Después de años de crecimiento, la energía eólica de China ocupa el cuarto lugar mundial y la industria de equipo eólicos es una industria muy próspera, indicó Zhang, aunque muchas empresas de otros países se quejan de la insuficiente calidad de los productos eólicos fabricados en China.
Con una inversión de 120.000 millones de yuanes (17.570 millones de dólares USA), la estación eólica fue diseñada para tener una capacidad instalada de 5.160 megavatios eólicos a finales del año 2010, y de 12.710 megavatios a finales de 2015. Cuando esté terminada, será la mayor instalación de energía eólica de China, y también del mundo.
La capacidad instalada de energía eólica de China ascendía a finales del año pasado a 12.170 megavatios, ocupando el cuarto lugar mundial detrás de Estados Unidos, Alemania y España.
Más de una docena de empresas fabrican aerogeneradores en China y varias docenas producen componentes eólicos. Los mayores fabricantes chinos son Goldwind, Dongfang y Sinovel.
Shu Yinbia, subdirector general de la firma estatal, señaló que la capacidad instalada de energía eólica que va a parar a la red eléctrica aumentó 101 por ciento interanual a finales de junio, en declaraciones recogidas por el diario "China Daily".
Shu recomendó una planificación del desarrollo de la energía eólica en todo el país asiático, uno de los que mayor cantidad de gases contaminantes emiten a la atmósfera, y formular unos estándares técnicos nacionales para las energías renovables que incluyan la eólica y la solar.
El sector de la energía eólica se ha desarrollado en China en los últimos años gracias a las políticas de apoyo del gobierno, con una capacidad instalada de 12.000 megavatios a finales de 2008, lo que situaría al país asiático en el cuarto en el sector por detrás de Estados Unidos, Alemania y España.
La Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma anunció que las tarifas en red se han establecido entre 0,075 y 0,09 dólares por kilovatio-hora en 4 categorías de las regiones que producen energía eólica. Los precios son más altos que los que se establecen bajo el sistema de oferta pública, que oscilan entre los 0,055 y los 0,073 dólares por kilovatio-hora.
La Asociación de Energía Eólica prevé que China tendrá una capacidad instalada de entre 108 y 132 gigavatios eólicos antes del 2020, con lo que se convertiría en uno de los países líderes en esta energía renovable.
Más del 70 por ciento de la energía que consume China proviene todavía del carbón (40 puntos por encima de la media mundial), un combustible altamente contaminante, por lo que el gobierno se ha propuesto desde el año 2006 incrementar el uso de energías no fósiles (nuclear, solar y eólica).
Según datos del gobierno chino, en 2006 las energías no fósiles suponían el 7 por ciento del total del consumo, y de acuerdo a los objetivos marcados tendrán que alcanzar el 15 por ciento en 2020.
China, segundo país consumidor de energía y emisor contaminante después de EE UU, aumentó en febrero su objetivo de energía nuclear en el 2020 hasta el 5 por ciento, desde el 4 por ciento inicial y frente al 2 por ciento del 2006. Siin embargo, grupos ecologistas como Greenpeace han instado a China en los últimos años a evitar el recurso a la nuclear y afianzar energías no contaminantes como la eólica y la solar.
En un capítulo paralelo, el consumo de energía por unidad de Producto Interior Bruto (PIB) bajó 3,35 por ciento interanual en el primer semestre del año, según datos publicados por el principal órgano económico del país, la Comisión Nacional de Reforma y Desarrollo de China. La caída es superior al 2,88 por ciento registrada en la primera mitad de 2008.
La Comisión anunció que espera que las emisiones de dióxido de azufre se reduzcan en 5 por ciento en el primer semestre de este año, y que la Demanda Química de Oxígeno (DQO, cantidad de materia orgánica susceptible de ser oxidada por químicos en un líquido) se reduzca el 2 por ciento.
En el 2006, China lanzó una campaña para mejorar la eficiencia energética y reducir el consumo de energía por cada 10.000 yuanes de PIB (1.470 dólares) en un 20 por ciento, y las principales emisiones contaminantes en 10 un por ciento antes del 2010, en relación con los niveles del 2005.
China va camino de convertirse en una gran potencia eólica, y para ello basta contemplar la evolución de la potencia eólica instalada:
Año 2000: apenas 346 MW.
2001: 402 MW.
2002: 469 MW.
2003: 567 MW.
2004: 764 MW
2005: 1.260 MW.
2006: 2.604 MW.
2007: 5.912 MW.
2008: 12.210 MW
2009: 25.000 MW (previsto).
2010: 30.000 MW (previsto)
2020: 150.000 MW (previsto)
Numeros empresas internacionales tienen fábricas en China, como la danesa Vestas o Siemens, o las españolas Gamesa y Acciona, pero también hay potentes empresas nacionales, como Goldwind de la provincia de Xinjiang. China tiene un enorme potencial eólico. El proteccionismo dificulta la implantación de empresas extranjeras, incluidas las españolas Gamesa y Acciona.
China implantó la Ley de Energías Renovables en el año 2006 como parte del plan para mejorar sus registros medioambientales. Lo que más necesita en estos momentos es la tecnología para hacer efectiva su determinación de construir un modelo económico limpio y ecológico.
——————–
China starts building 10-GW wind farm
Construction has started on China’s first 10-gigawatt wind power base in the far northwestern city of Jiuquan in Gansu Province. It’s part of efforts for more clean power to fuel economic growth.
120 billion yuan are going into the project. China’s biggest wind power facility is designed to have an installed capacity of 5.16 gigawatts by the end of 2010 and 12.71 by the end of 2015.
Lu Hao, Secretary of CPC Gansu Provincial Committee, said, "The project will greatly boost Gansu’s economic development. Now over 10 large equipment manufacturers are stationed at Jiuquan. Total sales revenue there has already exceeded 3 billion yuan this year."
China’s installed wind power capacity topped 12.17 gigawatts at the end of last year.
Zhang Guobao, Vice Minister, National Dev’t & Refrom Commission, said, "Besides Jiuquan, China plans to build another five 10-gigawatt wind farms. They will be located in areas rich in wind resources such as Jiangsu, Hebei and Inner Mongolia."
The vice minister also says China’s wind power industry is entering a new stage. China’s wind power installation now ranks fourth in the world, and subsidiary equipment manufacturing is a booming industry.
Previously development was hampered by distribution imbalances between resources and markets, difficulties in connecting to power grids, and policies that only produced stations with small generation capacity.
So the government decided to build the 10-gigawatt level wind farm to maximize efficiency. It’s been nicknamed a "Three Gorges in the Air."