Hoy en Argelia las energías renovables apenas representan el 6% de la producción energética nacional. Como en el caso de Marruecos, brinda cuantiosas oportunidades para las empresas españolas y andaluzas en particular.
Argelia ofrece unas condiciones climáticas y geográficas altamente favorables para el desarrollo de las energías renovables, y la termosolar en particular.
Las horas de radiación, la amplitud de su territorio y la proximidad del país a Europa abre una vía a las empresas españolas. "España está considerada como uno de los actores principales en el sector de las energías renovables. Así lo señala la prensa argelina en sus publicaciones y las autoridades argelinas tanto en sus discursos como en la búsqueda de socios estratégicos para sus licitaciones energéticas", asegura Asís Trincado, de la Oficina Económica y Comercial de la Embajada de España en Argel.
Las autoridades locales son especialmente conscientes de la volatilidad de los precios del crudo; además, los recientes debates en torno a las energías renovables llegan justo cuando la Comisión de la Regulación de la Electricidad y del Gas (CREG) prevé un alza importante de la demanda interior de gas y electricidad.
El consumo de gas natural alcanzará entre unos 42 a 55.000 millones de metros cúbicos antes de 2019 y el consumo eléctrico hará lo propio hasta 16.500-20.000 MW al año. Según el gabinete de inteligencia económica Oxford Business Group, el aumento de la demanda energética hará "presumiblemente de Argelia uno de los líderes en el desarrollo de las energías renovables en los próximos años".
Argelia ya impulsa la construcción de tres centrales termosolares, que alcanzarán una potencia total de 200 MW. Abengoa desarrolla el primer proyecto termosolar llevado a cabo por una sociedad foránea en Argelia: la construcción de una termosolar híbrida en Hassi R’Mel junto a la argelina Neal.
Esta central -de 125 hectáreas de superficie- se alimenta de gas y de energía termosolar para producir 150 MW de electricidad, de los cuales 25 MW procederán de la termosolar. Se estima que la central de Hassi R’Mel, a 500 kilómetros al sur de Argel, esté operativa en los próximos meses.
Argelia prevé ya la segunda fase: 400 MW de los cuales 70 MW deberán ser generados por energía solar termoeléctrica. La inversión estimada para esta ampliación del proyecto de Hasi R’Mel es de 285 millones de dólares.
La iniciativa Desertec aspira a implantar toda una serie de centrales solares en los desiertos del Magreb y de Oriente Próximo para cubrir en 2050, al menos, el 15% de sus necesidades de consumo de Europa. El macroproyecto requerirá de una inversión de 400.000 millones de euros y pretende instalar 20.000 MW para 2020 y 100.000 MW para 2050.
A día de hoy, Desertec cuenta con 16 socios, entre los que se encuentra de nuevo Abengoa Solar, filal del grupo andaluz, y Red Eléctrica de España.
Isofoton trabaja desde hace más de quince años en el país magrebí desarrollando proyectos de bombeo de agua potable, electrificación rural, abastecimiento de aguas para el ganado e iluminación pública.
Un grupo francés instala el primer parque eólico: Vergnet construye en Adrar un parque eólico que funcionará en 2012 y que producirá 10 MW de electricidad.
Los vehículos eléctricos con baterías de litio no emiten CO2 ni dañan el medio ambiente, siempre que la electricidad provenga de energías renovables, como la eólica, la energía solar fotovoltaica y la termosolar o solar termoeléctrica. Los aerogeneradores podrán suministrar la electricidad al vehículo eléctrico, que en un futuro servirán también para almacenar y regular la electricidad intermitente del sector eólico.