El documento marca como escenario prioritario una apuesta por reducir un 24% del consumo de energía primaria para el 2020 (con relación a la tendencia prevista). El Departament d’Economia i Finançes lo cree posible tras haberse moderado el consumo de energía los últimos años. La idea es disminuir la intensidad energética (el uso de la energía en relación a la riqueza generada) un 1,6% cada año.
Incumplimientos y retrasos
El plan de la energía de Catalunya ha cumplido tres años con importantes incumplimientos. Así para el 2010 se preveía que los aerogeneradores sumaran 3.000 MW eólicos, pero sólo están en funcionamiento ahora 500 MW, otros 350 MW están en construcción y casi 900 MW están en el registro de preasignación del Ministerio de Industria para que se confirme la prima. En total, pues, habrá unos 1.750 MW hacia el 2013. El resto carecen de emplazamientos y tendrán una retribución oficial futura menor aún por concretar. Además, ni la biomasa (residuos forestales o agrícolas), ni la generación eléctrica con incineración de residuos ni el biogás despegan.
Encarna Baras, directora del Institut Català de l’Energia (Icaen), dijo que Catalunya no alcanzará las metas sobre energías renovables debido al "al proteccionismo local" y la existencia "de espacios protegidos, como la Red Natura 2000" y la protección de la fauna, entre otras medidas legales. Este modelo de protección hará que Catalunya no alcance el objetivo de la UE sobre renovables (un 20% de la energía primaria en el 2020); se quedará en un 16,7%. No obstante, Encarna Varas relativizó este dato, pues se trata, dijo, de un "objetivo de todo el Estado", en el que los catalanes también colaboran pagando las primas a las energías renovables en las tarifas eléctricas.
Pese a todo, la previsión es que las energías renovables aumenten hasta un 11,5% del total del consumo de energía primaria y alcancen el 28% sobre el total de la producción de electricidad. En cambio, la aportación de la renovables al consumo de energía en el transporte se reducirá al 13,2% para el 2020 (por encima del 10% previsto por la UE para España). Se han rebajado las previsiones tras haberse cuestionado algunos biocombustibles.
Ahorros en ventanas
En materia de ahorro de energía, el Govern elaborará el mes de diciembre un plan Renove de ventanas para mejorar los aislamientos térmicos (con una bolsa inicial de entre 2 y 3 millones de euros), dentro de las políticas de eficiencia energética destinadas a la rehabilitación de edificios. También ampliarán las líneas de ayuda al ahorro en materia de mejora de iluminación del comercio, entre otros sectores. Y se regularán el funcionamiento de las empresas de servicios energéticos para garantizar, entre otros aspectos, una correcta actividad, que garantice los derechos de quienes han contratado sus servicios.
La Generalitat también fomentará la gestión energética eficiente en sus propios edificios, con la realización de auditorías energéticas.
Instalaciones
El Pla de l"Energia prevé que en Catalunya se dota de seis nuevas plantas térmicas de ciclo combinado (ya hay seis instalaciones térmicas): dos nuevas en el Port de Barcelona, dos en el Besós (Sant Adrià) otros dos más en Foix y en Bescanó. En cambio, no hay ninguna previsión para anticipar o posponer el cierre de las nucleares.
Unos 80.000 empleos
La inversión total pública del Pla es de 1.053,8 millones de euros para el 2015 (un 62% más que lo previsto hasta ahora: 652,3 millones) y generará un ahorro de 3.012,9 millones de euros en el año 2015 para los consumidores. El grueso corresponde a las partidas de ahorro y eficiencia energética, que incorpora financiación del Ministerio de Industria. En total, se podrá evitar la importación de 1.784,9 millones de euros. La previsión es la creación de 80.000 puestos de trabajos, directos e indirectos, asociados al sector energético.
Asimismo, en el plan de la energía actualizado destacan los objetivos sobre reducciones de emisiones de gases invernadero para los consumidores finales (hogar, transporte y otros de lo que se llamar en la jerga sectores difusos) y las empresas sujetas al comercio de emisiones (del 23,2% y un 32,7% respectivamente), ya que son más ambiciosos incluso que los asignados al conjunto de España en el paquete de energía y clima de la UE (que son una recorte del 10% y el 21% en el 2020 respecto al 2005). La previsión es que las emisiones de CO2 relacionadas con el consumo de energía final descienden de manera continuada a partir del año 2008.
El sector eólico sólo recibe el 24% de las primas
El sector eólico aportó de enero a agosto del 2009 el 45% de la generación del régimen especial y, por el contrario, sólo recibió el 45% de las primas. En cambio, la solar supuso el 8% de la generación y recibió el 46% de las primas. En el 2008, las primas que se pagaron al régimen especial (renovables más cogeneración) ascendieron a 1.138 millones.
Por ello, el presidente de la Asociación Empresarial Eólica, José Donoso, reclama más independencia para la industria eólica, que genera 40.000 empleos directos y en los diez primeros meses del año ha aportado el 12,9% al sistema eléctrico. Donoso defendió que el sector eólico aportó al PIB de forma directa 2.311 millones y por efecto arrastre 1.492 millones.
Además, realizó exportaciones por 2.900 millones e invirtió en I+ D+ i 189 millones. En España, existen 468 parques eólicos, con una capacidad de 12.944 megavatios. En el 2009, la energía eólica en España no ha sido rentable, pero si el precio del barril de petróleo se sitúa por encima de 100 dólares, entonces sí resulta más rentable esta fuente.
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