UTE realizó la apertura de ofertas para parques eólicos de hasta 50 MW. La oferta llegó a 1.097 MW, lo cual habla por sí solo del prestigio y la seriedad con que cuenta la empresa estatal. Su presidente, ingeniero Gonzalo Casaravilla, catalogó como "muy buena la licitación", a la que fueron presentados 23 proyectos por parte de 16 empresas eólicas. El jerarca adelantó que podría adjudicar 190 MW en vez de los 150 MW previstos.
El grueso de los precios propuestos oscilan entre los 62 y 67 dólares por megavatio/hora (unos 45 euros por MWh), lo que representa un nivel significativamente inferior a lo que pagará UTE a las tres empresas que ganaron la primera licitación de eólica y por la cual cobrarán entre 85 y 87 dólares por MWh. En enero de este año, UTE había adjudicado la primera fase del llamado, a una firma española (Teyma) y dos argentinas (Impsa y Fingano). Estas firmas estimaron una inversión de 300 millones de dólares. Los parques eólicos estarán ubicados en Tacuarembó (Teyma), Lavalleja (Impsa) y Maldonado (Fingano).
De esa forma, las ofertas recibidas por el ente superan largamente las expectativas oficiales, que esperaban un precio mínimo de 80 dólares por megavatio/hora. Enesol, que propone construir un parque eólico en Florida, fue la que presentó el proyecto más económico al ofrecer 62,3 dólares el MWh. A su vez, la incorporación de valor agregado nacional, que es el otro criterio clave a la hora de seleccionar las propuestas, alcanzó hasta el 45% de un proyecto, como el caso que presentó la empresa Noukar, que pretende instalar un complejo de aerogeneradores en Lavalleja. UTE analizará las propuestas y seleccionará dos o tres proyectos que sumen 150 megavatios, aunque se mencionó por parte de las autoridades que podrá superar ese volumen en función de las ofertas presentadas.
Fundamentó esta posibilidad en que existen incentivos puesto que quien oferte 100 MW debe dividirlos en dos propuestas de 50 MW cada una; la segunda necesariamente será más barata que la primera, al producir en mayor escala. La oferta total de 1.097 MW implicaría una inversión de 2.000 millones de dólares, sostuvo Casaravilla.
"La gran sorpresa nuestra fue el importante descenso del precio del MW producido en relación a la anterior licitación de 150 MW, que fue adjudicada el año pasado a un precio de 85 dólares el MW, mientras que hoy (por ayer) el promedio ofertado fue de 65 dólares, habiendo existido propuestas de 62 dólares. Es más, del total ofertado hay 500 MW con un precio por debajo de 70 dólares, lo cual habla de una sensible rebaja y de las seguridades y confianza que el país genera", dijo el presidente de UTE.
UTE se aboca ahora a la evaluación técnica durante tres semanas. A aquellas mejor posicionadas se les realiza el estudio de costo de conexión, se les informa el precio y, si lo aceptan, se firma el contrato ya que en esta licitación hay un solo sobre, donde se incorpora por parte de la empresa licitante el precio final al que aspira. "De esta manera logramos acortar los plazos administrativos", acotó Casaravilla.
"De lo que no hay duda es que quienes mejores precios ofertaron son aquellas empresas que ya tienen los proyectos desarrollados y están prontas para iniciar inmediatamente las obras para aprovechar el incentivo aprobado por el Directorio, que consiste en pagar, hasta fines de 2014, 110 dólares el MW, y a comienzos de 2015 se paga el precio adjudicado en la licitación", concluyó.
En 2006, la empresa Agroland, ubicada en las cercanías de Garzón en el departamento de Rocha, fue uno de los precursores en Uruguay de la generación eólica. Pero su potencia de 450 KW no es a "gran escala". Más tarde apareció la granja Nuevo Manantial, en el kilómetro 241 de la Ruta 9 en Rocha. Se trata del mismo grupo inversor que Agroland, con una potencia actual instalada de 13 MW.
A nivel regional, los parques eólicos más importantes son los de Osorio, en Río Grande do Sul, Brasil (150 MW, 75 aerogeneradores), y el complejo Canela (78,15 MW, 51 aerogeneradores) en la provincia de Choapa, Chile.
Los vehículos eléctricos con baterías de litio no emiten CO2 ni dañan el medio ambiente, siempre que la electricidad provenga de energías renovables, como la eólica, la energía solar fotovoltaica y la termosolar o solar termoeléctrica. Los aerogeneradores podrán suministrar la electricidad al vehículo eléctrico, que en un futuro servirán también para almacenar y regular la electricidad intermitente del sector eólico.
