Más, concretamente, el Ejecutivo Foral destinará 2.891.373 euros para proyectos de investigación, desarrollo e innovación de 20 empresas, universidades, centros tecnológicos y fundaciones ubicadas en la Comunidad Foral para acometer un total de 28 proyectos de investigación que supondrán una inversión final de 13,8 millones de euros.
En una segunda línea de ayudas dirigida a las empresas agroalimentarias, el Gobierno de Navarra otorgará ayudas públicas por valor de 1.400.000 euros a 16 industrias radicadas en la Comunidad Foral con el objeto de acompañar la inversión privada de estas empresas, destinada a la implantación de nuevas instalaciones o la mejora de las ya existentes, que les permitan mejorar la calidad de sus productos y abrir nuevas salidas comerciales. La inversión total presentada por estas empresas asciende a 8.237.140 euros.
Ambas líneas de ayuda pública tienen por objeto directo la modernización de las empresas navarras, su actualización y avance tecnológico y la búsqueda de nuevos mercados, especialmente mediante la internacionalización. Todo ello conllevará la creación de riqueza y, consecuentemente, la consolidación de puestos de trabajo y la creación de nuevos empleos, la mayor parte de ellos de cualificación.
Cabe recordar que, en lo que va de año, el Gobierno de Navarra ha concedido subvenciones a 156 proyectos de I+D+i (con un presupuesto total de 72 millones de euros) por importe de 10.648.285 euros, así como ayudas a 62 industrias agroalimentarias (con una inversión global de 40 millones) por importe de 8.198.762 euros, lo que totaliza una inyección directa de 18.847.047 euros a los protagonistas del futuro económico de la Comunidad Foral.
El porcentaje con el que el Gobierno de Navarra apoya los proyectos de I+D+i presentados varía en función de las características de la entidad que solicite la ayuda. Así, la participación de las universidades navarras en estos proyectos son financiados en su totalidad (en esta ocasión la Universidad Pública de Navarra participa individual o consorciadamente en siete proyectos, con una subvención aprobada de 1.250.092 euros); en el caso de fundaciones y centros tecnológicos (CNTA-Laboratorio del Ebro, Fundación L’Urederrra, Cruz Roja Navarra, Asociación Retina Navarra, Asociación Industria Navarra) la subvención oscila entre el 60% que recibe CNTA-Laboratorio del Ebro y el 22%, de la Asociación de la Industria de Navarra; y las empresas (16) un porcentaje de entre el 5% y 40%.
Son destacables, por su volumen de inversión, los proyectos de I+D+i que promueven KYB Steering Spain S.A, con una inversión de 3.289.583,33 euros y una subvención del 5% en un proyecto de dirección asistida eléctrica para una nueva generación de vehículos; el proyecto de investigación de Ingeteam Energy S.A, que supone una inversión de 1.875.041 euros con una subvención del 5% para el desarrollo de un inversor fotovoltaico; el desarrollo de una nueva tecnología de sensores de posición sin contacto, desarrollada por Phier Sensors & Controls S.A, con una inversión de 1.272.966,17 euros y una subvención del 5%; y el proyecto de investigación de la Asociación de la Industria Navarra que desarrolla un proyecto de gestión sostenible del agua mediante un sistema de teledetección aérea. Este proyecto tiene un presupuesto de 1.951.529,40 euros y está subvencionado al 22% por el Gobierno de Navarra.
Además, es conveniente señalar otros proyectos de investigación de menor cuantía, en áreas como la nanotecnología, la medicina, la agricultura o la edificación de estructuras.
En el capítulo de las ayudas a empresas agroalimentarias, son destacables los proyectos de inversión presentados por las empresas Industrias Cárnicas Navarras S.A. en Lumbier por valor de 1.750.000 euros y una subvención de 45.633,50 euros; la de Iberfruta-Muerza S.A. en Azagra, con una inversión de 1.800.289,78 euros y una subvención de 267.269,82 euros; y Tutti Pasta S.A. en Galar, con una inversión de 748.794 euros y una ayuda de 149.758,67 euros.
Los vehículos eléctricos con baterías de litio no emiten CO2 ni dañan el medio ambiente, siempre que la electricidad provenga de energías renovables, como la eólica, la energía solar fotovoltaica y la termosolar. Los aerogeneradores podrán suministrar la electricidad al vehículo eléctrico, que en un futuro servirán también para almacenar y regular la electricidad intermitente del sector eólico.