El presidente de la Generalitat, José Montilla, ha reiterado su compromiso con la implantación de los coches eléctricos en Cataluña mediante un plan que prevé alcanzar una red pública de 300 puntos de recarga para estos automóviles eléctricos en 2011.
Los objetivos de Cataluña pasan por tener 1.170 puntos de recarga en diciembre de 2012 y el Govern se ha comprometido también a promover los puntos de carga domésticos mediante incentivos a los usuarios.
El presidente de la Generalitat ha apostado por situar a Cataluña en el "grupo de países pioneros a nivel europeo" en la implantación del coche eléctrico y ha añadido que "la implantación progresiva de éste en Cataluña será una realidad que ya no tiene vuelta atrás".
El coche eléctrico Leaf costará alrededor de 30.000 euros y tiene una autonomía de 160 kilómetros proporcionada por sus baterías de litio.
La factoría de Nissan en Barcelona es una de las firmes candidatas a acoger la versión eléctrica de una furgoneta que ya se produce en la planta catalana, la NV200. Próximamente, la alianza Renault-Nissan decidirá su ubicación.
En un acto en el Palau de la Generalitat, el presidente catalán, José Montilla, ha recibido al alcalde barcelonés, Jordi Hereu, y al consejero director general de Nissan Iberia, Manuel de la Guardia, quienes han salido del consistorio a bordo del coche eléctrico para llegar, entre las miradas de turistas y curiosos, a la puerta a la Generalitat.
Durante la firma del acuerdo, Montilla, quien ha bromeado que también le hubiera gustado manejar el vehículo eléctrico pero que no puede porque no tiene permiso de conducir, ha destacado que, mediante la colaboración con el sector, Cataluña puede convertirse en uno de los países "líderes" en la implantación de "la primera generación de coches eléctricos de uso social".
El jefe del Ejecutivo catalán ha resaltado que, a pesar de haber "sufrido" la crisis, la industria automovilística catalana continúa siendo "un referente" en Europa.
La llegada del coche eléctrico es, para Montilla, "una buena noticia" y "una realidad que no tiene vuelta atrás". La Generalitat tiene previsto que en junio de 2011 se alcancen los 175 puntos de recarga para coches eléctricos en toda Cataluña, que se aumentarán hasta 300 en diciembre del mismo año y 1.170 a finales de 2012.
El Ayuntamiento de Barcelona quiere instalar 250 puntos más por la ciudad en el primer semestre del año próximo, y ambas administraciones ofrecerán incentivos a los usuarios para promover la infraestructura y el uso del coche eléctrico, como ayudas, la reducción del 75% del impuesto de matriculación o aparcamiento público gratuito.
Hereu ha recordado que fue en Barcelona "donde comenzó la industria del motor" en España, lo que supuso "un gran impulso para la industrialización" de la ciudad, y ha apostado por seguir vinculando la ciudad a este sector mediante la innovación y la fabricación de nuevos modelos de coche eléctrico "más sostenible".
El alcalde se ha comprometido a facilitar a la población "la cultura y la información" necesarias para que se familiaricen con los vehículos con motor eléctrico y a "adaptar" la ciudad a este tipo de vehículos.
Por su parte, el director de Nissan Iberia, Manuel de la Guardia, ha dicho que Cataluña será uno de los "mercados prioritarios" del fabricante japonés a la hora de introducir en Europa sus automóviles eléctricos.
De la Guardia ha asegurado que el Nissan Leaf se pondrá a la venta en Cataluña en verano, unos meses después de introducirse en los mercados japonés y estadounidense, donde llegará a inicios del año que viene.
Los vehículos eléctricos con baterías de litio no emiten CO2 ni dañan el medio ambiente, siempre que la electricidad provenga de energías renovables, como la eólica, la energía solar fotovoltaica y la termosolar o solar termoeléctrica. Los aerogeneradores podrán suministrar la electricidad al vehículo eléctrico, que en un futuro servirán también para almacenar y regular la electricidad intermitente del sector eólico.
