Con el Plan Eólico Canario 2018 la energía renovable pasará de cubrir el 7,8% de la demanda en 2017 a alcanzar una cifra cercana al 20% en 2018.
Canarias es en la actualidad un referente de la integración de renovables a nivel europeo. La lucha contra el cambio climático se ha convertido en un reto particularmente relevante para los territorios insulares del continente y este archipiélago ocupa hoy un lugar destacado entre aquellas regiones de la UE que afrontan la descarbonización de la economía con soluciones tecnológicas limpias y de vanguardia.
Tal es así que la Comisión Europea ha elegido Canarias, y más concretamente la isla de Lanzarote, para celebrar este lunes en España el II Foro ‘Clean Energy for EU Islands’, un encuentro promovido por la CE y los 14 Estados miembros que cuentan con islas, y en el que se presentarán las mejores soluciones de integración de renovables que se han adoptado hasta el momento en los sistemas insulares del viejo continente.
Se trata de un paso más en las políticas de sostenibilidad insulares, después de que la Comisión Europea y los Estados miembros firmaran en mayo de 2017 la declaración política “Clean Energy for EU Islands” para disminuir la dependencia en combustibles fósiles de los archipiélagos.
La celebración de este foro en Lanzarote es una prueba evidente de que el modelo de integración de renovables en Canarias es uno de los ejemplos más destacados en el ámbito europeo y de que las islas españolas además de estar a la vanguardia de la transición energética son hoy en la UE uno de los principales proyectos piloto de esta transición.
El despliegue de energías renovables está siendo un reto y una oportunidad para las islas, pero también para Red Eléctrica de España, que desde el año 2010 está trabajando en el desarrollo de las infraestructuras necesarias para hacer frente a esta transición energética y que es la responsable directa del desarrollo de la red de transporte que permitirá la integración de la generación renovable prevista en el archipiélago.
Inversiones de 2.800 millones sitúan a Canarias a la vanguardia de la transición
De la apuesta de Red Eléctrica por Canarias da buena cuenta el volumen de inversiones previstas en esta comunidad autónoma entre 2010 y 2025, superior a los 2.800 millones de euros; y también el despliegue de infraestructuras y proyectos tecnológicos que la compañía está acometiendo en la región: desde el plan eólico y las interconexiones entre islas hasta la renovación y mejora de todas las infraestructuras ya existentes sin necesidad de cortar el suministro (proyecto MAR) y la puesta en marcha de la central hidráulica de bombeo reversible Soria Chira.
Para situarse a la cabeza de la Unión Europea en la integración de energías renovables en sistemas aislados, Canarias necesita además de una red de transporte robusta, mallada e inteligente, capaz de realizar una gestión altamente eficiente de la demanda, interconexiones entre islas, que otorguen seguridad eléctrica, y una notable capacidad de almacenamiento al servicio de la operación del sistema.
Sin el apoyo de las interconexiones y el almacenamiento a gran escala no sería posible integrar toda la producción renovable, teniendo que asumir notables vertidos de energía. Además, requeriría un mayor respaldo de generación térmica, lo que implicaría mayores emisiones y costes.
En definitiva, la meta es integrar las fuentes de energía limpia y al mismo tiempo asegurar un suministro energético de calidad a un precio competitivo. En Canarias y en el conjunto de los territorios insulares de la Unión Europea. Así, de este mosaico de pequeños bancos de pruebas que pueblan los mares y los océanos del continente están emergiendo soluciones eficientes y exportables al resto del mundo para avanzar en el programa mundial de descarbonización.
Estos son algunos de los proyectos más emblemáticos de la transición energética en el archipiélago, proyectos todos ellos que permitirán reducir notablemente el sobrecoste eléctrico en las islas. Cada MW de renovable, además de ser limpio, supone un importante ahorro energético para un sistema que ha venido quemando más de un 90 por ciento de fuel.
Plan Eólico de Canarias 2018: 434 millones para pilotar la transición energética
El mejor ejemplo de lo que está suponiendo y supondrá la transición energética en Canarias es el Plan Eólico 2018, un enorme desafío al que nos estamos enfrentado en esplendida coordinación con los promotores eólicos y con las autoridades del archipiélago.
Este plan está formado por un nuevo cupo de proyectos de generación eólica de 403,2 MW, los cuales deben estar conectados y evacuando antes de que termine el año. Para entender la dimensión del reto es oportuno recordar que la potencia eólica instalada en Canarias antes de que se pusiera en marcha el cupo era de 164 MW. Con el Plan Eólico Canario 2018 la energía renovable pasará de cubrir el 7,8% de la demanda en 2017 a poder alcanzar una cifra en el entorno del 20% con la nueva potencia instalada al finalizar 2018.
Red Eléctrica ha ejecutado todas las instalaciones de la red de transporte (líneas y subestaciones) necesarias para la evacuación de los futuros parques eólicos, con el objetivo de llegar a las fechas comprometidas, y está realizando un importante esfuerzo en gestionar el acceso y la conexión de los promotores solicitantes y en tramitar los proyectos de las instalaciones. La inversión prevista asciende a 434 millones de euros.
Central hidroeléctrica de bombeo Soria-Chira: más de 300 millones para garantizar el almacenamiento
Una de las principales características de la energía eléctrica es su limitación para el almacenamiento en grandes cantidades y a largo plazo, y por lo tanto es necesario un equilibrio instantáneo entre generación y demanda (generar la energía en el momento en que se consume).
Además las energías renovables presentan ciertas características singulares motivadas, principalmente, por la elevada variabilidad de su producción, determinada por las cambiantes condiciones ambientales, así como la por la incertidumbre en su predicción.
