Comienza construcción en desierto Atacama primera central solar fotovoltaica de Suramérica y sin primas

El desarrollo de la central, que correrá a cargo de la empresa española Solarpack, será todo un hito en Suramérica dado que será la primera fotovoltaica a escala industrial que entrará en funcionamiento en el continente.

En sus 6,25 hectáreas producirá un megavatio de potencia y abastecerá de energía eléctrica a las instalaciones de la División Chuquicamata de Codelco.

Codelco destacó que la iniciativa significará un ahorro energético importante y hará disminuir las emisiones de CO2. El secretario regional ministerial de Energía de Antofagasta, Carlos Arenas, calificó la iniciativa como "un notable avance" para el país y "un ejemplo concreto de las aspiraciones que tiene el Gobierno de implementar y llevar a la práctica energías limpias".

La directora del Centro de Energías Renovables, Claudia Galleguillos, destacó la adecuación del proyecto con las características del desierto de Atacama, que tiene la mayor radiación solar del mundo.

La iniciativa implicará una reducción de emisiones de 1.680 toneladas de dióxido de carbono (CO2) al año y su impacto ambiental es mínimo, ya que no generará emisiones de ningún tipo.

El proyecto, que abastecerá de energía eléctrica a las instalaciones del centro de trabajo de Chuquicamata (Norte de Chile), consiste en la construcción y operación de una planta solar fotovoltaica de 1 megavatio (MW) de potencia instalada, lo equivalente al consumo de 5.000 hogares, y cuya vida útil es de hasta 35 años.

La planta ocupará una superficie de 6,25 hectáreas y estará formada por 4.080 módulos de silicio que seguirán la trayectoria del sol, lo cual generará ‘energía limpia’ y supondrá una reducción de 1.680 toneladas de CO2 al año.

La empresa ha querido destacar el "mínimo impacto medioambiental" de la planta, ya que no generará emisiones, no necesitará "prácticamente nada" de agua para su funcionamiento, no habrá que preparar el suelo para su instalación y tampoco tendrá un impacto paisajístico, al no superar los 2 metros de altura.

Los vehículos eléctricos con baterías de litio no emiten CO2 ni dañan el medio ambiente, siempre que la electricidad provenga de energías renovables, como la eólica, la energía solar fotovoltaica y la termosolar o solar termoeléctrica. Los aerogeneradores podrán suministrar la electricidad al vehículo eléctrico, que en un futuro servirán también para almacenar y regular la electricidad intermitente del sector eólico.

www.solarpack.es/