REVE
Valle del Cauca se convirtió a partir de este año en el departamento con una de las mayores apuestas para el aprovechamiento de las llamadas energías alternativas o renovables al poner en marcha una de las más grandes infraestructuras de este tipo en el país. Cuerpo de la Noticia: En el proyecto, que es liderado por la Empresa de Energía del Pacífico, se invirtieron $1.248 millones. El laboratorio, que está dotado de paneles que recogen la radiación solar para convertirla en energía, funciona por ahora en una de las terrazas del edificio de Epsa ubicado en la autopista Cali-Yumbo.
El sistema no acumula energía y está conectado directamente a la red eléctrica interna del edificio, entregando el 5% de la energía que demandan áreas como la iluminación, ascensores, aires acondicionados, entre otras.
El gerente de la Epsa, Óscar Iván Zuluaga, dijo que «la idea es que dentro de cuatro o cinco años se pueda iniciar la comercialización de este tipo de energía hacia industrias, comercios y residencias con base en las nuevas regulaciones, incentivos tributarios y normas aprobadas por el Congreso».
«De esta manera, estaríamos impulsando un nuevo negocio a medida que vayan avanzando los desarrollos tecnológicos en este campo, para vincular la energía solar a la hidráulica que distribuimos a los usuarios en todo el departamento», agregó.
La iniciativa forma parte de una estrategia interinstitucional y de alianzas público-privadas que vienen impulsando otras entidades como la Alcaldía de Cali, Emcali, la Universidad del Valle y la Cámara de Comercio.
Zuluaga recordó que a manera de experimento Epsa ya desarrolla un proyecto similar en la urbanización Santa Bárbara en Palmira, donde a través de paneles solares se genera electricidad para la iluminación de zonas comunes, beneficiando hacia el futuro a 16.000 viviendas. Allí la empresa invierte $2.000 millones.
La gerente de Innovación de Epsa, Sandra Ospina, destacó que «este proyecto no solo busca mejorar la calidad de vida de los vallecaucanos, sino brindar un gran aporte al medio ambiente mediante este tipo de tecnologías».
Los paneles solares, anotó, son sistemas cuya duración puede ser hasta de 25 años, por lo que resultan ser un sistema económico de generación eléctrica a lo largo del tiempo.
El Gerente de Epsa resaltó, asimismo, que «el Valle del Cauca es una región privilegiada por estar ubicada en la zona tropical, dado que cuenta todo el año con clima soleado, lo que permite aprovechar al máximo la radiación para generar energía».
Cabe recordar, que en los últimos cinco años la capacidad instalada de la energía solar fotovoltaica ha aumentado diez veces en el mundo.
Zuluaga enfatizó que «ya muchas empresas vallecaucanas están interesadas en adoptar este tipo de tecnologías, y Epsa que busca ser líder en este campo, quiere popularizar su uso a fin de que en pocos años sus costos se vayan reduciendo».
¿Cómo funciona?
El laboratorio cuenta con 294 módulos fotovoltaicos o paneles solares a base de silicio, los cuales están generando 6.227 kilovatios-hora, suficientes para abastecer a 43 viviendas.
La radiación obtenida del sol a través de los paneles se transforma en electricidad y se distribuye al edificio mediante tres generadores.
El complejo, dijo el ingeniero de Epsa, Jonathan Escamilla, cuenta con cuatro medidores que calculan la potencia para verificar el impacto del sistema en la red interna eléctrica del edificio.
El laboratorio cuenta con dos estaciones hidroclimatológicas: una en la Universidad Autónoma de Occidente y otra en la sede de Epsa. El sistema no contamina, no produce ruido ni vibraciones, no requiere de un mantenimiento constante y tiene un riesgo de falla muy bajo.