EDP prevé invertir unos 2.000 millones de euros en el periodo 2021-2025 y apuesta por el desarrollo de la eólica marina flotante en las costas de Asturias.
En una rueda de prensa con motivo de la presentación del plan estratégico de la energética portuguesa, el director financiero del grupo y consejero delegado de EDP España, Rui Teixeira, señaló que, de esa inversión total en el país, unos 700 millones de euros se destinarán al negocio de Redes y la mayor parte del resto a crecer en renovables, «con una pequeña parte para el área de Clientes y Gestión de Energía».
EDP completó a finales del año pasado el acuerdo con Macquarie Infrastructure and Real Assets para la adquisición de activos de Viesgo por 2.700 millones de euros.
Esta operación permitía a EDP gestionar y consolidar los activos de distribución eléctrica de las tres distribuidoras Viesgo, Begasa y E-Redes, a través de una alianza con Macquarie Infrastructure and Real Assets, donde la lusa mantendrá un 75,1%, y Macquarie Super Core Infrastructure Fund con un 24,9%.
A este respecto, Teixeira confirmó que se mantendrá la marca Viesgo y señaló que se destinarán esos 700 millones de euros al crecimiento orgánico en el periodo de este negocio de Redes.
Parque flotante de 50 MW
En lo que respecta al desarrollo de la eólica marina flotante en las costas de Asturias, Teixeira anunció que EDP está estudiando un proyecto de «escala semi industrial» que podría llegar a tener unos 50 megavatios (MW) de potencia, el doble de WindFloat Atlantic, localizado en aguas de Viana do Castelo (Portugal) y que ha sido el primer proyecto de esta tecnología en Europa, donde tiene por socio a Repsol.
El director financiero de EDP indicó que la eólica marina, donde el grupo también estudia un proyecto en aguas de Canarias, es «parte de una estrategia» para su desarrollo en la costa del Norte de España con el fin de «crear cadenas de suministro y desarrollo industrial» de este negocio.
Por otra parte, Teixeira confirmó que, tal y como marca la nueva ‘hoja de ruta’ del grupo, que establece el abandono de la producción de carbón en 2025 y ser completamente ‘verde’ en 2030, la central de Aboño 2 dejará de producir en ese año.
En 2020, la compañía ya decidió acelerar el cierre de sus centrales de carbón en la Península Ibérica para su planta de Soto 3, mientras que la de Aboño 1 continuaría con su proceso de transformación para la quema de gases siderúrgicos para 2022, siendo así Aboño 2 la única para seguir produciendo con carbón.
Alternativas para Aboño
No obstante, EDP ya está estudiando alternativas para más allá de ese horizonte de 2025 para Aboño, ya que se trata de una planta «muy importante para el tejido industrial de la zona». «Trabajaremos mientras tanto en distintas alternativas reales para el emplazamiento. En ese tiempo tendremos una alternativa pensada», dijo el directivo.
Igualmente, Teixeira también señaló que para la también central térmica asturiana de Soto 3 se manejan algunos proyectos de desarrollo de almacenamiento.
China Three Gorges
Por otra parte, el consejero delegado de EDP, Miguel Stilwell d’Andrade, afirmó no sentirse incómodo con los planes de crecimiento en renovables en España de China Three Gorges, accionista de la energética lusa y que en el último año se ha hecho con una cartera de unos 1.000 MW en el país.
«Tiene su estrategia y creo que la inversión en España está dentro de esa estrategia global. El punto principal es que no haya competencia con EDP, cooperación pero no competencia, que no sean para activos que queramos nosotros. Ellos pueden crecer, pero sin hacer competencia con nosotros. Es posible que quieran hacer más, pero siempre dentro de este marco», indicó, advirtiendo de que si los objetivos de la estatal china fueran ‘pipeline’ o desarrollo entonces sí que sería de su agrado.