Pues sí. Después de muchas reuniones con el Ministerio, entre nosotros y de sensaciones diversas (desesperanza, expectativas, etc.) hemos llegado a un acuerdo con el equipo ministerial que parece puede dar una cierta estabilidad al sector solar termoeléctrico; al menos hasta 2013. No quiero darlo por hecho hasta que el acuerdo tome la consistencia necesaria en el Boletín Oficial del Estado, porque, en realidad, no lo veo todo lo claro que sería de desear.
Una vez hecha esa primera reflexión de urgencia, me apetece hacer un repaso a la situación y tratar de mirar hacia adelante, aunque solo sea como pensamiento deseoso.
¿Por qué llegamos a este atolladero?
Todo este proceso se inicia realmente con la Ley 54/97 del Sector Eléctrico, allá por finales del 1997 con la creación del Régimen Especial en el que, con buenas razones, se da un trato especial a la generación de electricidad con energías renovables y cogeneración. Lamentablemente, los Reales Decretos que la han ido desarrollando, aunque han permitido un importante volumen de potencia instalada, han sido un cúmulo de improvisaciones –bien intencionadas casi siempre- en lo tocante a las energías renovables –también en cogeneración- pero ancladas en la falta de conocimiento preciso del funcionamiento de las tecnologías y de sus entornos económicos, empresariales y sociales. Ahora nos encontramos –puede que también el equipo ministerial- con un auténtico galimatías, con varios problemas de base. Solo destacaré dos:
Que las grandes empresas eléctricas y gasistas notan como disminuyen sus ventas y se sienten “agredidas” por las renovables. Para colmo eso ocurre en un contexto económico de disminución del consumo. Y reaccionan, claro, en defensa de sus “derechos” ¿adquiridos? e intereses.
Un fuerte déficit tarifario, originado realmente por el hecho de que los precios de la electricidad –que se arrastra desde hace algún tiempo- no han seguido la pauta de aumento que sería la normal; y en el mismo contexto de crisis económica eso da lugar a una psicosis colectiva alentada por una prensa ignorante y gritona que solo jalea el escándalo irresponsable y, tal vez, interesadamente. Las culpas, por supuesto, de las renovables.
La retroactividad generaría más problemas
En esta situación el equipo del Ministerio quiere –con buena lógica- resolver el problema. Hace sus cálculos y observa que la solución más sencilla sería disminuir las cantidades que perciben las renovables, incluso planteando la retroactividad de algunas medidas. A lo importante no se atreven porque es impopular y, a lo peor, ni siquiera los dejan.
Pero cuando se ponen a ello observan dos circunstancias básicas difíciles de resolver:
Que los inversores –grandes, pequeños y medianos- se resisten a ceder sus derechos adquiridos de acuerdo a la legislación vigente cuando efectuaron sus inversiones. Cualquier medida retroactiva, además de no ser admisible, generaría una imagen de inseguridad jurídica para nuestro país que tendría efectos en otros sectores de la economía.
Que las repercusiones políticas –incluidas las del empleo- son muy graves. ¿Nos imaginamos lo que pensará un pequeño inversor –yo mismo- que ha dedicado sus ahorros a una instalación fotovoltaica con unas determinadas expectativas de amortización de su inversión y siguiendo las leyes con graves dificultades administrativas –sortear a tres administraciones con todas sus trabas- le dicen ahora que les rebajan sus ingresos después de haber hecho el desembolso de dinero que fue necesario en su día. Seguro que no volverán a votar al partido en el gobierno y seguro que los dirigentes de ese partido lo saben. No digamos los miles de trabajadores que se quedan en paro por esa causa.
¿Qué hacer?
Parece lógico que lo que intenta el Ministro y su equipo es lograr un consenso de todos los implicados. Y creo que lo va logrando. Desde luego con nuestro sector lo ha logrado gracias a la generosidad de nuestras empresas que han cedido en muchas de las lógicas expectativas de negocio en las que se habían involucrado. No ha sido fácil pero ¡ahí está el acuerdo! Parece ser que también con la eólica. Pero, mucho me temo que con la fotovoltaica no va a ser fácil.El intento de pacto por la energía con el PP es otra importante parte del consenso imprescindible.
En fin, ya veremos si lo consigue. Desde luego, nosotros apostamos para que lo logre. Y hemos obrado en consecuencia. Ahora se necesita que el Gobierno vaya más allá de intereses particulares y que consiga ordenar el desbarajuste actual del sistema eléctrico.
