Lubián, un pueblo orgulloso de la eólica

Lubián, el municipio zamorano que se alzó con el Primer Premio Eolo 2012 a la integración rural de la eólica de la Asociación Empresarial Eólica (AEE), ha sido este año el escenario perfecto para la celebración del Día Mundial del Viento. Como dice su alcalde, Felipe Lubián, la eólica ha significado para Lubián “un cambio radical: de ir hacia la nada, a ir hacia el futuro. Ha sido la salvación”.

La entrega del premio, un vídeo que muestra la vida en Lubián y su privilegiada relación con la energía eólica (si quieres verlo, pincha aquí), estuvo precedida por la visita a uno de los parques eólicos de la zona –por cortesía de Ibereólica– y por actividades escolares para los niños de la comarca –con Acciona, que también opera varios parques en Lubián, como anfitriona–.

En sus discursos, tanto el vicepresidente de la Asociación Empresarial Eólica (AEE), Juan Diego Díaz, como el director general de Energía y Minas de la Junta de Castilla y León, Ricardo González, han expresado sus felicitaciones a la labor hecha por Lubián. El municipio es un claro ejemplo de un pueblo abocado a la desaparición (población envejecida, emigración de los jóvenes a otras zonas con más trabajo, etcétera) que ha utilizado los recursos generados por la eólica para crear riqueza y empleo.

Díaz, reconoció los méritos de Lubián para obtener este reconocimiento, “porque es uno de los pueblos que mejor ha sabido aprovechar las posibilidades que ofrece el sector de la energía eólica para obtener riqueza, y que mejor ha aprovechado ese beneficio para mejorar la calidad de vida de sus vecinos”. La construcción del primer parque eólico en Lubián comenzó en 1988.

La comarca cuenta con 362 habitantes y 331 MW eólicos, repartidos en catorce parques. El 20% de la población total tiene un empleo ligado directa o indirectamente a la eólica. El 80% de los ingresos del Ayuntamiento proceden de la eólica y se han invertido en el desarrollo de actuaciones de interés comunitario que han mejorado la calidad de vida de los vecinos. Las ayudas a la natalidad y a las familias numerosas para fomentar la permanencia en el municipio, la construcción de una residencia de mayores, un comedor social y un tanatorio, el mantenimiento del monte, el arreglo de fuentes tradicionales, la recuperación de manantiales y el acondicionamiento de merenderos son sólo algunos ejemplos.

www.somoseolicos.com/