El proyecto eólico sigue avanzando a pasos agigantados, con la meta de generar energías renovables sin emisiones de CO2 a mediados del mes de diciembre. José Morán, gerente de Desarrollo de la empresa Energía Eólica de Honduras (EEH), comentó que se planifica energizar la subestación en el mes de junio, con lo cual se realizarán las primeras pruebas de generación en el plantel eólico más grande de Centroamérica.
"Comenzaron a llegar algunas partes de las máquinas, vino la semana pasada el primer embarque de aspas y secciones de torres", dijo Morán. Las turbinas eólicas llegaron desarmadas en cuatro secciones de torres, que miden entre 11 y 25 metros cada una y pesan entre 25 y 60 toneladas. Además, se recibieron las palas, tres por cada turbina eólica, que totalizan 33, para completar 11 máquinas y seis torres.
"Con estas secciones que ahora recibimos comenzaremos a montar turbinas en la segunda semana de mayo", expresó el ejecutivo. Otro de los avances que reportan la empresa EEH, es el recibo de la grúa principal con capacidad para 400 toneladas, "es una grúa tan grande que viene transportada en 17 plataformas", detalló Morán.
En la sección de obras civiles, los ejecutivos aseguran que se ha cumplido aproximadamente el 80 por ciento de los trabajos, y los restantes seguirán avanzando de forma paralela al recibo y colocación de las máquinas.
"Estamos concentrados en las turbinas que están más cerca de la subestación y que se van a poder conectar fácilmente. Estamos haciendo todo lo posible para que en julio inicie la energización y que en agosto varios unidades generen electricidad".
La empresa planifica que a mediados de diciembre las 51 máquinas aerogeneradoras estén listas para operar y generar los 102 MW proyectados en este plantel eólico.
Sumado a los trabajos técnicos y administrativos, la empresa EEH tiene el reto de mantener la comunicación con las comunidades poblacionales involucradas en el proyecto.
La semana anterior, altos ejecutivos de la empresa se reunieron con los propietarios de los terrenos arrendados para la colocación de las torres y otros miembros de las comunidades, quienes exigieron a la empresa mayores medidas de mitigación y más información sobre el proceso de construcción del plantel eólico.
Ante las solicitudes realizadas por los pobladores, Morán comentó que "lo que sucedió fue falta de comunicación y nosotros aceptamos que por estar concentrados en el trabajo no fuimos informando a la gente sobre los adelantos de los trabajos".
Agregó que "si uno viene al área puede observar mucho movimiento de tierra en las aperturas de caminos, pero ya está dejando de ser un problema, creo que es normal que la comunidad tenga algunas preguntas y la reunión fue para escuchar sus preocupación y estamos muy de acuerdo".
EEH aseguró a los pobladores establecer un plan de trabajo para darles a información sobre los avances del proyecto y la implementación de nuevas medidas de mitigación que requieren de la participación de la comunidad. Por su parte, algunos pobladores siguen reuniéndose para solicitar mayores detalles sobre el impacto ambiental del proyecto.
Los vehículos eléctricos con baterías de litio no emiten CO2 ni dañan el medio ambiente, siempre que la electricidad provenga de energías renovables, como la eólica, la energía solar fotovoltaica y la termosolar. Los aerogeneradores podrán suministrar la electricidad al vehículo eléctrico, que en un futuro servirán también para almacenar y regular la electricidad intermitente del sector eólico.