Castilla-La Mancha se consolida como una de las regiones líderes en energías renovables en España. Con más de 15 gigavatios de potencia instalada y una inversión en crecimiento, la región está en el podio de este sector estratégico. Empresas del sector como Verbund, ID Energy y Eiffage Energía Sistemas y la Administración regional coincidieron en el foro ‘Energías renovables en el entorno rural: retos y oportunidades’, organizado por EL ESPAÑOL – EL DIGITAL CLM en la necesidad de mejorar infraestructuras de evacuación, reducir burocracia y fomentar el diálogo con los municipios para aumentar el impacto positivo del sector.
«Castilla-La Mancha está en la Champions de las renovables y disputándose la copa», ha asegurado María Llanos Valero, delegada provincial de la Consejería Desarrollo Sostenible en Albacete. En este sentido, recordó que la comunidad autónoma ha tramitado 427 proyectos en 2024, a los que se suman otros 109 que por su tamaño ha sido tramitados por el Ministerio. Todos ellos han generado una inversión de 470 millones de euros y la creación de hasta 3.000 empleos.
El desarrollo del sector de las energías renovable en Castilla-La Mancha no sólo se debe a que dispone de recurso solar y eólico en abundancia y territorio para implantarse. «También cuenta con una administración que ha sabido leer la importancia del sector, que ha desarrollado un marco jurídico estable y que ha abierto las puertas a las empresas», señalaba Enrique Barbudo Sepúlveda, director general de Verbund Green Power Iberia.
«Castilla-La Mancha es la segunda comunidad autónoma en potencia renovable instalada con más de 13.000 megavatios de solar y eólica. Pero no solo ha habido un importante desarrollo de empresas de generación renovable, sino también un importante desarrollo industrial de otros sectores de auxiliares: empresas de construcción, de mantenimiento o de fabricación de componentes», explicaba Barbudo.
Pero este sector se enfrenta también problemas que condicionan su crecimiento como es la insuficiencia de redes de transporte y distribución de energía. «No puede ser que una de las regiones que más energía limpia produce tenga dificultades para evacuarla y, además, para abastecer su propio tejido industrial», señaló la delegada Provincial de Desarrollo Sostenible en Albacete de la Junta de Comunidades.
En este sentido, Matías Gotor, director de Desarrollo de Negocio de Renovables de Eiffage Energía Sistemas, aseguraba que la falta de capacidad de evacuación está frenando la inversión ya que «no se puede evacuar toda la energía que se está generando». No obstante, Valero explicó que está a punto de aprobarse el trazado definitivo de la red transmanchega», una autopista para transporta energía cuya primera fase se espera que esté operativa en 2026.
Otos de los problemas a los que se enfrenta el sector es la excesiva burocracia. «Existe una burocracia muy rígida y dura. Además, no existe una legislación única, porque a la de ámbito nacional hay que sumar que cada comunidad autónoma tiene la suya», señaló Benito Puebla, director de ID Energy.
«Debemos mejorar estos procesos para que no haya tanta barrera burocrática, porque hay proyectos que tardan en salir tres o cuatro años», aseguraba Puebla. Un plazo que director general de Verbund Green Power Iberia elevaba hasta seis años. Todos los responsables del sector coincidieron en que hay «capacidad de mejora».
En este punto, Valero defendió la labor de la administración en este sentido. «Hemos multiplicado por 10 la tramitación de expedientes creando equipos especializados en cada una de las delegaciones y contamos con normativas que agilizan procesos», respondió Valero, aunque reconoció que «es mejorable» y pidió más personal para las delegaciones provinciales.
Rechazo social
Otro de los retos que el sector debe abordar es el rechazo social a algunos proyectos. «No es sostenible que tras cinco años de inversión y trámites, un alcalde paralice una planta por un cambio de signo político», lamentó Puebla. Las soluciones pasan por mejorar la comunicación con las comunidades locales.
