Argentina es el único país de Latinoamérica en disponer de la tecnología y los recursos humanos necesarios para la construcción llave en mano de parques eólicos, al alcanzar una capacidad de producción del ciento por ciento de partes y equipos de los aerogeneradores.
El director ejecutivo de la Cámara de Industriales de Proyectos e Ingeniería de Bienes de Capital de la República Argentina (CIPIBIC), Rubén Fabrizio, precisó que “es posible proveer un parque eólico entregado en la modalidad llave en mano y generando energía a la red con todos los componentes, máquinas y equipos fabricados 100 por ciento en la Argentina”.
Hoy el Cluster Eólico está integrado por 58 empresas -de las 200 que podrían sumarse- distribuidas en 11 provincias y que representan todos los eslabones de la cadena de valor para la provisión de esta energía limpia.
Así, es posible contar en el país desde los desarrolladores de parques hasta los fabricantes de los aerogeneradores -el componente más importante de esta industria-, además de todas las partes y componentes para torres, transformadores, equipamiento electrónico y maquinaria.
«Argentina cuenta no sólo con el recurso natural sino también con la tecnología. En el país hay dos marcas de aerogeneradores nacionales, homologados y certificados, otra marca en etapa de prototipo y una cuarte en proyección, lo que suma las posibilidades de exportar a la región», explicó el directivo.
Esto permitirá no sólo sustituir las importaciones de combustible -con energía limpia y una matriz diversificada- y de aerogeneradores, sino también generar mano de obra calificada con una industria manufacturera de alto valor agregado que exporte tecnología.
Para esto, las empresas integrantes del cluster reclaman que la generación de energía eólica se haga con una mayor y creciente integración de tecnología nacional y empleo argentino.
Según se estima, el potencial eólico de la Argentina supera los 2000 GW, 100 veces la capacidad total instalada en el país sumando todas las fuentes -térmica, hidráulica, nuclear-, por lo que el país posee mayor potencial eólico que petrolífero y se conforma como el de mayor potencial on shore del mundo.
Para ello, el Gobierno lleva adelante los programas de Generación Eléctrica a partir de Fuentes Renovables, Genren I y II, que prevén el suministro de 750 MW el primero de los cuales sólo están construidos 80 MG, y otros 400 MW del segundo programa aún no adjudicados.
Tan sólo por estos dos programas se estima que es posible abastecer de energía a 1,5 millones de personas, lograr un ahorro en combustibles importados por 1.790 millones de dólares al año, y evitar la emisión de 2,4 millones de toneladas de CO2 al año.
Fabricio destacó, además, que el desarrollo de la industria de la energía eólica genera empleo de alta calificación con salarios son mayores al promedio de la industria manufacturera y resulta mano de obra intensivo, ya que por cada millón de pesos de producción demanda el doble de mano de obra que el promedio de la industria.
A pesar de las condiciones naturales y tecnológicas para el desarrollo del sector, Fabricio advierte las dificultades en el financiamiento de los proyectos que resultan varias veces millonarios al tener en cuenta que se requieren dos millones de dólares de inversión por cada MW instalado.
Hoy esas inversiones se pagan con la venta de energía con contratos a 15 años, y es difícil apalancar ese financiamiento a tan largo plazo.
«El sector es competitivo en precio, plazo de entrega y en calidad pero aún no en financiamiento», enfatizó el directivo del CIPIBIC.
Para esto, el sector demanda estudiar la «ingeniería que permita un financiamiento mixto, el de los capitales externos y el aporte de bancos estatales argentinos que condicionen su aporte a la integración de producción nacional».
Este es el caso del desarrollo del Parque Arauco, en La Rioja, que se construye en módulos de 50 MW anuales, hasta alcanzar lo proyectado de 400 MW, con una creciente participación de componentes fabricados en el país.
La proyección del sector, acorde con las pautas del Plan Industrial 2020, es construir 1.000 MW anuales -500 para provisión en Argentina y 500 para exportación en la región-, desarrollar 400 proveedores locales con 4 marcas de aerogeneradores nacionales, y ser fuente de 10.000 empleos directos.