El gobierno alemán dijo el martes que había decidido respaldar a Siemens Energy (ENR1n.DE) con garantías por valor de 7.500 millones de euros (8.100 millones de dólares) como parte de un acuerdo con otras partes interesadas para ayudar a la compañía energética en problemas a cumplir con su cartera de pedidos.
La profundización de los problemas en la unidad de turbinas eólicas de la empresa, Siemens Gamesa, y la posterior decisión de S&P de reducir la calificación crediticia a largo plazo del grupo a BBB-, sólo un escalón por encima de basura, durante el verano habían hecho que los bancos se mostraran más reacios a ofrecer garantías.
Siemens Energy reveló en octubre conversaciones con el gobierno, bancos y la antigua matriz Siemens AG (SIEGn.DE) sobre lo que las fuentes dijeron que eran garantías para el proyecto y bonos de garantía necesarios para salvaguardar la cartera de pedidos de 109.000 millones de euros de la empresa.
«El grupo tiene un problema como consecuencia de la adquisición de la empresa española Gamesa: turbinas eólicas defectuosas, lo que a su vez ha puesto a la empresa, que por lo demás goza de buena salud y tiene una cartera de pedidos llena, en una situación precaria», afirmó el ministro de Economía. dijo Robert Habeck.
La decisión de Berlín de intervenir refleja su visión de Siemens Energy, que fabrica turbinas de gas y eólicas, así como grandes estados convertidores, como fabricante de equipos vitales para la transición del país para alejarse de los combustibles fósiles contaminantes.
Las garantías son parte de un paquete por un total de 15.000 millones de euros acordado con bancos privados y otras partes interesadas y también impondrían una pausa en los dividendos y bonificaciones de mayor nivel en Siemens Energy, dijo el Ministerio de Economía en un comunicado.
Se esperaba que los bancos privados proporcionaran a Siemens Energy garantías por valor de 12.000 millones de euros, mientras que Siemens Energy buscaría otros 3.000 millones de otras fuentes, según el comunicado, añadiendo que estaba condicionado a la aprobación final de todas las partes.
Los 3.000 millones de euros en garantías probablemente provendrán de partes interesadas internacionales como Dinamarca y España, donde Siemens Energy tiene una presencia significativa, dijeron dos personas familiarizadas con el asunto.
GARANTÍAS, NO EFECTIVO
El gobierno proporcionará los 7.500 millones de euros como contragarantía a los bancos privados para que puedan cumplir con sus obligaciones, según el comunicado.
«Estamos satisfechos con el claro apoyo del gobierno alemán a Siemens Energy y el compromiso con la rápida implementación de proyectos para que la transición energética sea un éxito», dijo Siemens Energy en un comunicado.
«Ofreceremos más detalles en nuestra conferencia de prensa anual el 15 de noviembre».
En una declaración separada, Siemens AG dijo que había estado trabajando para encontrar una solución y que compartiría más detalles en una etapa posterior.
Las acciones de Siemens AG y Siemens Energy cerraron con ganancias del 2,75% y del 2,95%, respectivamente, tras la noticia.
Reuters informó por primera vez la semana pasada que todas las partes interesadas habían llegado a un acuerdo de principio para cubrir las garantías, ayudando a las acciones del grupo a recuperarse después de que las noticias de las discusiones empujaron a las acciones a un mínimo histórico el mes pasado.
También se espera que Siemens AG, que escindió Siemens Energy en 2020, brinde apoyo comprando la mayor parte de la participación del 24% que Siemens Energy posee en Siemens Ltd (SIEM.NS), una empresa conjunta india, dijeron fuentes a Reuters.
Siemens AG pagará más de 2.000 millones de euros por alrededor del 18% de Siemens Ltd, lo que elevaría su propia participación en la empresa conjunta a alrededor del 70%, dijeron las fuentes.
El ministro de Justicia, Marco Buschmann, defendió el acuerdo antes del anuncio.
«No se trata de que el Estado salve de algún modo una empresa sin modelo de negocio, una empresa quebrada», dijo Buschmann en una entrevista con RTL y ntv. Destacó que el acuerdo no implicaba subsidios. «No se trata de efectivo, sino de garantías».
