El viento y el sol como negocio

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Las energías renovables, como la eólica y la solar, ganan terreno en el mundo. Su impacto en el planeta es mucho menos nocivo que el de las energías fósiles. Pero no solo eso, también son un buen negocio.

El ingeniero uruguayo Marcelo Mula, director ejecutivo de Tecnogroup —el conglomerado de empresas uruguayas más importantes en el manejo de energías renovables-, explicó los motivos que atraen este tipo de inversiones a la región.

«América Latina es atractiva porque tiene el recurso, tanto solar como eólico. El recurso solar por ejemplo, en algunas regiones es el mayor del mundo: en el norte de Chile, el norte de Argentina, el sur de Bolivia, entre otros», dijo Mula.

La rentabilidad en áreas con mejor presencia de sol o viento puede llegar a ser el ‘doble’ en el continente latinoamericano en comparación con otras zonas del mundo. Pero quienes destinan dinero en este rubro tienen rasgos particulares, ya que prefieren la seguridad antes que la celeridad. «Se encuentran fondos que buscan bajo riesgo, a largo plazo. Es una inversión que tú haces con un período de repago un poco elevado. Unos 10 años o más y a una tasa relativamente baja».

Los países que más avances tienen en este cambio de matriz y más han invertido son Chile, Uruguay y Brasil, aunque México también ha hecho esfuerzos. El Salvador, Perú, Bolivia y Argentina están en una fase incipiente, mientras que Colombia se encuentra más rezagada.

Sobre la rentabilidad para los gobiernos y los términos en que se dan estos contratos se trata este Contante y Sonante.

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