REVE
Muchas veces responsabilizamos a las autoridades nacionales y locales por la falta de políticas vinculadas al medioambiente. Sin embargo, soy de los que tienen la convicción de que la responsabilidad no sólo es política sino que debe encontrar un equilibrio con los otros actores sociales: empresarios, organizaciones, sociedad. Cuando la política inicia el camino en la búsqueda de acciones concretas, creo merece ser comunicado.
El pasado martes tuve la oportunidad de asistir al Senado de la Nación, donde se presentó el informe «Energías Renovables: ¿Por qué debería ser prioritario cumplir el objetivo del 8% al 2016?» y me pareció interesarte compartirles de qué se trata este documento. Pero antes, es preciso comprender esa cifra que se quiere alcanzar, en lo que ya parece poco tiempo.
ACERCA DEL OBJETIVO
Desde 1998 que existen marcos jurídicos de apoyo y promoción a las energías renovables en el país pero que, por diferentes razones (o falta de interés), se mostraron insuficientes.
En 2006, se sancionó la Ley Nacional 26.190 para complementar la Ley 25.019 y con la particularidad de incluir a las energías eólica, solar, geotérmica, mareomotriz, hidráulica, la biomasa y el biogás de diferentes orígenes. Esta Ley fijó un objetivo claro: para el 2016, el 8% del consumo eléctrico local deberá ser abastecido con fuentes de energías renovables.
¿Por qué es importante pensar en las energías renovables? Marcelo Álvarez, presidente de la Cámara Argentina de Energías Renovables (CADER), nos resume sus beneficios en cinco ejes clave:
- 1. Sostienen el crecimiento
Las proyecciones oficiales de demanda eléctrica hacia el 2030 indican que la potencia disponible deberá incrementarse en unos 1500 MW anuales. Esa generación puede lograrse por diversas combinaciones de integración de renovables. En la actualidad, existen más de 3000 MW que podrían generarse con proyectos listos para ser desarrollados en el corto plazo (1-2 años).
- 2. Aumentan la seguridad energética
Las energías renovables son las únicas capaces de brindar una respuesta al déficit energético a corto plazo y con costos competitivos. Recordemos sino los cortes de luz que sufrimos en diciembre y enero pasado porque el sistema colapsó.
- 3. Son económicas y ahorran divisas
Resultan ser competitivas frente a los altos costos de generar energía con combustible o importar energía eléctrica. En el 2012 se generaron 1702 GWH por fuentes renovables, lo que implicó un ahorro de 406.800 m3 de gasoil importado que se hubieran utilizado para producir esa electricidad. El monto ahorrado en combustible importado fue de unos 317 millones de dólares.
- 4. Promueven el desarrollo de la industria nacional
Pese a su escaso crecimiento al momento, en Argentina, ya hay industrias con capacidad de producción, instalación, logística y desarrollo local de la tecnología. El desarrollo de las renovables permitirá consolidar una industria local de fuerte impacto en las inversiones y en generación de empleo. En el año 2010 más de 3,5 millones de personas en el mundo trabajaban directa o indirectamente en el sector. En nuestra región, sobresale el caso de Brasil que cuenta con unos 730.000 empleos vinculados a los biocombustibles y 14.000 empleos en la industria eólica con 2500 MW instalados.
- 5. Nos ayudan a combatir el cambio climático
El mayor desafío ambiental de este siglo nos plantea la necesidad de reducir las emisiones de Gases de Efecto Invernadero (GEI) y nos obliga a proyectar una transición energética abandonando los combustibles fósiles. En este marco, Argentina debería asumir una meta o acción apropiada de mitigación para el año 2020 ante la Convención de Cambio Climático.
Si bien la Ley estableció un régimen de inversiones con beneficios fiscales a la producción eléctrica renovable, recién se reglamentó en 2009 y algunas de sus medidas aún no se pusieron en marcha. Estamos a dos años de la fecha límite establecida, y sólo el 1,4% del consumo local proviene de renovables.
Frente a esta realidad, la Alianza por las Energías Renovables de Argentina (AERA) elaboró el documento «Energías Renovables: ¿Por qué debería ser prioritario cumplir el objetivo del 8% al 2016?», que fue presentado por los senadores Marcelo Guinle, del Frente para la Victoria (FPV), Ernesto Sanz, de la Unión Cívica Radical (UCR), y Diego Santilli, de Propuesta Republicana (PRO). Sí, como leen, tres representantes, de tres partidos diferentes, presentaron un trabajo conjunto. Acá tienen un enlace al PDF con el texto del documento.
La AERA está integrada por entidades vinculadas al sector energético y ambiental tanto del ámbito público como del privado y del tercer sector, como: la Asociación Argentina de Energía Eólica (AAEE), CADER, la Comisión de Energía Atómica (CNEA), el Foro de Vivienda, Sustentabilidad y Energías (FOVISEE), la Fundación Avina, la Fundación Cambio Democrático (FCD), la Fundación Directorio Legislativo (FDL), la Fundación Vida Silvestre, y el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI). En su informe -redactado por el actual presidente de la Agencia de Protección Ambiental de la Ciudad de Buenos Aires, Juan Carlos Villalonga, luego de tres años de trabajo-, presenta las recomendaciones y los argumentos para incluir las energías renovables en la matriz energética del país. A través de él, la AERA busca demostrar por qué las energías renovables agregan un valor para garantizar la seguridad energética nacional, que no brinda ninguna otra fuente.
Según Gustavo Gil, coordinador de Energías Renovables del INTI, a partir de esta publicación, «se busca generar espacios de diálogo, intercambio e incidencia en torno a la Ley 26.190, diagnosticar y diseñar herramientas para superar las barreras y los desafíos que permitan alcanzar la meta del 8%». Lo interesante es que estas acciones se espera se lleven a cabo entre legisladores, técnicos y ciudadanos, es decir, promover la construcción participativa de políticas públicas para que todos podamos disfrutar de una matriz energética más sustentable.
El proyecto de ley del senador Guinle para que sea efectivo el cumplimiento del porcentaje a través de la implementación de nuevas acciones de promoción ya encontró el apoyo en la UCR, el PRO y la Secretaría de Energía de la Nación.
Salí del Senado con la grata sensación de ver cómo representantes de tres partidos totalmente diferentes, como son el FPV, la UCR y el PRO, expresaron un interés común y un trabajo en equipo para alcanzar un propósito energético que nos involucra a todos, como representantes políticos, como proveedores de servicios y también como consumidores. ¡Celebro que las energías renovables sean un primer ejemplo de cómo las diferencias políticas pueden igual actuar en pos de buenas causas para la comunidad y el planeta!
Rodrigo Herrera Vegas es co-fundador de Sustentator.com.