Cuba prevé instalar 1.000 megavatios de energía fotovoltaica en un par de años

Lograr la capacidad instalada propuesta para 2031 “colocaría a Cuba en un estimado de 12% de penetración fotovoltaica en la generación energética del país”.
En un plazo de dos años, Cuba pretende instalar mil megavatios de energía fotovoltaica a través de dos proyectos que iniciaron en 2024.

En la actualidad, indica Prensa Latina, existen 26 parques solares fotovoltaicos en diferentes fases de construcción en todas las provincias del país.

Citado por Granma, Alfredo López, director general de la Unión Eléctrica, explicó que “las condiciones eléctricas de cada lugar no son exactamente las mismas”, por lo que se requiere “un trabajo exhaustivo, desde el mismo momento en que se inician los estudios hasta seleccionar el lugar donde se ubicará cada uno de ellos”.

Mientras tanto, “ya ??se han instalado cerca de un millón de paneles fotovoltaicos” y se prevé instalar otros 3,6 millones, explicó al medio Lídice Vaillant, jefa del Laboratorio de Investigaciones Fotovoltaicas de la Universidad de La Habana.

Según Vaillant, lograr la capacidad instalada propuesta para 2031 “colocaría a Cuba en un estimado de 12% de penetración fotovoltaica en la generación energética del país”.

El pasado mes de septiembre se presentó la Estrategia de Transición Energética de Cuba durante la Feria Internacional de Energías Renovables y Eficiencia Energética que tuvo lugar en La Habana.

Se trata de un programa bandera del Gobierno para salir, en el corto plazo, del atolladero que representa un puñado de termoeléctricas que padecen obsolescencia tecnológica y el oneroso gasto de cerca de 2.000 millones de dólares en petróleo y sus derivados que hay que adquirir, con una inestable y siempre exigua cobertura financiera en los mercados internacionales. El programa pretende instalar los primeros 10 grandes parques solares en 2025, de un total de 92. Cada uno aportará 22 MW.

Para el próximo año, este primer lote deberá aportar 220 MW, que se sumarán a los 280 MW que ya tiene instalados el país, lo que permitirá reducir los impactos eléctricos en la economía y la población durante el día.

Las interrupciones en el servicio de energía eléctrica afectan a la economía y a los hogares y responden a la prolongada crisis energética que atraviesa la isla.

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