RWE monitorea la biodiversidad utilizando un enfoque basado en el ecosistema en su central eólica marina Kaskasi

El proyecto de tres años SeaMe utiliza tecnologías de monitorización de vanguardia, que incluyen la toma de muestras de ADN ambiental, así como un dron y un vehículo submarino autónomo, ambos equipados con cámaras basadas en IA. La integración simultánea de todos los datos recopilados permitirá la monitorización del ecosistema dentro del parque eólico marino de Kaskasi con el objetivo de reducir la intensidad de carbono de la monitorización y minimizar el impacto en la vida marina. Los socios de investigación son el Instituto Helmholtz de Biodiversidad Marina Funcional de la Universidad de Oldenburg, el Centro Helmholtz del Instituto Alfred Wegener para la Investigación Polar y Marina, BioConsult SH, DHI A/S y el Centro Alemán de Investigación para la Inteligencia Artificial.

En el marco de una nueva colaboración con científicos de primera línea para mejorar el seguimiento de la vida marina, RWE ha puesto en marcha el proyecto SeaMe (Sustainable ecosystem approach in Monitoring the marine environment) en su parque eólico marino de Kaskasi, frente a la costa alemana. El objetivo es obtener una comprensión integral de las interacciones entre los parques eólicos marinos y el ecosistema mediante el uso de un enfoque científico sólido, junto con nuevas tecnologías de seguimiento basadas en inteligencia artificial y que minimizan el CO2.

Sven Utermöhlen, director ejecutivo de RWE Offshore Wind: “Como líder mundial en energía eólica marina, nos sentimos responsables de construir y operar nuestros parques eólicos en armonía con la naturaleza. Para proporcionar electricidad ecológica, invertimos miles de millones de euros al año en energía eólica marina. Nos comprometemos a ampliar nuestra cartera de forma respetuosa con el medio ambiente. Con esto en mente, nos hemos fijado unos ambiciosos objetivos de sostenibilidad y estamos haciendo todo lo posible para encontrar formas de mejorar. Con el proyecto SeaMe somos pioneros en nuevas técnicas que nos permitirán comprender mejor el impacto de la energía eólica marina en el ecosistema marino”.

Un enfoque innovador y basado en los ecosistemas para el seguimiento de la biodiversidad

La energía eólica marina es fundamental para hacer frente al cambio climático y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero. Sin embargo, es igualmente importante garantizar que se minimicen y mitiguen los posibles impactos sobre el medio ambiente. En muchos países ya es obligatorio por ley evaluar y supervisar el estado del medio ambiente en los lugares donde se desarrollan, construyen y operan parques eólicos marinos. Sin embargo, estos requisitos legales a menudo se centran en el seguimiento de grupos individuales de organismos (por ejemplo, peces, mamíferos marinos, aves), y no ha habido un enfoque holístico para la recopilación de datos. Gracias a las nuevas tecnologías, la recopilación simultánea de datos y la gestión eficaz de los mismos, el proyecto SeaMe permitirá a RWE considerar el ecosistema en su conjunto.

Uno de los objetivos del proyecto SeaMe es también supervisar los componentes clave de los ecosistemas marinos que normalmente quedan fuera de los programas de seguimiento convencionales, como el fitoplancton pequeño (algas microscópicas) y el zooplancton (por ejemplo, el krill), que desempeñan un papel vital en la alimentación de animales más grandes. Además, se medirán una serie de parámetros físicos como la temperatura, la salinidad y el oxígeno para explicar los posibles cambios en la distribución y abundancia de las especies.

Implementación de técnicas de seguimiento más respetuosas con el medio ambiente

El proyecto conjunto investigará cómo las técnicas innovadoras pueden hacer que el seguimiento sea menos invasivo y más sostenible en comparación con las técnicas de seguimiento actuales. Mientras que los aviones y los barcos se utilizan rutinariamente para monitorear aves y mamíferos, SeaMe pretende reemplazar estos métodos con un dron equipado con un sistema de cámara basado en IA. SeaMe también recogerá muestras de agua y las analizará para detectar ADN ambiental. El seguimiento de los peces mediante vídeo basado en IA se realizará utilizando un vehículo submarino autónomo. Ambos métodos reemplazarán los medios tradicionales de muestreo de los peces mediante redes, haciendo que todo el proceso sea menos invasivo.

Los científicos marinos más destacados aportarán sus conocimientos

El proyecto, de tres años de duración, se llevará a cabo en colaboración con socios destacados, como el Instituto Helmholtz de Biodiversidad Marina Funcional de la Universidad de Oldenburg (HIFMB), el Centro Helmholtz de Investigación Polar y Marina del Instituto Alfred Wegener (AWI), BioConsult SH, la empresa danesa DHI A/S y el Centro Alemán de Investigación para la Inteligencia Artificial (DFKI). El plan es compartir los resultados en una plataforma pública en línea dedicada.

Combinación de la operación del parque eólico y la monitorización medioambiental

Todas las pruebas se llevarán a cabo en el parque eólico marino Kaskasi de RWE, que se encuentra a 35 kilómetros de la costa de la isla alemana de Heligoland. Con una capacidad instalada total de 342 megavatios, el parque eólico es capaz de suministrar el equivalente a aproximadamente 400.000 hogares alemanes con electricidad ecológica. Desde Heligoland, un equipo dedicado de RWE supervisa, opera y mantiene eficientemente el parque eólico, y también brinda apoyo para el proyecto SeaMe.