Según indica Premo en una nota, este proyecto se anunciará en la IV edición del Foro TIC y Sostenibilidad, que se celebrará en Sevilla el 29 y 30 de junio.
El ingeniero Tage Bjorklun comenta que "los resultados son sorprendentemente buenos, pues comparando con otros choques, el choque de Premo reduce las pérdidas totales en 5,7 watios". La compañía andaluza facturó en 2010 22,5 millones de euros y prevé alcanzar en el presente ejercicio 32 millones de euros.
Según el consejero delegado del Grupo Premo, Ezequiel Navarro, "un coche eléctrico no es más que un aparato enchufado a la red según las normativas, es decir, desde el punto de vista de la red eléctrica, el coche no se diferencia de una lavadora o una televisión de plasma".
"Cargar la batería del coche requiere fuentes de alimentación que provocan un consumo alto de potencia reactiva y con estos componentes se puede alcanzar hasta un 60 por ciento de eficiencia en consumo energético", añadió. Si se compara con un vehículo convencional, "el ahorro económico respecto al consumo energético es de cerca el 60 por ciento", apuntó.
En la mesa redonda sobre ‘El desafío del coche eléctrico’ se debatirá sobre las oportunidades y capacidades del sector TIC andaluz y nacional con los nuevos vehículos eléctricos o híbridos enchufables incorporan convertidores y componentes de alta potencia.
Por ello, uno de los dispositivos claves es el cargador que permite cargar la batería tanto desde una red monofásica como trifásica. En este sentido, el factor de corrección de potencia es necesario para optimizar la red y se utiliza en la mayoría de países desarrollados para potencias superiores a 70 watios.
Para hacer realidad esta iniciativa, desde organismos de la Junta de Andalucía, tales como Sandetel, la Agencia Andaluza de la Energía y Corporación Tecnológica de Andalucía (CTA), junto con y un grupo de empresas andaluzas se viene trabajando en el Proyecto Plug@drive para posicionar a la comunidad andaluza en el ámbito de la electromovilidad.
Así, lo anuncia el consejero delegado del Grupo Premo, Ezequiel Navarro, quien participa en el IV Foro Tic y Sostenibilidad que se celebra en Sevilla, concretamente en la mesa redonda que trata sobre ‘El desafío del coche eléctrico’. Según el ingeniero Tage Bjorklun de la mutinacional Linear Technologies "los resultados son sorprendentemente buenos, si se compara con otros choques, el choque de Premo reduce las pérdidas totales en 5,7 watios".
Según el consejero delegado del Grupo Premo "un coche eléctrico no es más que un aparato enchufado a la red según las normativas, es decir, desde el punto de vista de la red eléctrica, el coche no se diferencia de una lavadora o una televisión de plasma".
"Cargar la batería del coche requiere fuentes de alimentación que provocan un consumo alto de potencia reactiva y con estos componentes se puede alcanzar hasta un 60 por ciento de eficiencia en consumo energético", añadió. Si se compara con un vehículo convencional, "el ahorro económico respecto al consumo energético es de cerca el 60 por ciento", apuntó.
El Grupo Premo prevé que el impacto económico del proyecto del vehículo eléctrico en la compañía supondrá una facturación de 17,5 millones de euros en los próximos cuatro años. La compañía facturó en 2010 22,5 millones de euros y prevé alcanzar en el presente ejercicio 32 millones de euros.
En el foro se debatirá sobre las oportunidades y capacidades del sector TIC andaluz y nacional ya que los nuevos vehículos eléctricos o híbridos enchufables incorporan convertidores y componentes de alta potencia. Por ello, uno de los dispositivos claves es el cargador que permite cargar la batería tanto desde una red monofásica como trifásica. Es por ello que el Grupo Premo ha presentado sus últimos avances al respecto con Linear Technologies.
Los vehículos eléctricos con baterías de litio no emiten CO2 ni dañan el medio ambiente, siempre que la electricidad provenga de energías renovables, como la eólica, la energía solar fotovoltaica y la termosolar. Los aerogeneradores podrán suministrar la electricidad al vehículo eléctrico, que en un futuro servirán también para almacenar y regular la electricidad intermitente del sector eólico.
