Así lo ha afirmado el presidente de esta asociación, Carlos Arce, en una rueda de prensa en la que ha estado acompañado por el vicepresidente y el gerente del Clúster, José Rivero Sudón y Gonzalo Barrantes, respectivamente, y por Jose Luis Joló, el empresario extremeño del sector energético.
Arce ha mostrado la preocupación del Clúster por las informaciones recibidas en los últimos días a raíz de las reuniones mantenidas entre las asociaciones del sector energético con representantes del Ministerio de Industria sobre el nuevo marco regulador de las energías renovables en España.
Desde el Clúster de la energía de Extremadura se cree que "si se confirma" esta modificación, "representará una pérdida de credibilidad total" del país "incrementando sensiblemente la valoración del Riesgo-País para las entidades financieras", un hecho explicó su presidente, que "tendría unas connotaciones imprevisibles" para las economías nacional y de la región.
En este sentido, añadió que la medida, además de afectar al sector energético extremeño y español, pone en "riesgo el cumplimiento" de los "compromisos adquiridos" en materia energética y ambiental de nuestro país con la Unión Europea para 2020.
Asimismo, subrayó que si el cambio regulatorio afectará a las instalaciones ya existentes, se "crearía una enorme inseguridad jurídica y se pondría en peligro al sector de las renovables, pudiendo "llevar esta decisión al concurso de acreedores a muchos de los promotores".
Carlos Arce destacó que el colectivo se sentirá "engañado" si la modificación se "consolida", y que ante la situación generada el viernes se remitió una carta al ministro de Industria, Miguel Sebastián, y otra al presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, a este último "reclamando su apoyo" y una reunión para "transmitirle" la importancia de las decisiones que se van a tomar y como afectan a Extremadura.
Dijo que muchas de las empresas afectadas probablemente emprendan acciones judiciales contra la administración pidiéndole daños y perjuicios, ya que la modificación, según las informaciones que se conocen, prevé bajadas en los cupos, las horas de producción y de primas, y hasta de un 30% en las plantas fotovoltaicas con carácter retroactivo.
Arce quiso destacar que el clúster entiende que apliquen nuevas tarifas a la baja a las centrales de nueva instalación, ya que los costes han disminuido, pero que en "ningún caso" la asociación esta dispuesta a aceptar que sea sobre los proyectos ya realizados o para aquellos que estén en ejecución, con una financiación y unos costes de inversión cerrados en momentos de plena euforia del sector.
En este sentido, dijo que un cambio de regulación con efectos retroactivos supondría al ruptura de la confianza y un trato injusto" para los inversores nacionales y extranjeros, violando la Carta Europea y de los Acuerdos de Promoción y Protección Recíproca de Inversiones suscritos por España.
Cerró su intervención destacando que el clúster extremeño "apoyará" al ministerio en la tramitación de un Real Decreto "contra el fraude", pero "rechazará con todos los medios a su alcance" la modificación con carácter retroactivo de las tarifas del Real Decreto de 2007 para los proyectos ya ejecutados en vías de serlo.
Por todo ello el clúster "exige" al ministerio "estabilidad regulatoria y jurídica, condenando rotundamente las propuestas" ministeriales de aplicar medidas retroactivas, reafirmando el apoyo "a todas las empresas del sector energético que han mostrado estar interesadas en invertir en Extremadura".
Actualmente en Extremadura hay instaladas plantas fotovoltaicas por valor de 400 megavatios; 2 termosolares de 50 megavatios cada una ya conectadas, otras 3 de las mismas características que lo estarán en las próximas semanas y 5 más en construcción, además de otros 16 proyectos termosolares en fase de preasignación.
Junto a estas instalaciones de energías renovables la región cuenta con parques eólicos pendientes de preasignación y una planta de biomasa, en Miajadas, en Cáceres, de 10 megavatios de potencia, con inversiones, en el caso de las fotovoltaicas, que llegan a los 2.000 millones de euros.
Carlos Arce facilitó a los medios de comunicación una carta de apoyo de la Confederación Regional Empresarial Extremeña (Creex), firmada por su presidente, Antonio Masa Campos, en la que transmite el "máximo apoyo" a los afectados por la modificación.
El presidente del Clúster energético extremeño ha hecho hincapié en que los proyectos que se han llevado a cabo en los últimos años han supuesto unas importantes inversiones, una "significativa" creación de empleo y una fuente de ingresos para las administraciones.
El Cluster es una asociación empresarial sin ánimo de lucro, que se creó el 29 de julio de 2008 por iniciativa de la Vicepresidenta segunda y consejera de economía, comercio e innovación de la Junta de Extremadura con la misión de promover la integración, creación y fortalecimiento de las empresas e instituciones que se encuentran dentro de la cadena de valor del sector de la energía, mediante la cooperación e innovación empresarial y con el fin de asegurar la alta competitividad en el ámbito nacional e internacional.
El Clúster inicialmente fue fundado por 26 asociados pero se han incorporado numerosas empresas e instituciones hasta superar las 60.