La compañía prevé reducir en un 22% la intensidad de CO2 en generación eléctrica y que el 34% de su capacidad de generación sea de origen renovable. La compañía ha puesto en marcha una batería de medidas que están en línea con el objetivo global de frenar el aumento de la temperatura del planeta a 1,5 grados.
Naturgy consiguió ya importantes avances en 2019, al reducir un 16% sus emisiones de CO2, un 25% el uso de agua en sus actividades, generó un 66% menos de residuos y revalorizó o recicló el 57% de los residuos producidos, entre otros logros.
Este esfuerzo realizado por Naturgy ha sido posible gracias a que durante 2019 destinó un total de 546 millones de euros en materia de protección ambiental.
La compañía crea una Comisión de Sostenibilidad, encargada de velar y supervisar el papel de la compañía en la transición energética.
Naturgy está inmersa en un proceso de transformación para adaptar su negocio hacia un modelo más sostenible. Por ello, el grupo ha redoblado sus esfuerzos en medio ambiente, acción social y buen gobierno corporativo (ESG, por sus siglas en inglés) en los dos últimos años y ha fijado nuevos objetivos en esta materia medioambiental para el 2022 para reducir sus emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) en, al menos, un 21% en el 2022 respecto al 2017, reducir en un 22% la intensidad de CO2 en generación eléctrica y que el 34% de la capacidad de generación sea de origen renovable.
Para conseguirlo, la compañía trabaja en una batería de medidas que están en línea con el objetivo de global de frenar el aumento de la temperatura del planeta a 1,5 grados y con acciones específicas para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, reforzar la gobernanza en medio ambiente y cambio climático, impulsar el gas renovable y la economía circular y la protección de la biodiversidad y el desarrollo del capital natural.
La compañía ya tiene en marcha una nueva Política y Plan Global de Medio Ambiente, que recoge líneas de actuación para el 22 y cuyo año base para el cálculo de todos los objetivos es 2017, con el fin de reflejar la evolución ligada el Plan Estratégico 18-22. Así, los principales objetivos de esta hoja de ruta sostenible a 2022 se centran en:
- Reducir un 21% las emisiones de gases de efecto invernadero en el año 2022 respecto a los valores de 2017.
- Reducir un 22% las emisiones específicas de CO2 de la generación eléctrica.
- Alcanzar en 2022 un porcentaje de potencia renovable en el mix de generación eléctrica superior al 34%.
- Disminuir un 20% el consumo de agua en el año 2022.
- Reducir un 70% la producción de total de residuos (peligrosos + no peligrosos).
- Duplicar en 2022 el porcentaje de residuos reciclados y valorizados.
- Realizar al menos 300 iniciativas de biodiversidad al año.
El presidente de Naturgy, Francisco Reynés, explicó que “esta nueva estrategia medioambiental parte de la premisa del Plan Estratégico que considera que la transición energética es una oportunidad, donde la compañía quiere formar parte y ser un agente activo con determinación y donde puede aportar su expertise y su visión global”.
Logros ya alcanzados
Sólo en 2019, la compañía redujo un 16% sus emisiones de CO2, un 25% el uso de agua en sus actividades, generó un 66% menos de residuos y revalorizó o recicló el 57% de los residuos producidos, entre otros logros. Si bien algunas de estas mejoras superan los objetivos del Plan de Medio Ambiente, esto no significa que se hayan cumplido ya que el año de referencia es el 2022.
Es de destacar el importante impulso en tecnologías limpias. Así la compañía se convirtió el pasado año en uno de los principales inversores en renovables, con un esfuerzo inversor de más de 1.000 millones de euros, y aumentó el peso de estas energías hasta el 27% en su mix energético, hasta los 4.500 MW, donde destaca el fuerte despliegue desarrollado en España a través de la puesta en marcha de 667 megavatios eólicos y 250 MW de energía solar, así como los proyectos que se están desarrollando en Chile y Australia. Naturgy también fue la primera compañía en solicitar el cierre de todas sus plantas de carbón.
En lo que se refiere a biodiversidad, se desarrollaron 257 iniciativas, alcanzándose una superficie restaurada ambientalmente superior a las 2.600 ha, 60% de las cuales corresponden a espacios protegidos o hábitats de especies protegidas.
Por todo ello, el índice CDP otorgó el pasado año la máxima calificación a Naturgy (A List), siendo la única energética española y una de las cinco utilities a nivel global en conseguirlo.
Estos esfuerzos continúan dando sus frutos, de tal modo que en este ejercicio la compañía es una de las finalistas por primera vez en su historia en los Premios Europeos de Medio Ambiente a la Empresa (Premios EBAE, por sus siglas en inglés), otorgados por la Comisión Europea y que son los más relevantes del sector.
