Otras Renovables

Reducir emisiones de CO2 con energías renovables y eficiencia energética

Poner freno al cambio climático es posible, si cambiamos el sistema energético. La buena noticia es que es posible hacerlo, como demuestra el informe Energía 3.0. La mala noticia es que los políticos aún no se han dado por enterados. Veamos. Aprovechando las posibilidades de eficiencia, inteligencia y energías renovables que se analizan en Energía 3.0, se lograría evitar la emisión de 493 millones de toneladas anuales de CO2 en el año 2050, que son las que se producirían de seguir como hasta ahora en el conjunto del sistema energético peninsular, y que significaría un incremento del 24,3% respecto a 2007, principalmente por la elevada utilización de combustibles.

El modelo energético eficiente, inteligente y limpio de Energía 3.0 sigue las recomendaciones científicas de alcanzar emisiones cero hacia la mitad de este siglo. Pero los efectos sobre el clima no dependen solo del escenario en 2050, sino de la trayectoria que se siga para alcanzarlo, porque todo el CO2 que se emita a la atmósfera durante la transición va a contribuir al efecto invernadero durante mucho tiempo.

Cuanto antes se reduzcan las emisiones, menor será el impacto de nuestra actividad sobre el clima. Si la transición se retrasa, las emisiones seguirían aumentando hasta la década de 2030, mientras que una transición responsable lograría situar las emisiones cercanas a cero con más de una década de antelación.

Esto lo saben nuestros representantes políticos, pero actúan como si no lo supieran, o tal vez piensan que los ciudadanos no lo saben o no les importa. Estos días los gobiernos vuelven a verse las caras para negociar qué hacer con el cambio climático. Del 1 al 7 de octubre se reúnen en Panamá para preparar la cumbre anual del Convenio Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático, que este año será en Durban (Sudáfrica) a partir del 28 de noviembre.

Saber que existe solución al cambio climático les dejará sin excusas para no ponerse de acuerdo. Así que hay que hacer todo lo posible para que se sepa. No te conformes con leer estas líneas.

Los vehículos eléctricos con baterías de litio no emiten CO2 ni dañan el medio ambiente, siempre que la electricidad provenga de energías renovables, como la eólica, la energía solar fotovoltaica y la termosolar. Los aerogeneradores podrán suministrar la electricidad al vehículo eléctrico, que en un futuro servirán también para almacenar y regular la electricidad intermitente del sector eólico.

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