Bilbao recupera los autobuses de dos pisos

Según ha informado el Ayuntamiento de Bilbao, estos autocares se han revelado como "la solución más eficaz para incrementar la capacidad en los viajes y el confort de sus usuarios en trayectos largos en la ciudad, teniendo en cuenta además la particular orografía de Bilbao, con lo que se pretende que cumplan dos objetivos prioritarios: aliviar la saturación en algunas de las líneas más utilizadas de Bilbobus y avanzar en la mejora continuada del servicio".

La puesta en marcha de las nuevas unidades, que a partir de este viernes realizarán el trayecto de la Línea 56 ‘La Peña-Sagrado Corazón’, servirá como un periodo de prueba para la posible puesta en marcha en un futuro de más autobuses de dos alturas.

La línea 56 ha sido elegida en primer lugar por tratarse de una de las más utilizadas -con una media anual cercana a los dos millones de usuarios- con un recorrido largo y muchas paradas, en el que los usuarios suelen realizar el trayecto casi al completo.

Los nuevos autocares se incorporarán así a la flota municipal, formada hasta el momento por 153 autobuses. Bilbobus se ha consolidado en los últimos años como el segundo medio de transporte más utilizado en la ciudad por detrás del metro.

El aumento de la capacidad de estos autobuses respecto al resto de unidades de Bilbobus será de hasta 50 personas más, al contar con 65-70 asientos y con espacio para unos 125 viajeros en total, incluyendo a los que viajen de pie.

Según el pliego de condiciones técnicas que se ha seguido para su adquisición, las nuevas unidades serán de estilo berlinés y contarán con un formato de 13-14 metros y 3 ejes -en cumplimiento de la normativa vigente- y con una altura exterior de 4,20 metros, gracias a los permisos adquiridos de los Ministerios de Interior, Fomento e Industria y a la conformidad mostrada por la UE para incrementar en 20 centímetros la altura máxima permitida por la legislación, ha explicado el Consistorio.

Los vehículos eléctricos con baterías de litio no emiten CO2 ni dañan el medio ambiente, siempre que la electricidad provenga de energías renovables, como la eólica, la energía solar fotovoltaica y la termosolar. Los aerogeneradores podrán suministrar la electricidad al vehículo eléctrico, que en un futuro servirán también para almacenar y regular la electricidad intermitente del sector eólico.

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