ACS ingresó 230 millones de euros con las instalaciones de energías renovables

El beneficio bruto de explotación (EBITDA) creció un 8,1% hasta los 1.191 millones de euros, con un margen sobre ventas del 9,8% incrementándose en 70 puntos básicos.

El beneficio neto alcanzó los 1.132 millones de euros, un 36,5% menos que en el mismo periodo del ejercicio 2009 ya que en ese periodo se incluía el resultado extraordinario originado por la venta del 35,3% de Unión Fenosa, 1.001 millones de euros, mientras que en 2010 incorpora la plusvalía de 384 millones de euros por la venta de un 15,5% de Abertis.

Las participadas cotizadas, Abertis, Hochtief e Iberdrola, aportaron al beneficio neto 76 millones de euros. El beneficio ordinario neto de las actividades continuadas, es decir sin la contribución de las actividades interrumpidas, alcanzó los 735 millones de euros, un 8,1% más que el año anterior. El beneficio por acción ordinario aumenta un 12,4%.

La cartera total de obras a finales de septiembre de 2010 ascendía a 29.185 millones de euros, un 0,5% más que hace doce meses y con un crecimiento del 28,6% de la cartera internacional, que ya alcanza el 41,4% del total de la cartera del Grupo ACS.

ACS ingresó 230 millones de euros con las instalaciones de energías renovables que ya tiene en explotación durante los nueve primeros meses del año, lo que supone un incremento del 55,1% respecto al mismo periodo de 2009.

ACS invirtió en este periodo 672 millones de euros en la promoción de energías renovables: 484 millones se destinaron a la construcción de centrales de energía termosolar y 188 millones de euros a parques eólicos.

Estos activos se sumarán a la cartera de instalaciones de energía limpia que ACS ya tiene en explotación, que sumaba una potencia total de 1.324,25 megavatios (MW).

De estos activos en marcha, 1.174,55 MW corresponden a parques eólicos en España y Portugal, y los 150 MW restantes, a las centrales de energía termosolar en Badajoz y Granada.

ACS tiene una cartera de proyectos de energías renovables en construcción que suman 500 MW, y otros 1.866 MW en fase de proyectos y financiación.

Entre estos últimos destacan las instalaciones eólicas y termosolares con las que la compañía busca entrar en el mercado de energías renovables de Estados Unidos, que en conjunto alcanzan una potencia total de 550 MW.

Los vehículos eléctricos con baterías de litio no emiten CO2 ni dañan el medio ambiente, siempre que la electricidad provenga de energías renovables, como la eólica, la energía solar fotovoltaica y la termosolar o solar termoeléctrica. Los aerogeneradores podrán suministrar la electricidad al vehículo eléctrico, que en un futuro servirán también para almacenar y regular la electricidad intermitente del sector eólico.

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