El gerente general del Centro de Refinación Paraguaná (CRP), Jesús Luongo, explicó las bondades que representa producir energía eléctrica a través del viento, un recurso natural, fuerte y continuo, que corre libre en la costa paraguanera.
El proyecto del parque implica la instalación de 76 aerogeneradores, de 1,32 megavatios cada uno, que generaran 100 megavatios de potencia.
Luongo anunció que ya recibieron los primeros 24 anillos de segmentación y están próximos a otorgar los contratos para la construcción de las bases de los nuevos aerogeneradores.
Los primeros aerogeneradores fueron construidos en España por Gamesa y llegarán en barco.
Por ser de grandes dimensiones se traerán por partes: primero las tuberías o columnas, luego la góndola donde está la turbina y después las aspas. “Entre junio y julio de este año erigiremos los primeros 24 aerogeneradores”, estima el ingeniero.
De igual modo, manifestó que colocan las órdenes de compra de la subestación eléctrica, de manera que el primer trimestre del 2011 se generarían los primeros 32 megavatios en el parque.
Energía compatible con el ambiente.
El Parque Eólico de Paraguaná forma parte de las políticas del Gobierno Nacional de generar cada día energía limpia.
El gerente del centro refinador significó que a pesar de ser una industria petrolera, Pdvsa quiere ser una industria verde y estar en armonía con el medio ambiente.
“Como dijo el presidente Hugo Chávez en Copenhague: No cambiemos el clima, cambiemos el sistema, y eso es lo que hacemos aquí. Complementar la matriz de energía en el país, no solamente con la energía hídrica y térmica, sino también con energía eólica”.
Además de Paraguaná, existe potencial eólico en la goajira venezolana, así como en el oriente del país, específicamente en Araya y Chacopata, del estado Sucre, y en las islas de Coche y Margarita, del estado Nueva Esparta.
“La energía eólica es energía limpia. No necesita combustible y por tanto no generará CO2 para contribuir con el calentamiento global. Simplemente aprovecha las bondades del clima para instalarla. Es como la energía solar limpia y gratuita”.
Además de contribuir con el ambiente, Luongo se refirió al ahorro de combustible que representa generar electricidad por medio del viento.
“Estimamos por el orden de 40 millones de dólares anuales el ahorro de combustible líquido que dejaría de quemarse en el momento en que el parque eólico esté funcionando”.
Energía alternativa
El superintendente de Energía Eléctrica del CRP, Pedro Suárez, explicó que el proyecto consiste en la instalación de torres de 55 a 58 metros de altura, normalmente llamadas molinos de viento, que cuando giran mueven un generador que produce electricidad.
Estos molinos de viento tienen unas hélices grandes, con un diámetro de 25 a 30 metros de radio. Suárez refirió que la posición “estratégica y bendita” de Paraguaná la convierte en una zona de enorme potencial eólico, que podría generar hasta 10 mil megavatios de energía eléctrica.
Los vientos alisios llegan a la península de una forma constante y en aproximadamente 10 metros por segundo.
“Son muy contadas las zonas en el mundo donde haya un potencial tan extraordinario de viento como tenemos nosotros. Por eso es que en Paraguaná está el proyecto matriz o pionero para iniciar la generación eólica en Venezuela”, acotó.
La ventaja de la producción eólica de energía es que no necesita quemar combustible para generarla, sino de un recurso renovable, que es el viento, presente día y noche, todo el año.
Al no requerir combustibles fósiles, como gas o diesel, se elimina la contaminación ambiental que tanto necesita el planeta.
“Se estima que en nuestro parque logremos disminuir aproximadamente 330 mil toneladas de CO2 que pudiéramos emanar a la atmósfera con otro tipo de generación eléctrica”, apuntó Suárez.
“Necesitamos disminuir gradualmente, pero de una manera muy efectiva, la contaminación ambiental, y este tipo de energías limpias permiten eso”, agregó.
Proyecto integral
Suárez manifestó que el Parque Eólico es un proyecto integral financiado totalmente por Pdvsa, con una inversión cercana de 280 millones de dólares.
Además de las torres generadoras de electricidad, que estarán ubicadas en una superficie de 575 hectáreas en el municipio Los Taques, el proyecto contempla otros subproyectos como la siembra y procesamiento de zábila; un centro de investigaciones de energía alternativa, un centro turístico con una posada y un Museo del Viento.
“Este proyecto marcha viento en popa, y forma parte de la incursión del gobierno nacional y de Pdvsa en el uso de energías alternativas para no depender de combustibles fósiles ni de potenciales hidráulicos”.
El macroproyecto requerirá varios años para su culminación, pero una vez finalizado generará 100 megavatios que serán incorporados al sistema eléctrico para beneficiara a la población venezolana que, en la actualidad, depende en un 70% de la energía producida en El Guri.
“En un futuro cercano, cuando algún usuario en su residencia encienda algún bombillo, alguno de estos electrones van a venir de nuestro parque eólico”, anunció Suárez.
