Eólica en Chile: ecologistas apoyan el Parque Eólico en Chiloé

La presidenta del Movimiento Ecologista de Ancud, Carmen Corrales, se declaró defensora del Parque Eólico Chiloé y refuta las críticas vertidas por Colectivo Intervención Ciudadana Ancud (Compas) en cuanto a la carencia de un estudio de impacto ambiental para la central de energía eólica. Esto después que se divulgara en noviembre pasado una declaración pública en contra del proceso en que se ha gestado el proyecto eólico.

El Parque Eólico Chiloé es una iniciativa de la empresa chileno-sueca Ecopower y pretende construir 56 aerogeneradores eólicos con una capacidad total de capacidad de 140 MW. A pesar que se trata de una energía limpia, el proyecto no ha estado libre de críticas de organizaciones sociales que reclaman la inexistencia de un Estudio de Impacto Ambiental (EIA) para el sector Quilo Mar Brava, donde se instalará.

Para Carmen Corrales esa discusión ya pasó y considera que el Movimiento tenía una predisposición negativa hacia el proyecto. “Nosotros hemos ido a las reuniones que han convocado estos grupos y uno no podía entablar un diálogo, ellos ya desde el inicio se mostraban negativos hacia cualquier idea favorable al parque eólico”. Por otro lado ella sí ve a la instalación del parque eólico como una forma de disminuir el gasto eléctrico.

Ante la postura de los contrarios al proyecto, Corrales señala que “no puedo entender las razones para oponerse a una forma de energía no contaminante en Chiloé”. La ambientalista ve la iniciativa de Ecopower como una oportunidad de marcar un precedente en la utilización de energías limpias en Chile y si la empresa no ha hecho estudios socioeconómicos más detallados es porque la legislación chilena no se lo exigía en la fecha de presentar el proyecto.

Por otra parte, Corrales denuncia que su movimiento ambiental no ha recibido ningún respaldo político particular, sin embargo, los grupos opositores “han recibido apoyo del senador Camilo Escalona, quien se ha reunido con ellos a dialogar”. Efectivamente, el sábado 29 de enero el senador PS recibió las críticas de organizaciones sociales y vecinos del sector Mar Brava de Ancud.

En esa reunión Escalona señaló que el problema se había originado con el cambio de la legislación, el cual hizo que la exigencia de un Estudio de Impacto Ambiental fuese tanto para empresas contaminantes como para las no contaminantes. “La empresa ante la inminencia de la promulgación de la ley se apresuró y lo presentó antes, por lo tanto la autoridad regional debiese operar desde mi punto de vista como si la ley ya hubiese estado aprobada”.

Por otra parte Daniela Alarcón, presidenta de la Asociación de Consumidores y Usuario de Chiloé, también defendió la instalación de turbinas eólicas y afirma que la mayoría de las críticas al parque eólico se originaron “sobre la hora”, en vista que inicialmente no hubo mayores reparos a la utilización de la energía no contaminante. Asimismo, dice no comprender una visión negativa hacia una empresa que ha hecho todo dentro de los marcos legales exigidos en el momento.

Los vehículos eléctricos con baterías de litio no emiten CO2 ni dañan el medio ambiente, siempre que la electricidad provenga de energías renovables, como la eólica, la energía solar fotovoltaica y la termosolar. Los aerogeneradores podrán suministrar la electricidad al vehículo eléctrico, que en un futuro servirán también para almacenar y regular la electricidad intermitente del sector eólico.

Por Gustavo Peralta Vargas, www.elciudadano.cl