Los gatos amenezan las aves, no la eólica

REVE

Un estudio demuestra que los felinos causan muchas más muertes de animales que los coches, los aerogeneradores de los parques eólicos  o los envenenamientos.

El instinto depredador delos gatos ha contribuido a la extinción de 33 especies en todo el mundo. Lo que llama especialmente la atención es el elevadísimo número de presas que son capaces de cazar y que un estudio ha pretendido contabilizar.

Lo que más ha alarmado a los autores ha sido el significativo grado de responsabilidad de los animales domésticos, por lo que piden a los dueños un mayor control sobre sus mascotas.

El maltrato animal, la eólica, los atropellos de vehículos, impactos contra edificios o envenenamientos, pierden vigencia frente al desafío de los felinos, que representan la principal amenaza para los pájaros y mamíferos en Estados Unidos, donde hay 84 millones de gatos domésticos.

Los resultados han dejado perplejos a los propios científicos, que han visto cómo la cifra de aves asesinadas por los gatos llega a cuadruplicar los datos obtenidos por estudios previos.

 

La eólica es la solución a los problemas del medio ambiente, no el problema.

Las causas reales de la mortalidad de aves en Estados Unidos, donde hay estudios serios y no fantasías calenturientas, son las siguientes: las ventanas matan a 976 millones de aves, los gatos a 510 millones de aves, los plaguicidas a 72 millones, las colisiones con torres de comunicación de 4 a 50 millones de aves, la caza a más de 100 millones de aves, las líneas eléctricas de alta tensión a 175 millones de aves, los atropellos de 50 a 100 millones de aves, las centrales termoeléctricas de carbón y gas natural a 14,5 millones de aves, las centrales nucleares a 327.000 aves y los parques eólicos a 7.000 aves, menos del 0,0005% de las muertes de aves por causas antropogénicas.

La industria eólica es la única que trata de evitar la mortalidad de aves y murciélagos. Seamos serios. Pero eso es como pedir peras al olmo.

 

http://www.nature.com/ncomms/journal/v4/n1/full/ncomms2380.html