El 4 de mayo, la Plataforma Europea de Tecnología e Innovación en Energía Eólica (ETIPWind), con el apoyo de WindEurope, reunió a expertos intersectoriales, del sector de la energía eólica, las industrias de compuestos, cobre, cemento, tierras raras y la Comisión Europea, para abordar la desarrollo de nuevos materiales utilizados en turbinas eólicas y reciclaje de aerojeneradores.
La UE se ha comprometido a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 55% para 2030, un hito clave para alcanzar la neutralidad climática para 2050. Para alcanzar estos objetivos, la UE debe acelerar la expansión de la energía eólica a 27 GW de nueva capacidad cada año. Y las turbinas eólicas, como todas las máquinas, tienen una vida útil limitada. 36 GW de capacidad en tierra tienen más de 15 años y llegarán al final de su vida operativa en los próximos 10 años. Estas turbinas se renovarán, se extenderá su vida útil o se darán de baja.
La circularidad y la sostenibilidad serán fundamentales para acelerar la generación de energía eólica de acuerdo con el Pacto Verde Europeo.
En sus palabras de apertura, el responsable de políticas de materias primas de DG Grow Milán Grohol identificó 30 materias primas críticas para tecnologías estratégicas y sectores como la energía eólica que estarán en el centro de la transición energética europea. La obtención de materiales de tierras raras como el neodimio y el disprosio sigue siendo un problema, señaló el representante de la Comisión Europea. Son un componente crítico de los imanes permanentes utilizados en los generadores de turbinas eólicas, pero la mayoría de ellos se obtienen actualmente en China.
La Comisión Europea quiere asegurar el suministro de estos materiales promoviendo la minería en la UE y el reciclaje de materias primas críticas. Esto es parte del trabajo de la Alianza Europea de Materias Primas que la UE estableció en 2020 bajo el Plan de Acción sobre Materias Primas Críticas.
Expertos del sector de la energía eólica demostraron sus últimas innovaciones en el campo del reciclaje. Boliden mostró cómo pretenden crear un modelo circular reciclando metales y proyectos como VALOMAG reciclando imanes permanentes. Pero la aplicación general de estas prácticas debe aumentar.
Hoy en día, se puede reciclar entre el 85% y el 90% de una turbina eólica. Empresas como Geocycle ya reciclan hormigón utilizado en turbinas. Pero siguen existiendo desafíos en el reciclaje de materiales compuestos utilizados en las palas de las turbinas eólicas. Actualmente, estos compuestos se pueden reutilizar en la producción de cemento. Pero el reciclaje de palas sigue siendo una de las principales prioridades de la industria eólica.
Los grandes actores de la industria, como Vestas, han presentado tecnologías que abordarán este problema y harán que las palas de las turbinas sean completamente reciclables en tres años. Y el proyecto Zebra ya ha producido una pala de turbina completamente reciclable.
Otras soluciones tecnológicas también pueden ayudar a crear modelos de turbinas más sostenibles. Empresas como Modvion, SuperNode y Greenspur están haciendo precisamente esto. La construcción de torres de madera y el uso de materiales superconductores e imanes de ferrita fueron algunas de las ideas originales presentadas durante el taller ETIPWind. Algunos de estos ya se aplican en la práctica.
Los participantes acordaron que para seguir apoyando estas diferentes iniciativas, la UE debe seguir invirtiendo en investigación e innovación para diversificar y ampliar las tecnologías de reciclaje y desarrollar nuevos materiales de alto rendimiento. La investigación también debe centrarse en diseños que mejoren la circularidad y la capacidad de reciclaje de las turbinas eólicas. Más I + i e industrialización ayudarán a Europa a mantener su liderazgo tecnológico, aumentar su competitividad y alcanzar sus objetivos climáticos de la forma más sostenible.