La realidad es que las casi 100 empresas eólicas que existen pasarán a sólo 10, una reducción que se realizará después de que el Consejo de Estado (Ejecutivo) anunciase que había señales de exceso de capacidad en este sector emergente, según detalla el diario South China Morning Post, algo normal, pues la concentración es un paso natural.
La otra medida también es sensata: el Ejecutivo chino ordenó a los bancos no conceder préstamos a proyectos eólicos que se consideren redundantes o de baja calidad. Normal, porque siempre hay especuladores, al lado de los empresarios serios y emprendedores.
Según Hu Yueming, presidente de la empresa High Speed Transmission Equipment Group, que fabrica equipos de energía eólicos, la disminución prevista es una medida correcta porque el número de fabricantes de aerogeneradores eólicos superan el centenar, cuando a nivel mundial apenas hay que 15 que cuenten realmente: Vestas, Gamesa, GE Wind, Enercon, Nordex, Suzlon, Acciona, Siemens, Nordex, las chinas Sinovel y Goldwind, REpower, Clipper, Areva, Alstom Wind, Fuhrlaender, Mitsubishi y poco más.
‘Incluso diez empresas pueden ser demasiadas para China’, subrayó Hu, quien precisó que el exceso de capacidad sólo se observa en la fabricación de las turbinas, pero no en la transmisión de engranajes. Desde luego, con tres hay más que suficientes.
La ultraderecha que odia la eólica y jalea el engendro de Calzada confunde sus deseos con la realidad. La capacidad instalada en el sector de la energía eólica de China crecerá un 64 por ciento este año hasta llegar a los 20.000 MW eólicos. El crecimiento eólico de la capacidad instalada de China en 2008 fue del 105 por ciento.
La práctica totalidad de las empresas eólicas tienen fábricas de aerogeneradores y China tiene casi un centenar de fabricantes nacionales, entre los que destacan tres: Sinovel Wind Co., Dongfang y Goldwind Science & Technology Co Ltd.
Según los expertos del sector, la energía eólica superará a la nuclear como la tercera mayor fuente de electricidad de China, después de la energía térmica del carbón y la hidroeléctrica.
La energía eólica representó el 1,5 por ciento de la capacidad instalada total de generación eléctrica de China en 2008, año en que el país se convirtió en el cuarto mayor mercado de energía eólica del mundo. En 2009 es probable que alcance a Alemania y a España.
China va camino de convertirse en una gran potencia eólica, y para ello basta contemplar la evolución de la potencia eólica instalada:
Año 2000: apenas 346 MW.
2001: 402 MW.
2002: 469 MW.
2003: 567 MW.
2004: 764 MW
2005: 1.260 MW.
2006: 2.604 MW.
2007: 5.912 MW.
2008: 12.210 MW
2009: 20.000 MW (previsto).
Numerosa empresas internacionales tienen fábricas en China, como la danesa Vestas, o las españolas Gamesa y Acciona, pero el proteccionismo dificulta la consolidación de las multinacionales del sector eólico.
China implantó la Ley de Energías Renovables en el año 2006 como parte del plan para mejorar sus registros medioambientales y garantiza unos precios mínimos, al igual que España o Alemania. Lo que más necesita en estos momentos es la tecnología para hacer efectiva su determinación de construir un modelo económico limpio y ecológico.
China produce turbinas eólicas a un precio que es un 20% inferior al de otros países, y en lo que va de 2009 el precio de los aerogeneradores se ha reducido un 15%.
Li Junfeng, subdirector del Instituto de Investigación de Energías, NDRC, indica que "recientemente, el gobierno chino ha establecido muchas políticas preferenciales acerca de las energías renovables. Por ejemplo, el paquete de medidas de estímulo para los 10 sectores más importantes, puesto en marcha por el principal órgano de planificación económica del país, proporciona un firme apoyo a la electricidad eólica y a la energía solar. Por su parte, el Ministerio de Finanzas también ha suministrado subsidios considerables a la generación de energía solar".