Una de las pocas novedades positivas es que el tiempo de tramitación administrativa para instalar los parques eólicos en Cataluña se reduce de los cinco años de media de hoy a 18 meses.
Segín el conseller de Economía, Antoni Castells, el plan supone un paso importante, no sólo por la simplificación burocrática, sino para el cumplimiento de los objetivos del Pla d’Energia (2006-15). "Nos permitirá dar un salto adelante y cualitativo en un asunto tan importante como es el impulso de las energías renovables", ha afirmado Castells, que ha destacado que el decreto servirá para dar un impulso a corto plazo a 850 megavatios más de energía eólica.
El conseller recordó que la capacidad eólica instalada en Cataluña pasó de 86,5 megavatios instalados en 2003 a 447,4 megavatios de hoy, "pero todavía sigue teniendo un peso pequeño dentro del ‘mix’ de generación de electricidad en Catalunya y dentro de lo que suponen las eólicas en toda España".
Castells ha remarcado que uno de los objetivos del decreto es evitar los costosos trámites administrativos para autorizar los parques eólicos, que hasta ahora tardaban una media de cinco años, pero que podían llegar a los siete u ocho años.
En cuanto a la energía fototovoltaica, Castells indicó que la evolución de los últimos años ha sido satisfactoria, "tanto que el Gobierno del Estado tuvo que modificar el régimen de primas porque la expansión había ido más allá de lo deseable".
En Cataluña, los objetivos recogidos en Plan era alcanzar los 100 megavatios de fotovoltaica para el año 2015, aunque ya en septiembre de este año se llegó a 161 MW. "Tenemos que seguir creciendo pero de una forma más moderada que hasta ahora", ha puntualizado el conseller. En este este decreto han estado implicadas las consellerías de Medi Ambient, Política Territorial y Economia,
Cataluña aumentó en 2008 en 77 megavatios (MW) su capacidad de generación de energía eólica, lo que supone un 23% más que el año anterior, alcanzando los 420,44 MW de potencia máxima instalada, a pesar de lo cual Cataluña queda lejos del objetivo de los 3.500 MW fijado por la Generalitat para el 2015.
EolicCat, la agrupación de productores eólicos catalanes, ha informado de que la apertura de tres nuevos parques eólicos formados por 38 aerogeneradores durante el pasado año ha permitido hacer frente mediante energía eólica al 1,5% del consumo eléctrico de Cataluña durante 2008.
Los tres nuevos parques supusieron una inversión de 85 millones de euros y se han instalado en las comarcas tarraconenses del Baix Ebre y la Conca de Barberà, con lo que, en total, Cataluña cuenta con 17 parques eólicos que produjeron 750.000 megavatios durante las aproximadamente 2.000 horas en que estuvieron en funcionamiento en 2008.
A pesar de este aumento, la producción eólica catalana supone sólo el 2,5% de la generada en toda España, con un claro atraso respecto a otras comunidades autónomas como Castilla-La Mancha, Castilla y León o Galicia, con una potencia de 3.415 MW, 3.334 MW y 3.145 MW, respectivamente.
Ante esta situación, el presidente de EolicCat, Ramon Carbonell, manifestó que "es importante que la nueva normativa pendiente de aprobar favorezca la implantación eólica y asuma el objetivo de los 3.500 MW para el año 2015", en referencia a la nueva ley sobre energías renovables pendiente de aprobación por el Parlamento catalán.
La producción eólica catalana de 2008 equivalió al consumo eléctrico de 250.000 familias y evitó la emisión a la atmósfera de 1,2 millones de toneladas de CO2.
Durante 2009 está previsto el inicio de construcción de 15 nuevos parques, seis de los cuales están ya en obras.
Cataluña tiene una potencia eólica instalada de 420,44 megavatios y ocupa el noveno lugar en el ránking de comunidades productoras de energía eólica, muy por debajo de Castilla-La Mancha, Castilla León o Galicia.
El desmantelamiento y la recuperación de la zona prueba el mínimo impacto ambiental de la energía eólica.
Ramon Carbonell, presidente de EolicCat, entidad que agrupa a 50 empresas catalanas del sector, afirma que el aniversario pone de manifiesto dos hechos contrapuestos: "Por un lado, celebramos la espectacular evolución de la tecnología eólica, en la que Catalunya ha sido pionera, pero por otro nos preocupa el importante retraso que padecemos en implantación".
