Movand ha finalizado el prototipo de un vehículo eléctrico. El Eco-Taxi es un coche eléctrico y autónomo creado para facilitar la movilidad ecológica dentro de los casco históricos de las ciudades. Los coches eléctricos no emiten CO2.
El Eco-Taxi, la revolución del transporte público, a un paso de hacerse realidad. La empresa andaluza Movand ha finalizado el prototipo de este vehículo ecológico, sostenible y altamente rentable. El Eco-Taxi es un boceto del prestigioso diseñador Petr Kubik (Premio Audi de diseño)
La empresa sevillana Movand, promotora del Proyecto Ciudad de la Energía, tiene listo el prototipo de un vehículo eléctrico que revolucionará el transporte público, el Eco-Taxi, un coche eléctrico y autónomo creado para facilitar la movilidad ecológica dentro de los casco históricos de las ciudades, así como el de ser un vehículo de transporte para recintos cerrados donde haya que recorrer grandes distancias (aeropuertos, parques tecnológicos y/o empresariales, bases militares, villas olímpicas, etc.…).
De esta forma, desde la firma hispalense se da respuesta y solución a los crecientes niveles de contaminación causados por los medios de transportes tradicionales propulsados por motores de combustión.
El Eco-Taxi es un vehículo eléctrico no tripulado, dotado de un sistema electrónico comandado por un ordenador central que lo hace ser un vehículo ecológico, sostenible y altamente rentable (reduce en un 90% el coste €/Km), “no comparable a ningún otro vehículo de servicio público”, matizan los técnicos de Movand.
En cuanto a sus características técnicas, el Eco-Taxi cuenta con un juego de baterías ión-Litio que proporcionan al vehículo toda la energía necesaria tanto para el traslado como para su sistema electrónico. El estado de las baterías y sus cargas estarán controlados por BMS (Battery Monitoring System). El sistema, además de controlar parámetros como tensión, amperios–hora y temperatura, controla la cantidad de energía regenerativa emitida al grupo de baterías durante la frenada y la distancia en kilómetros hasta la siguiente recarga, monitorizando en cada momento todas las constante vitales del grupo de baterías y asegurando de esta forma una correcta aplicación de la energía eléctrica al grupo de motorización.
“El sistema conecta un sistema de extracción de calor así como uno de introducción de aire fresco del exterior, manteniendo el equipo baterías en unos términos óptimos de temperaturas y por consiguiente de funcionamiento alargando la vida de uso de las mismas. Su sistema de recarga automática es totalmente novedoso por lo que no es necesaria la intervención humana. El sistema advierte de su nivel de descarga mínimo y automáticamente el sistema conduce al vehículo a su estación de recarga que se realiza bien en la base o bien en las paradas”, explican los técnicos de Movand.
Además, dos motores eléctricos del tipo Brushless DC en Direct Drive de 2 Kw de potencia situados en las ruedas harán que el coche no necesite escobillas ni contener piezas que produzcan rozamiento. “Estos motores son altamente eficientes (95% de eficiencia), con un bajo mantenimiento y alta durabilidad (200.000 Km)”, destacan desde la empresa creadora.
Asimismo, el Eco-Taxi está dotado con un sistema de freno regenerativo óptimo para el ahorro de energía. Este tipo de sistema convierte, en el momento de la frenada, automáticamente las ruedas motoras en verdaderos generadores de energía eléctrica que inyectan esta al equipo de baterías consiguiendo con ello ahorros que van desde el 20% al 35% del consumo total eléctrico por trayecto. Además permite un menor gasto en pastillas de freno ya que la energía cinética provocada en el momento de la frenada es un 60% a un 80% inferior.
Para las aperturas de puertas automáticas, Movand ha optado por el sistema eléctrico-hidráulico al ser un sistema fácil de operar y que, al contrario del sistema neumático, no tiene la necesidad de grandes calderines para su uso. El sistema se complementa con electroválvulas que abren o cierran el paso del fluido atendiendo a las órdenes emitidas por el ordenador central del vehículo.
Por otro lado, al ser un vehículo completamente autónomo cuenta con un triple sistema de detección de obstáculos, mediante ultrasonidos tanto en la parte posterior como en la anterior. Asimismo, cuenta con un sistema inalámbrico que conecta directamente con la central en caso de parada por avería, tanto de él, como de vehículos que le sigan o le precedan, informando a ésta del estado de su carril para que le indique procedimiento alternativo o intervención de operarios.
La distancia frente a otros vehículos como a personas se visualiza mediante dos cámaras delanteras. El sistema modera su marcha en el caso de que en el campo visual de la cámara se interponga un objeto o persona midiendo la distancia entre el vehículo y el obstáculo. “Si esta distancia es mayor de 10 metros, el vehículo aminoraría la marcha, en el caso que el obstáculo persistiera, el vehículo quedaría frenado quedándose aproximadamente a dos metros del mismo”, explican los técnicos de Movand.
La coordinación entre los sistemas de seguridad propios del vehículo en conjunto con el sistema de control en la Central hace al sistema “prácticamente infalible” tanto para un hipotético caso de atropello como de choque.
En cuanto al ordenador del propio vehículo, éste controla, entre otros, la pantalla oled insertada en el parabrisas, desde la que se puede determinar tanto el tipo de música que se elija para el trayecto, el idioma, como la parada de bajada.
Además de la pantalla, el ordenador del Eco-Taxi también dirige el variador electrónico, el sistema de frenada regenerativo y el BSM. También es el encargado de las comunicaciones con el exterior vía inalámbrica.
Y todas estas características pasan por el cerebro, por antonomasia, de todo el sistema llamado ‘Ulises’ que determina desde el cobro del transporte hasta la ubicación de cualquier vehículo del sistema. Ulises se encarga de comprobar e informar del estado de la carga, la duración del trayecto, los kilómetros que le quedan por realizar, los parámetros técnicos del vehículo y cuando el Eco-Taxi debe volver a conectarse a la carga en la estación más próxima.
“Facilita a los futuros pasajeros el tiempo estimado de espera y el número de vehículos que deben usar, así como, también facilita a las paradas la cantidad de energía que le queda para el posible repostaje de los vehículos y si tienen que hacerlo en otras”, concluyen los técnicos de Movand la explicación de su Eco-Taxi.