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Apple ha anunciado dos nuevos programas con el objetivo de reducir la huella de carbono de sus fabricantes colaboradores en China, donde la empresa cuenta con 19 oficinas y 24 tiendas. Estos programas evitarán la emisión de más de 20 millones de toneladas de gas de efecto invernadero en el país hasta 2020, el equivalente a sacar de la carretera casi 4 millones de vehículos de pasajeros durante un año.
Apple ha anunciado también la finalización de varias plantas solares con una capacidad total de 40 megavatios en la provincia de Sichuan. Estas instalaciones producen más electricidad de la que consumen todas las oficinas y tiendas de Apple en China, por lo que las actividades en el país asiático no generarán huella de carbono.
«El cambio climático es uno de los grandes desafíos de nuestro tiempo, y el momento de actuar es ahora», ha señalado Tim Cook, consejero delegado de Apple. «La transición a una nueva economía sostenible requiere innovación, ambición y objetivos. Estamos comprometidos con hacer del mundo un lugar mejor, y esperamos que muchos otros proveedores, socios y empresas se sumen a esta importante iniciativa.»
Apple proyecta aumentar su credenciales ecológicas en China impulsando las inversiones en generadores eléctricos solares y ayudando a sus fabricantes asociados chinos a ser más respetuosos con el medio ambiente.
Tras anunciar el plan, el director ejecutivo de Apple, Tim Cook, quien se encuentra de visita en Beijing, indicó que estas iniciativas evitarán la emisión de más de 20 millones de toneladas de gases contaminantes de efecto invernadero en China entre hoy y 2020, una cantidad equivalente a la retirada durante un año de las carreteras de casi 4 millones de vehículos de pasajeros.
Los nuevos generadores se construirán en el norte, este y sur de China, produciendo suficiente electricidad para 265.000 hogares chinos, según Apple.
La compañía estadounidense ha terminado de construirlos en la provincia suroccidental china de Sichuan y serán las primeras instalaciones construidas por Apple fuera de Estados Unidos. Están diseñadas para producir más electricidad que la consumida por las 19 oficinas y 24 tiendas de Apple en la parte continental de China y Hong Kong, compensando la energía consumida en la cadena de abastecimiento de la firma.
«El cambio climático es uno de los mayores desafíos de nuestro tiempo y el momento de actuar es ahora», subrayó Cook. «La transición a una nueva economía respetuosa con el medio ambiente requiere innovación, ambición y propósito. Deseamos que muchos otros proveedores, socios y compañías se sumen a nosotros en este importante esfuerzo».
Apple indicó que compartirá sus mejores prácticas, en materia de fomentar la energía limpia, con sus proveedores chinos, y les ayudará a realizar la auditoría de eficiencia energética y la orientación reguladora.
La firma también se asociará con ellos para instalar generadores de energía limpia en los próximos años, adelantó Cook.
Uno de los principales proveedores de Apple, Foxconn, planea construir generadores de energía solar que duplicarán la capacidad anunciada por Apple, empezando por la provincia central china de Henan, antes de que finalice el 2018.
Foxconn se ha comprometido a generar tanta energía limpia como la consumida por su fábrica en Zhengzhou, capital provincial de Henan, en la producción final de iPhones.
«Deseo que este proyecto energético renovable sirva como un catalizador que ayude a continuar con los esfuerzos por promover un ecosistema más respetuoso con el medio ambiente en nuestra industria y fuera de ella», señaló Terry Gou, fundador y director ejecutivo de Foxconn.
Apple tiene 334 proveedores en China y el 72 por ciento de sus emisiones de carbono se produce dentro de su cadena de abastecimiento.
La firma con sede en Cupertino lideró la clasificación del Índice CITI, que mide la eficiencia ambiental de las cadenas de suministro de las empresas en China.