La energía eólica alcanzó el nivel más alto con aerogeneradores desde octubre del año pasado y la solar, el volumen más alto desde el inicio de la serie histórica, que arrancó en 2018. Se espera que a fines de año se alcancen nuevos récords.
Con el inicio de la temporada de fuertes vientos, Ceará registró, el pasado domingo (30), el nivel más alto de generación eólica de este año, con 1.236,5 MWmed (megavatios promedio). Esta fue la más alta registrada desde el 8 de octubre de 2019, cuando la generación fue de 1.326,5 MW, la más alta registrada por el Operador del Sistema Eléctrico Nacional (ONS) desde enero de 2010, cuando comenzaron los registros de generación eólica.
Por otro lado, las plantas solares en Ceará conectadas al Sistema Interconectado Nacional (SIN) generaron, el 24 de agosto, 73,9 MW, el mayor volumen de la serie histórica, que inició en noviembre de 2018. A pesar de los resultados aún en agosto, la expectativa es que estas dos fuentes alcanzan nuevos récords a finales de año, ya sea por el aumento de la intensidad de los vientos o por la mayor incidencia solar, especialmente en diciembre.
«Estamos en el período que llamamos ‘cosecha de los vientos’, que se extiende hasta más o menos noviembre. Hasta entonces, por lo tanto, podemos tener nuevos récords en el Nordeste, que concentra gran parte de los parques eólicos en Brasil, alrededor del 80% de ellos», dice Elbia Gannoum, presidenta de la Asociación Brasileña de Energía Eólica (Abeeólica).
“Tenemos que considerar la curva esperada para el año, que siempre es de mayor generación en esta época del año, siendo los primeros meses del año más bajos”, dice Gannoum. “El Nordeste en su conjunto concentra gran parte del potencial brasileño y Ceará es parte de él con protagonismo, siendo hoy el tercer estado en capacidad instalada”, dice.
A diferencia de otras matrices energéticas, la eólica y la solar no dependen de la demanda para producir, por lo que incluso con la caída del consumo energético, debido a la desaceleración económica, estas matrices seguirán con niveles máximos de generación. Jurandir Picanço, consultor energético de la Federación de Industrias del Estado de Ceará (Fiec), dice que la producción eólica y solar contribuye a preservar el nivel de las represas hidroeléctricas y el combustible de las centrales térmicas.
«La producción eólica y solar se realiza de acuerdo con lo que se instala y la incidencia del viento y el sol. Independientemente de la demanda. Por eso las renovables ayudan a preservar otras fuentes», dice Picanço. “Además de estar en la mejor época de viento, tenemos un mayor número de parques eólicos en funcionamiento, por lo que deberíamos tener nuevos récords a finales de año”.
Según Jonas Becker, coordinador de la Asociación Brasileña de Energía Solar Fotovoltaica (Absolar) en Ceará, a principios de año la expectativa era que el segmento de generación solar instalaría 3 gigavatios más (GW) en el país. Pero, luego de la pandemia, el valor se ha ajustado a aproximadamente 1 GW. “Incluso con esta crisis, el mercado de la energía solar, a diferencia de otros sectores, creció este año. No era la expectativa que teníamos, pero en este contexto, es un resultado positivo”, dice.
Para el cuarto trimestre, Becker estima que las perspectivas son «muy buenas» para el sector debido a la reanudación de actividades en el país y en el mundo, y deberían mantenerse durante el próximo año. “Si bien nuestro producto es de importación, que tiene debilidades cambiarias, tenemos una muy buena perspectiva en cuanto a políticas públicas y con un financiamiento más atractivo. Por eso creemos que el escenario previsto para 2020 pasará en 2021”, dice. “Nos ha ido bien en la búsqueda de un desarrollo económico sostenible”.
Según datos de la Agencia Nacional de Energía Eléctrica (Aneel), Ceará cuenta actualmente con 86 parques eólicos en operación, con una capacidad instalada de 2.187,9 MW. Y para los próximos años, se espera agregar 176,4 MW adicionales para 7 proyectos en construcción y 267,6 MW para 10 proyectos ya contratados con construcción aún no iniciada.
En cuanto a la matriz solar, el Estado tiene ocho proyectos en operación, con 218 MW, y en los próximos años recibirá una inyección de 2.036,5 MW, refiriéndose a 56 proyectos con construcción no iniciada. «Con nuevas subastas o nuevos contratos, especialmente en el mercado libre, que ha crecido mucho, estas cifras pueden crecer», dice Elbia Gannoum.
El presidente de Abeeólica apunta, sin embargo, que la caída de la demanda por la pandemia tiende a dejar más reducidas las próximas subastas del mercado regulado, ya que habrá excedentes de energía. “El mercado libre, sin embargo, ha venido creciendo mucho y, en el caso de la eólica, ya representa, desde 2018, un volumen de contratos superior al del mercado regulado”, dice.
Otro factor que debe impulsar el sector eólico en el Estado es la viabilidad de los proyectos de parques eólicos marinos (con aerogeneradores en el mar). En enero se abrió una consulta pública para la concesión de licencias de este tipo de proyectos, lo que permitió la evaluación de proyectos de factibilidad para parques en Caucaia y Camocim.
Según el Atlas de Potencial Eólico y Solar de Ceará, presentado a fines del año pasado, el potencial de generación costa afuera en Ceará es de 117 GW, con un factor de capacidad del 62%, y a baja profundidad.
El relevamiento reveló la posibilidad de generación eólica en un área de 10.000 kilómetros cuadrados, donde la profundidad es de hasta 20 metros. Si se consideran regiones con hasta 50 metros, el área cambia a 19 mil kilómetros cuadrados. Uno de los aspectos que plantea el atlas, que coloca a Ceará en una posición ventajosa en relación a otros estados, son las horas punta en la generación eólica.