REVE
El Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) han lanzado en Washington una nueva alianza para apoyar la iniciativa Energía Sostenible para Todos (SE4ALL, en inglés) en América Latina y el Caribe.
El objetivo es fomentar el acceso a y el uso de energías renovables y su eficiencia en la región, con metas específicas para el año 2030.
“Esta nueva asociación refuerza aún más el rol de la SE4All en América Latina y el Caribe. Una mayor coordinación intensifica nuestro poder de acción, lo que generará un mayor grado de apoyo a los responsables de la gestión política y otros actores y creará un catalizador más efectivo para las inversiones”, dijo Kandeh Yumkella, Secretario General Adjunto de la ONU y el Representante Especial del Secretario General para la Energía Sostenible para Todos.
Los objetivos específicos incluyen: 1) proveer los recursos que apoyen las reformas políticas e institucionales y los marcos regulatorios que alienten el desarrollo de la producción y uso de energías sostenibles; 2) impulsar un exhaustivo mapeo de los programas regionales de energía que promueven los actores locales; y 3) determinar los indicadores y datos que serán recolectados por cada uno de los países.
“Este es el momento para que los gobiernos y el sector privado de la región inviertan en energías alternativas sostenibles, no sólo para alentar el crecimiento mientras se reducen las emisiones, sino también para asegurar el acceso a energía limpia a unos 24 millones de personas que aún viven en la oscuridad,” dijo la Directora Adjunta del PNUD para América Latina y el Caribe Susan McDade.
Se espera que la demanda de electricidad en la región se duplique para el año 2030. Por otra parte, si bien casi el 60 por ciento proviene de fuentes hidroeléctricas, el abastecimiento de energía generada con combustible fósil ha aumentado sustancialmente en los últimos 10 años, principalmente de gas natural.
Para la región del Caribe, en particular, la dependencia de los combustibles importados desafía el equilibrio de la balanza de pagos y aumenta la vulnerabilidad de los ecosistemas clave que sustentan importantes sectores productivos, incluido el turismo.
“Estamos ante una oportunidad de hacer algo excepcional para el sector energético de América Latina y el Caribe. Nuestros avances pueden mejorar la calidad de vida de la gente “, Hans Schulz, vicepresidente del BID.
REVE destaca que invertir en el acceso a la energía también significa más iluminación para las escuelas, clínicas de salud que funcionen, bombas para agua y saneamiento, aire más limpio en interiores, la elaboración más rápida de alimentos y más oportunidades de generación de ingresos, de acuerdo con la iniciativa action4energy del PNUD.
Antonio Prado, Secretario Ejecutivo Adjunto de la CEPAL, señaló que, “el acceso a la energía moderna forma parte de las medidas que se necesitan para hacer frente a la pobreza en todos sus frentes: la CEPAL ha aportado asistencia técnica en esta área a 21 países de la región, ha elaborado más de 30 publicaciones, y ha organizado más de 20 conferencias regionales sobre tópicos relacionados con la energía sostenible”.
El PNUD trabaja con los países de América Latina y el Caribe para impulsar el acceso a la energía sostenible y reducir la dependencia de combustibles fósiles.
En Nicaragua, por ejemplo, cerca de 50.000 personas de ocho comunidades rurales obtuvieron acceso a la electricidad a raíz de la inauguración de una nueva planta de micro-hidroeléctrica de 300 kilovatios en 2012.
Esta sociedad conjunta entre los gobiernos nacionales y locales, el PNUD y los gobiernos de Suiza y Noruega, está mejorando vidas y transformando el sector energético.
Además de impulsar una nueva legislación para promover la generación de electricidad basada en recursos naturales, han surgido micro empresas y se han creado empleos para mujeres y hombres.
Acerca SE4ALL – Energía Sostenible para Todos es una asociación de múltiples aliados entre los gobiernos, el sector privado y la sociedad civil, lanzada en 2011 por el Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon. Los tres objetivos de la iniciativa son proporcionar el acceso universal a la energía moderna, duplicar el nivel de uso de la energía renovable en todo el mundo y duplicar el uso de energía renovable a nivel mundial, bien como la energética hasta el año 2030.