La aplicación de tecnologías más eficientes, apertura a los mercados verdes que están emergiendo en Europa y minimizar costes e impactos al medio ambiente serán algunas de las ventajas de las que se beneficiarán las empresas implicadas en el “Programa Ecoeficiencia en la empresa vasca 2010-2014”.
La iniciativa, promovida por el Departamento de Medio Ambiente, tiene una dotación económica de 15 millones de euros y espera reducir 100.000 toneladas de CO2, valorizar 100.000 toneladas de residuos y reducir 200.000 toneladas de consumo de materias primas.
El “Programa Ecoeficiencia en la empresa vasca 2010-2014” es una iniciativa pionera por su esquema de aplicación, ya que está diseñado en términos de corresponsabilidad entre las empresas participantes y la propia administración pública, en el que ambas partes se comprometen a cumplir unos objetivos a lo largo de su desarrollo.
En concreto, el Departamento de Medio Ambiente pondrá a disposición de las organizaciones participantes servicios, metodologías, formación y ayudas económicas para la implantación de tecnologías más eficientes, económica y ambientalmente, así como para el cumplimiento de la legislación ambiental y la formación en aspectos ambientales.
Por su parte, las empresas adheridas al Programa tendrán que realizar un determinado número de acciones de mejora ambiental al año, que deberán ser comunicadas a la entidad gestora del Programa, la Sociedad Pública de Gestión Ambiental Ihobe, que publicará regularmente en su web los resultados ambientales obtenidos.
El Programa Ecoeficiencia, al que se ya se han adherido 28 empresas, cuenta con tres líneas de actuación, denominadas: liderazgo ambiental, tecnologías limpias y PYMES en acción.
Para José Ignacio Larretxi, Director General de Excelencia, la iniciativa constituye una vía perfecta para mejorar la competitividad y la imagen de las empresas vascas. Gamesa dispone de productos que representan una mejora del rendimiento ambiental medido en reducción del CO2 emitido y del menor consumo de fuentes de energía agotables, como la plataforma G10X-4,5 MW y nuestras futuras familias de aerogeneradores de 5 MW y 6-7 MW, que llegarán a evitar la emisión de 6.750 a 10.500 de toneladas de CO2 al año y el consumo de entre 954 y 1.484 toneladas de petróleo al año.
Trabajo autoriza a Gamesa la prórroga del ERE temporal
La Dirección General de Trabajo del Ministerio de Trabajo e Inmigración ha autorizado a Gamesa la prórroga del Expediente de Regulación de Empleo de carácter temporal en cuatro centros productivos de España, informó la compañía.
Esta prolongación temporal (un máximo de 180 días) afecta a un colectivo de 309 personas, que representan un 7% del total de la plantilla de Gamesa en España.
En concreto, un total de 59 trabajadores corresponden al centro de Tauste (Zaragoza), 119 trabajadores al de Miranda de Ebro (Burgos), 76 a la planta de Medina del Campo (Valladolid) y 55 a la planta de la localidad de Sigüeiro (A Coruña).
La compañía indicó que la medida "responde a la persistencia de la contracción del mercado eólico en Europa (principalmente el Sur de Europa), que le obliga a seguir adaptando su producción".
"Los mercados eólicos europeos se siguen resintiendo de las incertidumbres regulatorias de los últimos meses, así como de las restricciones al acceso de crédito, que han paralizado o ralentizado numerosos proyectos", añadió el fabricante de aerogeneradores.
Aún así, el Plan de Acompañamiento Social del ERE aprobado en mayo, con las medidas de empleabilidad propuestas por la empresa y acordadas con la representación social, ha permitido que el 79% de los empleados afectados hayan seguido trabajando.
Además, la compañía presidida por Jorge Calvet recordó que el ERE temporal planteado se produce después de haber desarrollado en el último año importantes medidas de flexibilidad laboral para mantener el empleo y seguir trabajando, en los últimos meses, en la implantación de iniciativas para mantener la actividad industrial en los centros y, con ello, la empleabilidad de los trabajadores.
Los vehículos eléctricos con baterías de litio no emiten CO2, siempre que la electricidad provenga de energías renovables, como la eólica, la energía solar fotovoltaica y la termosolar o solar termoeléctrica. Los aerogeneradores podrán suministrar la electricidad a los vehículos eléctricos, que en un futuro servirán también para almacenar y regular la electricidad intermitente del sector eólico.