Este hecho, unido a que las islas Canarias son sistemas eléctricos pequeños y aislados, y por lo tanto más vulnerables ante perturbaciones, hace que sea clave introducir sistemas de almacenamiento de energía, como las centrales hidroeléctricas reversibles, cuya finalidad principal es la garantía del suministro, la seguridad del sistema y la integración de energías renovables no gestionables.
El proyecto de la central hidroeléctrica de bombeo de Soria-Chira es un claro ejemplo de ello y sus beneficios son evidentes: mayor integración de energías renovables (se podrán aprovechar los excedentes renovables); mayor garantía de suministro (el operador del sistema dispondrá, de forma rápida y eficiente, de 200 MW de potencia); mayor seguridad del sistema (mediante su capacidad de regulación permitirá compensar la variabilidad de la producción renovable manteniendo estables los valores de frecuencia); mayor independencia energética y disminución de costes (reducirá las importaciones de combustibles fósiles, más caros y contaminantes) y reducción de emisiones.
Con una inversión que superará los 300 millones de euros, la central de Soria-Chira contará con 200 MW de potencia, lo que representa alrededor del 36 % de la punta de demanda actual de Gran Canaria. El proyecto incluye la construcción de una planta desaladora de agua de mar y las obras marinas asociadas, así como las instalaciones necesarias para su conexión a la red de transporte para poder evacuar dicha energía al sistema.
En este momento estamos en fase de evaluación ambiental. Durante este proceso se han analizado todas las alegaciones y propuestas de los distintos grupos de interés con el objetivo de incorporarlas mejorando el proyecto. Una vez tramitadas estas modificaciones a finales de 2018, el proyecto estará en disposición de ser autorizado para poder cumplir con el objetivo de iniciar las obras en 2019.
En Tenerife, estamos en fase de estudios previos según prevé el Real Decreto 738/2015. Hemos identificado los emplazamientos preferentes, los cuales se están analizando con el máximo detalle para seleccionar el óptimo. Una vez seleccionado, este deberá ser aprobado por el Ministerio para la Transición Ecológica y ordenada su ejecución a REE según prevé la normativa.
Proyecto MAR: 274 millones para renovar y mejorar la red sin interrumpir el suministro
Red Eléctrica adquirió los activos de transporte insulares -66 kV, 132 kV y 220 kV- de Endesa en el año 2010, y esta compra supuso la consolidación de la compañía como transportista único y operador del sistema eléctrico en Canarias y Baleares, siguiendo el modelo ya existente en la Península.
En 2011 Red Eléctrica inició un programa de actuaciones en el archipiélago canario cuyo objetivo era integrar y mejorar las instalaciones de la red de transporte según los estándares de calidad de las infraestructuras de REE en la Península.
Para tal fin, entre 2011 y 2017 REE ha invertido 274 millones de euros en tareas de renovación, mejora y mantenimiento, de los que 126 millones se han destinado al Proyecto de Mejora de Activos de RED (Proyecto MAR) y 148 millones a un plan de mantenimiento específico de las instalaciones del archipiélago.
El plan ha supuesto la revisión integral de más de 2.000 km de líneas y medio centenar de subestaciones, la sustitución de 457 apoyos y de 132,74 km de cable de conductor, la integración y adecuación de 340 posiciones, la renovación de 8.668 cadenas de aislamiento, la repotenciación de 108 interruptores, la revisión y mantenimiento integral de 16 transformadores, la aplicación de pintura y tratamiento anticorrosivo en cerca del 80 % de las instalaciones de transporte eléctrico del archipiélago, el incremento de 54 a 2.404 el número de los equipos de telecomunicaciones y la instalación de 259,25 km de fibra óptica y revisión y mantenimiento de 610,05 km.
La ejecución de estas actuaciones ha permitido reducir considerablemente el tiempo de interrupción medio (TIM) de 244 minutos en el 2010, año previo a la adquisición de los activos por parte de Red Eléctrica, a solo 3 minutos alcanzados en el 2017.
Interconexiones entre las islas: más de 100 millones para dar seguridad al sistema eléctrico
Los enlaces eléctricos entre islas son imprescindibles para conseguir unos sistemas eléctricos más estables, robustos y resilientes, y, por lo tanto, más capaces de absorber fuentes de producción de alta variabilidad como son las renovables, además de promover una mayor eficiencia ambiental, reduciendo las emisiones de CO2 y económica del sistema eléctrico resultante de las islas conectadas.
El sistema eléctrico canario cuenta con seis sistemas eléctricamente aislados, siendo las dos únicas islas que están unidad las de Lanzarote y Fuerteventura con un cable de 66 kV.
Para abordar la transición energética, está previsto la instalación de tres enlaces más:
Enlace submarino Lanzarote y Fuerteventura (132 kV)
La nueva interconexión Fuerteventura-Lanzarote a 132 kV ha obtenido ya la Declaración de Impacto Ambiental este año, por lo que es previsible su inminente autorización por parte de la administración autonómica. En tal caso, las obras comenzarán en 2019.
Enlace submarino Tenerife y La Gomera (dos enlaces de 66 kV)
Se presentará a trámite el proyecto de ejecución y el EIA (Estudio de Impacto Ambiental) una vez se obtenga la declaración de singularidad.
Enlace Submarino Fuerteventura – Gran Canaria (incluido en el Anexo II de la planificación)
La otra interconexión prevista, la Gran Canaria-Fuerteventura, está incluida en el anexo 2 de la planificación de la red de transporte de electricidad 2015-2020, situación que nos faculta para acometer los estudios técnicos de viabilidad, los cuales avanzan según lo previsto. Esta importante interconexión deberá confirmarse en el próximo ejercicio de planificación donde se concretará la fecha de puesta en servicio.