Suponiendo que se supere este bache que creo coyuntural, habrá que ir pensando en el 2014, 2020, 2030, y más allá. Mi percepción personal es compleja pero está avalada por haber estado en muchas de las reflexiones que se han intentado. No es el momento ni el lugar para especificar esas sensaciones.
Solo cabe dejar claras otro par de cuestiones al respecto:
El proceso de sustitución de la forma de generar electricidad pasando de las fuentes contaminantes, centralizadas y externas a fuentes limpias, distribuidas y autóctonas no se puede parar y ni siquiera es inteligente frenarlo. Y todos tienen que tomar nota y asumirlo.
No basta con sustituir unas formas de energías primarias por otras. Es necesario contar con la complicidad de todos para cambiar el paradigma energético en profundidad. No queda otro remedio. No se puede seguir derrochando las energías intermedias (electricidad y combustibles) como si no pasara nada.
En fin, creo sinceramente que con este proceso de intercambio de opiniones con el gobierno desde las asociaciones y las empresas, hemos iniciado un cambio de enfoque de los problemas del sistema eléctrico. El de los combustibles es otro asunto; más grave si cabe.
El sector termosolar alcanza un acuerdo con el MITyC que contribuye al ahorro de costes del sector eléctrico y garantiza la visibilidad y estabilidad del marco regulatorio
Protermosolar anuncia que ha llegado a un acuerdo con el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio sobre el marco regulatorio aplicable a las plantas termosolares existentes y a todas las incluidas en el registro de Pre-asignación establecido por el RDL 6/2009.
Este acuerdo garantiza la visibilidad y estabilidad futura del marco regulatorio y de la retribución, permitiendo generar ahorros de la factura eléctrica en el corto plazo. El acuerdo se concreta en los siguientes puntos principales:
* No se modificarán las cuantías de las tarifas ni las primas previstas en el RD 661/2007 para las plantas termosolares en operación o inscritas en el Registro de Pre-asignación instaurado con el RDL 6/2009. Como medida temporal y excepcional, el sector termosolar acepta que las plantas no podrán acogerse a la opción de precio de mercado más prima durante el primer año de operación.
* Se establece un límite máximo razonable por tipo de tecnología al número de horas equivalentes a potencia nominal que puede operar la planta vendiendo la electricidad generada a la remuneración establecida en el RD 661/2007.
* Se retrasa respecto a lo previsto en las fases definidas para los proyectos inscritos en el Registro de Pre-asignación, para un conjunto de plantas, la fecha a partir de la cual pueden empezar a vender energía percibiendo la remuneración prevista en el RD 661/2007.
* Se autorizará el vertido en pruebas a precio de pool durante los nueve meses anteriores a la Puesta en Marcha Definitiva
* Finalmente, se establece una autorización administrativa para transferencias de titularidad que impliquen un cambio de control de los proyectos.
Valeriano Ruiz, Presidente de Protermosolar, explicó que “El sector termosolar ha hecho un esfuerzo importante para contribuir al ahorro de costes del sistema eléctrico en el período 2010-2013 sin comprometer la estabilidad ni la visibilidad del marco regulatorio, lo que es esencial para asegurar el desarrollo económico y la creación de empleo en un sector innovador clave. Este acuerdo pone fin a la incertidumbre sobre la regulación del sector.”
Entra en operación la central La Florida perteneciente a Renovables SAMCA: España supera a EEUU y se convierte en el mayor productor mundial de energía solar termoeléctrica con 432 MW de potencia instalada
España se convierte en el primer productor mundial de energía termosolar. La conexión de la planta termosolar La Florida, ubicada en el municipio de Alvarado (Badajoz), y perteneciente a Renovables SAMCA, ha hecho posible que el potencial de energía instalada supere ya al de EEUU.
RENOVABLES SAMCA tiene como socio mayoritario al Grupo SAMCA, grupo industrial aragonés con amplia experiencia, entre otros, en el sector de la energía, y como socio de perfil financiero, a Sociedad de Promoción y Participación Empresarial Caja de Madrid, filial de CAJAMADRID, una de las principales entidades financieras españolas.
España cuenta ya con 432 MW de potencia instalada, frente a los 422 MW de EEUU, lo que pone a nuestro país en la primera posición no sólo en desarrollo tecnológico, sino también en producción. Esta nueva central se ha desarrollado con tecnología de colectores cilindro-parabólicos desarrollada por el Grupo SAMCA, cuenta con sistema de almacenamiento térmico mediante sales fundidas, y tiene una potencia de 50 MW. Supone además un hito en el desarrollo del sector por el tamaño del campo solar, que con 550.000 m2 de área de captación, es el mayor de entre todas las centrales en operación, tanto en España como en el resto del mundo.