Otro de los aspectos positivos de 2019 lo arroja el balance entre las emisiones realizadas y las evitadas. Las emisiones evitadas de CO2 representaron en 2019 un total de 151 MtCO2, de las cuales la mayor parte (92%) son debidas al uso del gas natural como sustituto de otros combustibles fósiles más emisores. Por primera vez, en 2019, las emisiones evitadas superaron las emisiones totales del grupo, considerando tanto las directas, como las indirectas. Así, el balance climático se ha situado en el 104% a favor de las emisiones evitadas, lo que refleja el avance y contribución de Naturgy hacia una economía descarbonizada.
Respecto al cambio climático, la semana pasada Naturgy hizo público su Informe de Huella de Carbono correspondiente al ejercicio 2019. Este informe se viene publicando ininterrupidamente desde el 2010, siendo este año la undécima edición.
En un entorno de creciente interés en este tipo de información, sumado a la relevancia de primer nivel que el cambio climático tiene en la agenda internacional, el Informe de Huella de Carbono es una información de gran valor que Naturgy ofrece todos sus grupos de interés, en especial inversores y analistas.
El informe cumple con el más alto estándar de información en materia de cambio climático, el dictado por el Financial Stability Board, el organismo internacional de los mercados financieros.
El contenido del informe está verificado por una tercera parte independiente acreditada, siguiendo así los criterios de transparencia fijados por el grupo.
La transformación que está acometiendo la compañía, de la mano de su Plan Estratégico, tiene un especial énfasis en la descarbonización de sus negocios. El reflejo que esta transformación tiene en las políticas internas del grupo, en los indicadores clave de cambio climático, en los objetivos de reducción de emisiones o en la evolución del inventario de emisiones, cobran especial protagonismo gracias a este informe.
Destaca el Inventario de Gases de Efecto Invernadero del grupo y que da información tanto sobre las emisiones directas producidas en nuestras instalaciones, como de las indirectas, generadas fuera del ámbito de nuestras instalaciones, aguas abajo o aguas arriba de nuestras actividades.
Innovación: desarrollo del biometano
Por otro lado, Naturgy sigue avanzando en el desarrollo del biometano como exponente de combustible autóctono, neutro en carbono, renovable, circular y dinamizador de la economía rural, que además resuelve los impactos generados por los residuos a partir de los que se genera. Naturgy puso en marcha dos proyectos de innovación en gas renovable durante el pasado ejercicio y realizó por primera vez en el país la inyección de biometano en la red de distribución de gas.
Esta nueva estrategia medioambiental también tiene su impacto en el cliente. Naturgy considera que el cambio climático es un reto ambiental a nivel global y se compromete a ofrecer a sus clientes productos y servicios energéticos ecoeficientes y menos intensivos en CO2 para contribuir a la mitigación del cambio climático y a la transición energética. Un ejemplo de ello es el producto Gas Neutro, mediante el que Naturgy ofrece a sus clientes un servicio de suministro de gas natural compensado mediante la neutralización de sus emisiones de CO2.
Este esfuerzo realizado por la compañía ha sido posible gracias a que durante el ejercicio se ha destinado un total de 546 millones de euros en materia de protección ambiental, la mayor cifra alcanzada en la historia de la compañía, que han contribuido a impulsar la transición energética, aumentar la ecoeficiencia de las operaciones y activar las iniciativas de protección de la biodiversidad.
Buen Gobierno Corporativo
Reynés, explicó que de esta manera “la compañía avanza significativamente en materia ESG para generar valor sostenible a largo plazo para todos nuestros públicos de interés y fortalecer nuestra compañía, siempre respetuosa con el medio ambiente. Continuaremos reforzando nuestro compromiso con la seguridad y la salud, así como nuestra Política de Responsabilidad Corporativa”.
En este sentido, la compañía ha creado asimismo una Comisión de Sostenibilidad, encargada de velar y supervisar el papel de la compañía en la transición energética, así como de reforzar el compromiso del Consejo en esta materia. Esta Comisión se suma a la de Nombramientos, Retribuciones y Gobierno Corporativo y a la de Auditoría y Control.
Los consejeros de esta nueva Comisión son: Dña. Helena Herrero (presidenta), Dña. Lucy Chadwick, Dña. Isabel Estapé, D. Claudi Santiago y D. José Antonio Torre de Silva.
Con la puesta en marcha de esta nueva Comisión, Naturgy refuerza el trabajo que ya viene desarrollando en materia de sostenibilidad, con el objetivo de mantener su liderazgo como una compañía responsable, confiable, íntegra, transparente y comprometida con sus grupos de interés. La compañía ya es un referente en materia de sostenibilidad y se ha reforzado en los últimos años en los principales índices internacionales, como el prestigioso Dow Jones Sustainability o el FTSE4Good, así como en las referencias de Vigeo, Sustainalytics y Oekom.
La Comisión de Sostenibilidad tendrá, entre otras, las funciones de análisis periódico de los indicadores en el ámbito medioambiental, de salud y seguridad y de responsabilidad social, de las expectativas de los distintos grupos de interés de la Compañía y la elaboración de los informes y propuestas de actuación, dentro de su ámbito, para la consideración del Consejo de Administración.