Francia obtiene alrededor del 20 % de su electricidad de fuentes renovables, el 8 % de la energía eólica, pero necesita más para cumplir sus objetivos climáticos al tiempo que refuerza la seguridad energética. La guerra en Ucrania y las interrupciones en su flota de generación de electricidad convencional están poniendo bajo presión el sistema energético de Francia. El gobierno francés está tomando medidas sin precedentes para maximizar la generación de electricidad renovable como parte de la solución.
La energía eólica está disponible localmente y no es necesario importarla de otros países. Es competitivo y no depende del precio de mercado de los combustibles fósiles. Y ahorra dinero a gobiernos y consumidores. La energía eólica contribuirá con 8.000 millones de euros a los ingresos del Estado de Francia en 2022-23: en virtud de los contratos por diferencia (CfD) respaldados por el gobierno, los desarrolladores de proyectos pagan a los gobiernos la diferencia entre el precio de compra de electricidad garantizado por el Estado y el precio del mercado mayorista de electricidad, que actualmente es muy alto debido a la guerra en Ucrania. A medida que se siga implementando más energía eólica, los ahorros aumentarán.
Pero la inflación y los costos más altos de los productos básicos están poniendo en riesgo ciertas inversiones en energía renovable. El gobierno francés estima que 5-6 GW de proyectos eólicos y 6-7 GW de proyectos solares pueden no llevarse a cabo debido al entorno económico actual. Por ello, el Gobierno ha anunciado varias medidas de emergencia para impulsar la generación eléctrica renovable de cara al invierno. Entre ellos se encuentra la posibilidad de que los nuevos parques eólicos y solares vendan su electricidad directamente en el mercado durante 18 meses antes de cerrar sus CfD, y la posibilidad de que los proyectos que ya han ganado una subasta aumenten su capacidad hasta en un 40 % antes de su finalización. . El Gobierno también planea tener en cuenta la evolución de los costos de las materias primas en los Contratos por Diferencia. Estas medidas inmediatas se completarán con una próxima ley de emergencia para acelerar aún más el despliegue de energías renovables en Francia.
Paralelamente, el Gobierno francés duplicó el tamaño de la zona eólica marina planificada de Oléron (océano Atlántico) a 2 GW, tras una consulta pública con más de 15.000 participantes. La elección de la zona eólica refleja la atención prestada al entorno local y la complementariedad de los proyectos de energía limpia con la protección de la biodiversidad. Francia quiere construir 40 GW de energía eólica marina para 2050 repartidos en 50 parques eólicos. El primer parque eólico marino a escala comercial del país, ubicado en St Nazaire, comenzó a enviar electricidad a la red este junio, y en alta mar ya emplea a más de 5.000 personas en Francia. La industria apunta a cuadriplicar esto a más de 20,000 empleos directos e indirectos.
El director de políticas de WindEurope, Pierre Tardieu, dijo: “El gobierno francés está tomando medidas sin precedentes para impulsar la generación de energía eólica y hacer frente a la crisis energética actual. El sector eólico está listo y totalmente comprometido a desempeñar su papel para garantizar el suministro de energía de Francia y Europa. Las medidas de emergencia del Gobierno significan más generación de electricidad en los próximos meses y más seguridad energética para las empresas y los ciudadanos franceses. Al mismo tiempo, el anuncio de una zona eólica de 2 GW frente a la isla de Oléron confirma que Francia se toma en serio sus grandes planes eólicos marinos. Y el amplio proceso de consulta muestra que esto se puede hacer con el apoyo de la comunidad. Y que los proyectos de energía eólica y la protección de la biodiversidad pueden ser mutuamente beneficiosos”.