Así, el mapa de energía termosolar instalada en España se distribuye de la siguiente manera: PS10 (11 MW), PS 20 (20 MW), ANDASOL 1 (50 MW), PUERTOLLANO (50 MW), PUERTO ERRADO (1,4 MW), LA RISCA (50 MW), ANDASOL 2 (50 MW), SOLNOVA 1 (50 MW), EXTRESOL 1 (50 MW), SOLNOVA 3 (50 MW) y LA FLORIDA (50 MW).
Además de éstas, hay más plantas que ya se encuentran en fase de construcción, y en menos de un año podría estar conecta a red una potencia adicional de cerca de 600 MW. El conjunto de plantas inscritas en el registro de preasignación de retribución permitirá alcanzar una potencia cercana a 2500 MW en 2013.
Por su parte, EEUU cuenta con las plantas SEGS (354 MW), la planta Nevada Solar 1 de Acciona (60 MW) así como las plantas instaladas en Kimberlina (5 MW), Lancaster (5 MW) y Maricopa (1,5 MW).
La inversión realizada por las empresas para la puesta en funcionamiento de centrales termosolares asciende ya a cerca de 2.500 millones de euros y rondará los 15.000 millones de euros acumulados en 2013. Para esa fecha operarán en España un total de 60 plantas termosolares de diferentes tecnologías y tamaños.
España es hoy líder mundial en este tipo de tecnología, y las empresas ligadas a estas centrales solares termoeléctricas están comenzando a participar en ambiciosos proyectos en muchas regiones del mundo (EE.UU., Norte de África, Oriente Medio, China, India, Australia…). Un liderazgo que se ha logrado gracias a un esfuerzo continuado en I+D dentro del sector ya desde finales de los años 70, y que perdura hasta hoy.
Además, a esta expansión de la termosolar dentro y fuera de España está contribuyendo también una de sus principales fortalezas diferenciales, como es su gestionabilidad y capacidad de almacenamiento, hoy fundamentales para garantizar la estabilidad del sistema eléctrico español, puesto que de esta forma las centrales solares termoeléctricas son capaces de responder a la demanda energética, produciendo energía incluso en horas sin radiación solar, o almacenando energía cuando esta no se demanda en la red.
Producir energía termosolar costará la mitad en 2025, según el Roadmap Termosolar realizado por ATKearney para ESTELA
Ya está disponible el estudio elaborado por la consultora A.T. Kearney para la Asociación de Energía Termosolar Europea, ESTELA, de la que Protermosolar es Miembro Fundador y Vicepresidente. El informe revela el creciente potencial de la energía termosolar a medio plazo para sustituir progresivamente las energías convencionales y complementar al resto de fuentes renovables con una solución competitiva en costes. En un escenario óptimo, el mapa de esta industria traerá consigo la creación de 100.000 a 130.000 empleos en 2025, y al ritmo en que se desarrolla, los costes de producción se reducirán a la mitad en los próximos 15 años.
La energía termosolar está entrando en su fase comercial y pronto será viable como una fuente de energía renovable con un posicionamiento relevante en la cartera de recursos. En los próximos 10 años, la energía termosolar será capaz de funcionar con un modelo de negocio productivo, que desafíe a las fuentes de energía convencionales y a otras renovables sin necesidad de primas. Con el adecuado apoyo, esta energía podrá alcanzar una capacidad instalada global de hasta 100 gigavatios en 2025. Esto implicaría la creación de un máximo de 130.000 empleos de los cuales 45.000 serían trabajos permanentes a jornada completa dedicados al funcionamiento y mantenimiento.
Esta es una de las principales conclusiones de un estudio conjunto que lleva elaborando desde enero la consultora de gestión global A.T. Kearney para la Asociación Termosolar Europea, ESTELA. El objetivo del estudio era elaborar una hoja de ruta que proporcionase el coste de la tecnología y el potencial de desarrolllo de la energía termosolar. El estudio revela que los costes de generación de esta tecnología podrían reducirse a más del 30% en 2015 y más del 50% en 2025. La energía termosolar es, por tanto, una herramienta atractiva que puede hacer una considerable contribución para alcanzar los objetivos energéticos y medioambientales, tales como el reto del 20-20-20 de la Unión Europea.