La energía eólica es la fuente que menos agua consume para producir electricidad

La energía eólica utiliza menos agua que cualquier otra tecnología de generación de energía. Por ello, en el Día Global del Agua de la ONU, la industria eólica mundial pide a los responsables políticos que lo tengan en cuenta al tomar las decisiones.

La energía eólica utiliza menos agua que cualquier otra tecnología de generación de energía, como la energía nuclear o las centrales de carbón o gas natural. La energía eólica utiliza menos agua que cualquier otra tecnología de generación de energía. Por ello, en el Día Global del Agua de la ONU, la industria eólica mundial pide a los responsables políticos que lo tengan en cuenta al tomar las decisiones que determinarán las infraestructuras mundiales de producción de energía en las próximas décadas.

La escasez de agua es hoy un problema acuciante en muchas partes del mundo que se verá exacerbado por el cambio climático. La eólica puede contribuir a la conservación mundial del agua, un recurso que debe ser utilizado de manera más productiva, tanto para el consumo humano como para la agricultura, por tratarse de una tecnología que, a diferencia de otras, no utiliza recursos hidráulicos.

Las turbinas eólicas no consumen agua, otra de sus múltiples ventajes, pues los aerogeneradores eólicos no emiten CO2 ni ningún otro contaminante, apenas ocupan espacio y su impacto en las aves es ínfimo, apesar de las falsedades que distribuyen los enemigos de las energías renovables.

El 40% de la población mundial vive en áreas con escasez de agua. Y el crecimiento demográfico y la industrialización pondrán más presión sobre la disponibilidad de este recurso. Dados los altos niveles de uso del agua en la generación de energía convencional, el aumento de la demanda energética agravará la situación. De hecho, se prevé que la demanda mundial de agua supere a la oferta en un 40% en el año 2030.

La generación de energía eólica no sólo conserva el agua sino que puede ayudar a aliviar la escasez de este recurso, según un estudio del fabricante de aerogeneradores Vestas Wind Systems. Mientras que los combustibles fósiles convencionales y las centrales de energía nuclear, que constituyen el 78% de la producción mundial de electricidad, usan el agua para el enfriamiento y la condensación del vapor que mueve las turbinas, la generación de energía eólica no requiere prácticamente agua. Como resultado, la eólica puede ahorrar más de 2.000 litros de agua por MWh de electricidad producido.

El estudio también muestra que muchas regiones del mundo que se enfrentan o lo harán en un futuro a la escasez de agua cuentan a su vez con el viento adecuado para la producción de energía eólica. Para mitigar el cambio climático, el sector energético no sólo tiene que estar libre de CO2, sino que también debe reducir drásticamente su consumo de agua. La energía eólica es una solución sostenible de cara a estos dos desafíos.

Los vehículos eléctricos con baterías de litio no emiten CO2 ni dañan el medio ambiente, siempre que la electricidad provenga de energías renovables, como la eólica, la energía solar fotovoltaica y la termosolar. Los aerogeneradores podrán suministrar la electricidad al vehículo eléctrico, que en un futuro servirán también para almacenar y regular la electricidad intermitente del sector eólico.

www.aeeolica.org