Las renovables alcanzan el 43,6% de la generación de energía eléctrica en 2020, su mayor cuota desde que existen registros.
En España, la producción libre de emisiones de CO2 equivalente significó el 66,9% del total y convierte a 2020 en el año con la energía más limpia desde que Red Eléctrica de España cuenta con registros (2007).
El carbón ha recortado un 60% su producción con respecto a 2019, hasta alcanzar los 5.064 GWh y marca su mínimo histórico anual de producción y de participación en el mix de generación español (2% sobre el total).
Red Eléctrica de España ha presentado hoy los principales datos del comportamiento del sistema eléctrico en su previsión de cierre de 2020, un año en el que se estima que la demanda nacional se sitúe en los 249.716 GWh, dato un 5,6% inferior al de 2019.
Las tecnologías renovables produjeron en 2020 el 43,6% de toda la electricidad en España y registran así su mayor participación en el mix de generación desde que se cuenta con registros (año 2007), según los datos presentado por Red Eléctrica de España (REE) hoy en su previsión de cierre de año, que adelantan las principales magnitudes del año basadas en previsiones a día 11 de diciembre. La cuota de producción verde de 2020 es 6,1 puntos porcentuales superior a la de 2019 y está 3,2 puntos porcentuales por encima del anterior máximo de participación anual, registrado en 2014.
Así, España generó 109.269 GWh de electricidad de origen renovable en 2020, un 11,6% más que en 2019; a pesar de que el total de producción eléctrica fue un 4% inferior, hasta alcanzar los 250.387 GWh. La eólica, responsable de algo más de la quinta parte de toda la producción (21,7%), fue la renovable con mayor presencia en una estructura de generación liderada por la nuclear con el 22,2% y seguida por el ciclo combinado (que aporta el 17,8% del total), la hidráulica (11,9%), la cogeneración (10,8%) y la solar fotovoltaica que, con un aumento interanual de su generación del 65,9%, ocupa a cierre de este año el 6,1% de la estructura de generación nacional.
Otra de las tecnologías protagonistas del año es el carbón, que ha recortado un 60% su producción con respecto a 2019, hasta alcanzar los 5.064 GWh y registrar su mínimo histórico anual de producción y de participación en el mix de generación español (2% sobre el total).
Las previsiones de cierre de 2020 publicadas hoy por Red Eléctrica adelantan algunos de los primeros resultados del avance de la transición energética en la que el Gobierno de España está inmersa de la mano de su Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), cuya meta es que el 74% de toda la generación eléctrica española de 2030 sea de origen renovable.
Un parque de generación cada vez más renovable
Este auge de producción renovable ha empujado a 2020 a ser también el año con mayor producción libre de emisiones de CO2 equivalente desde que se cuenta con registros (2007). Así, y siempre según las previsiones de cierre de año publicadas por Red Eléctrica de España, el 66,9% de todos los GWh de electricidad generados en 2020 proceden de tecnologías que no emiten gases de efecto invernadero a la atmósfera. Así, las emisiones derivadas de la generación de electricidad se han reducido un 27,3% respecto a las de 2019.
El máximo de la cuota de producción de energía verde y limpia de este 2020 se debe, principalmente, a las condiciones climáticas favorables a un mayor empleo de viento y sol como combustibles naturales y al incremento de la potencia renovable instalada en el parque de generación español, que en 2020 suma 2.706 nuevos MW de eólica y solar fotovoltaica, a la vez que reduce en 3.486 MW la presencia de tecnologías contaminantes, centrales térmicas de carbón en su mayoría. Con todo, la potencia instalada española cuenta a día de hoy con 109.674 MW de los que el 53% pertenecen a tecnologías renovables.
De aquí al cierre definitivo del año se espera una variación de este dato, entre otros motivos, por la incorporación de nueva potencia renovable y la baja de los grupos 1 y 2 de la central térmica de Guardo (en Palencia), que representan una reducción de 486 MW de potencia contaminante en el parque de generación español.
La demanda de electricidad se resiente ante los efectos de la COVID-19
En 2020, la demanda de energía eléctrica del sistema eléctrico español se estima en 249.716 GWh, un 5,6% menos que la de 2019. Si se tienen en cuenta los efectos de la laboralidad y las temperaturas, el descenso de la demanda de electricidad nacional se mantiene en un 5,6% promovido, principalmente, por la presencia de la pandemia de la COVID-19 que ha ralentizado la actividad económica hasta alcanzar, en algunas situaciones, disminuciones de hasta un 20% en relación con periodos equivalentes del año anterior. Por sistemas, ha sido el balear el que ha acusado el mayor descenso (19,6% respecto a su demanda de 2019), seguido por el canario (10,3%), el peninsular (5,1%), el ceutí (3,7%) y el melillense (0,9%).
El 20 de enero de 2020 a las 20:22 horas fue el instante en el que se registró el máximo de demanda en el sistema eléctrico peninsular, que alcanzó un consumo de 40.423 MW, cifra ligeramente inferior a la obtenida en 2019, que fue de 40.455 MW. La punta de consumo peninsular de 2020 está 11,1 puntos por debajo del máximo histórico de 45.450 MW, alcanzado en 2007.
Continuando con la tendencia experimentada en los últimos cinco años en los intercambios internacionales de energía física, el sistema eléctrico peninsular cierra 2020 con un saldo importador de 3.857 GWh, un 43,8% inferior al obtenido en el ejercicio anterior. El saldo de intercambio es el resultado de la importación de 18.687 GWh y la exportación de 14.830 GWh realizadas durante este año.