EolicCat quiere hacer realidad la planificación eólica formulada en el Plan de la Energía de Cataluña 2006–2015, aprobado por el Govern de la Generalitat de Cataluña en octubre de 2005, donde se plantea como objetivo 3.500 MW de potencia eólica instalada en Cataluña en el año 2015.
Greenpeace acusa a la Generalitat catalana de despreciar la energía eólica
La organización ecologista Greenpeace acusó a la Generalitat de arrinconar las energías renovables en la Prospectiva Energética de Cataluña para 2030 (Proencat).
La delegada de la organización en Cataluña, Anna Rosa Martínez, lamentó que en el documento resultante de la comisión de expertos no se haya contemplado la propuesta de Greenpeace para orientar la política de la Generalitat hacia un horizonte en el que toda la energía producida sea renovable, un escenario que según la entidad sería técnica y económicamente sostenible en 2050.
Greenpeace ha expuesto hoy la estrategia política que la Generalitat de Catalunya está desarrollando ante la próxima publicación de la revisión del Plan de la Energía de Cataluña 2006-2015 (PEC), basada en alentar la construcción de los proyectos de centrales térmicas de ciclo combinado del sector eléctrico, garantizar la rentabilidad de las que ya están en funcionamiento y hacer creer que las centrales nucleares son una parte imprescindible del sistema eléctrico en Cataluña.
La organización ha recogido su análisis en el documento La política energética de Cataluña: la fusión nuclear como coartada (1), presentado hoy en rueda de prensa.
El Departamento de Economía y Finanzas, dirigido por el socialista Antoni Castells, tiene previsto hacer pública este mes de julio la revisión del PEC, que estaba programada para 2008. Greenpeace destaca que esta revisión afronta un contexto con situaciones clave:
* un cambio climático que se agrava e incide ya sobre los ecosistemas y la economía catalanes;
* unas centrales nucleares que han protagonizado los incidentes más graves del parque nuclear español;
* una presencia mísera de las energías renovables en Cataluña;
La organización ecologista denuncia que, en lugar de abrir un debate público con la presencia y aportaciones de todos los agentes sociales para superar estos retos, el PSC ha optado por encargar una “Prospectiva Energética año 2030” (PROENCAT-2030), de la que sólo se ha hecho pública una presentación a través de Internet y de conferencias. La única participación promovida por el Departament d’Economia i Finances ha sido la de un comité de “ocho sabios”, entre los cuales no se ha incluido a ninguna persona con conocimientos técnicos del mundo de las energías renovables.
Para Greenpeace, el secretismo de la Generalitat en la revisión del PEC es un elemento más de su estrategia cuyo objetivo prioritario es asegurar el mantenimiento del sucio modelo energético en Cataluña y para la que está empleando, como mínimo, otros tres elementos:
* 1. La Generalitat ha eludido plantearse como opción de futuro un horizonte 100% renovable, aunque Greenpeace ha probado que esta opción es no sólo viable, sino la más interesante desde el punto de vista ecológico y económico.
* 2. Se ha refugiado en los argumentos de las "plataformas de defensa del territorio que imposibilitan la instalación de energías renovables" para elaborar un decreto que asegura que estas energías no dejen de ser marginales o complementarias.
* 3. Se ha dado prisa en recurrir a la fusión nuclear, presentándola como si fuese una tecnología realista capaz de proveer ilimitadamente de energía a medio plazo sin pagar el supuesto “peaje paisajístico" de las energías renovables. En su afán por mantener opciones energéticas insostenibles, la Generalitat pone el futuro de Cataluña a merced de una tecnología muy cara y con un calendario muy incierto.
“Imponiendo combustibles fósiles, manteniendo las centrales nucleares y refugiándose en entelequias tecnológicas, la Generalitat está privando a los catalanes de construir y disponer del único sistema posible de generación eléctrica limpio, seguro, económico, viable y sostenible” ha declarado Anna Rosa Martínez, delegada de Greenpeace en Cataluña. ”Nos toca ahora a los ciudadanos reclamar un cambio de dirección hacia la sostenibilidad, y evitar una huida hacia adelante que condene nuestro futuro”, ha añadido Martínez.
(1) La política energética de Cataluña: la fusión nuclear como coartada está disponible en www.greenpeace.es