“Al contrario que otras economías, el proceso de electrificación puede llevarse a cabo directamente con fuentes sostenibles sin tener que pasar, como ha ocurrido en otros países, por generación con combustibles fósiles que en este momento está en proceso de cierre”, ha explicado Galán.
“El fortalecimiento de la colaboración y diálogo entre gobiernos, instituciones y empresas privadas en Iberoamérica es más crítico que nunca para avanzar hacia un sistema energético sostenible y competitivo, generando a su vez crecimiento, empleo y bienestar social”, ha asegurado esta tarde el presidente de Iberdrola, Ignacio Galán.
Durante su intervención virtual en la presentación del informe Una transición energética innovadora y sostenible en América Latina, organizada por la Fundación Iberoamérica Empresarial, Galán ha apuntado, asimismo, que “aquellas geografías que tengan marcos más estables, predecibles, atractivos y pragmáticos, y garanticen una mayor seguridad jurídica, serán los beneficiarios de las inversiones masivas y creación de empleo para cientos de miles de personas que supone la descarbonización”.
En el transcurso de su ponencia El papel del sector privado para garantizar una oferta energética sostenible, el presidente de Iberdrola ha destacado que, bajo esas condiciones, la compañía está más que comprometida a seguir liderando este proceso: “Como empresa española, iberoamericana y global, queremos contribuir a ser acelerador de la sostenibilidad y ayudar con nuestra actividad a generar empleo y crecimiento económico”.
De hecho, Iberdrola lleva más de 20 años impulsando el desarrollo de Iberoamérica a través de inversiones de más de 20.000 millones de euros, que le han permitido convertirse en un referente en generación de energía, produciendo a día de hoy más electricidad que en España, y suministrar, a través de los 700.000 kilómetros de redes de la compañía, electricidad a cerca de 40 millones de personas en la región.
Para Galán, “Iberoamérica cuenta con todo lo necesario para situarse a la cabeza del tren de la economía verde, gracias a sus recursos naturales hidroeléctricos, eólicos y solares y al esperado crecimiento de la demanda de electricidad que, según los expertos de la ONU, podría triplicarse para 2050”. Además, ha explicado, “al contrario que otras economías, el proceso de electrificación puede llevarse a cabo directamente con fuentes sostenibles sin tener que pasar, como ha ocurrido en otros países, por generación con combustibles fósiles que en este momento está en proceso de cierre”.
Pero, para aprovechar esta oportunidad, “es necesario invertir de forma decidida en tecnologías renovables, en redes eléctricas y sistemas de almacenamiento que aporten flexibilidad para su integración”, ha expuesto el presidente de Iberdrola.
Asimismo, Ignacio Galán ha destacado en su intervención que “los beneficios asociados a las energías limpias no se limitan solo a la conservación del medio ambiente, la mejora de la calidad del aire y la competitividad, sino que además presentan muchas oportunidades de crecimiento económico y social”. En esta línea, ha subrayado la reducción de la dependencia energética exterior, lo que repercute en una mejor balanza de pagos y garantía de suministro, o el fortalecimiento del tejido industrial, con generación de empleo de calidad.
Galán ha participado en una mesa de diálogo público y privado junto a la secretaria general iberoamericana, Rebeca Grynspan, En la presentación del citado informe también han participado otras personalidades como Teresa Ribera, vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico del Gobierno de España; Agustín Aguerre, gerente del Sector de Infraestructura y Energía del Banco Interamericano de Desarrollo, o Josep Piqué, presidente de la Fundación Iberoamericana Empresarial.