos estos fenómenos irán a más si los países desarrollados no actúan ante el cambio climático", aseveró el asesor medioambiental de Barack Obama.
Paliar las consecuencias del cambio climático es "como el juego de la ruleta". "Hay probabilidad de que la temperatura suba hasta 7 grados celsius pero si cambiamos de ruleta y aportamos soluciones, se puede contener esta subida en 2 grados celsius. Pero la pregunta es ¿cuánto cuesta?
Según el premio Nobel de Química, la solución "no es tan cara", el problema se presenta cuando hay que decidir "quién lo paga". No obstante, indicó que "no hay una solución única" y apuntó que la energía nuclear puede ser "parte de la solución pero no resuelve el problema".
Además, a su juicio, son parte de la solución la energía eólica o geotérmica, entre otras. También señaló que "cuanto más pronto se resuelva el problema más barato saldrá", por lo que abogó por "un acuerdo internacional" como fórmula para resolver el problema. "Pero sabemos que los países, como Estados Unidos y China, todavía no están listos para tener un acuerdo definitivo", puntualizó. En su opinión, ese acuerdo "debería de salir" de la XVI Conferencia de la ONU sobre Cambio Climático (COP16), que se celebrará entre el 29 de noviembre y el 10 de diciembre próximos en Cancún (México).
Los vehículos eléctricos con baterías de litio no emiten CO2, siempre que la electricidad provenga de energías renovables, como la eólica, la energía solar fotovoltaica y la termosolar o solar termoeléctrica. Los aerogeneradores podrán suministrar la electricidad a los vehículos eléctricos, que en un futuro servirán también para almacenar y regular la electricidad intermitente del sector eólico.
Por último, Molina recalcó que una cuarta parte de la población -los países desarrollados- son los que han contaminado el planeta. "Las tres cuartas partes restantes tienen derecho a desarrollarse, pero el planeta no es lo suficientemente grande para que se desarrollen al mismo ritmo", puntualizó.