Los proyectos que usen piezas y materiales locales tendrán prioridad, de acuerdo con la presentación de la licitación hecha por el Ministerio de Planificación.
La mitad de la capacidad eléctrica licitada (500 MW) se destinará a proyectos eólicos. Enarsa quiere instalar 150 MW adicionales de termoeléctricas a biocombustible, 120 MW de residuos, 100 MW de biomasa, 60 MW de minihidraúlicas, 30 MW de geotermia, 20 MW de energía solar y 20 MW de biogás. La inversión en la nueva capacidad ascenderá a 2.500 millones de dólares.
Enarsa ha desarrollado mapas y llevado a cabo varios estudios que detallan el potencial del país para capacidad eólica, a biomasa, hídrica, solar y geotérmica.
El país pretende que un 8% de la electricidad generada provenga de fuentes renovables el 2016.
Fernández indicó que la capacidad renovable podría desarrollarse en cualquier parte del país. La mayor parte del potencial eólico se encuentra en la sureña Patagonia, mientras que el norte del país tiene un importante potencial solar.
Con respecto a los proyectos renovables en desarrollo, la presidenta expresó que ya está operando un proyecto eólico de 1,7 MW que está ejecutando Impsa en la provincia de Chubut. La firma argentina NTG está instalando otro proyecto de 1,5 MW en la provincia.
Enarsa también dio inicio a los trabajos preliminares para una planta solar en la provincia de Salta, agregó la mandataria.
La empresa estatal no entregó el cronograma ni la información sobre los costos de la licitación.
Contando la generación térmica, hidroeléctrica y nuclear, la potencia energética instalada en Argentina es de 24.033 megavatios (MW), mientras que los parques que capturan el viento apenas alcanzan los 31 megavatios. Apenas el 0,12 por ciento de la potencia total instalada, de acuerdo a un informe de la Asociación Argentina de Energía Eólica.
Mientras Europa siembra sus campos de molinos y la administración de Barack Obama puso el tema entre sus prioridades, la Argentina mantiene un enorme potencial para desarrollar energías renovables como las que surgen del viento, los mares, la tierra y el sol, pero avanza demasiado lento, coinciden fundaciones ambientalistas y estudios privados.
"En la actualidad, el país está en condiciones de entrar con 2.100 megavatios eólicos al Sistema Interconectado Nacional, 200 de ellos en forma inmediata", estima el mencionado informe de la Asociación que encabeza el austríaco Erico Spinadel. Eso, en la hipótesis de máxima, es 750 veces más de lo que los molinos aportan ahora, y resultaría en 75 veces más de recursos energéticos: un buen complemento para situaciones de crisis.
"Estamos retrasados, pero la Argentina tiene una proyección importante. Llegaron a existir más de 500.000 molinos en el país, no para generación eléctrica sino para riego y bebida del ganado, pero esa tradición se perdió", explica Hilda Dubrovsky, especialista de la Fundación Bariloche. A su juicio, "el potencial podría estirarse a los 3.000 megavatios, lo que significa un Yacyretá y medio".
Además del diseño, falta infraestructura, considera Alberto Anesini, coordinador del área de Energías Renovables del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI): "La red de distribución no está pensada para traer todas las energías que se producen en el sur. Si mañana se instala una gran planta de miles de megavatios más allá del paralelo 42, no hay forma de conectarla en forma eficaz con ciudades lejanas.
Como resultado, Argentina está muy lejos de los primeros puestos en el ranking de países que buscan en estas tecnologías los sustitutos del petróleo que se acaba y de los recursos naturales que se malgastan. A la cabeza van Alemania, Estados Unidos (el mayor emisor de gases contaminantes del efecto invernadero), España y e India. Portugal aparece en el décimo lugar y su electricidad proviene en un 43 por ciento de fuentes de energía renovables.
Argentina figura en el puesto número 40 de esa tabla preparada por la Asociación Mundial de Energía Eólica, por debajo Estonia y Luxemburgo.
En octubre pasado, el parque eólico Antonio Morán, que queda en Chubut y es el más grande del país, comenzó a entregar energía a los consumidores nacionales. El año que viene, además, comenzará a operar el parque eólico de Arauco, en La Rioja, que realiza la empresa IMPSA, del Grupo Pescarmona. "Es un hito -dijo la firma en un comunicado-, significará la independencia energética de la provincia", porque en la última etapa podrá abastecer el 45 por ciento de la demanda actual, que ahora se "importa" de otros distritos.
————————————————–
Argentina Opens Bidding On Green Energy Projects Totaling 1GW
Argentina’s state-run energy company Enarsa this week opened bidding for multiple renewable-energy projects whose combined output will total 1 gigawatt.
The projects, which aim to produce cheaper energy and reduce Argentina’s reliance on non-renewable sources of power, call for the building of new wind, solar, geothermic, and biomass plants. The government expects 500 megawatts of the new power to be generated by wind turbines.
Government officials hope the new projects, which each offer 15-year contracts, will lead companies to invest around $2.5 billion in the sector.
The government wants to boost the percentage of power generated with renewable energy to 8% by 2016. Green energy now accounts for about 1% of locally generated power.
Energy Secretary Daniel Cameron said this week that the government is committed to promoting the use of Argentine components in the construction of power plants.
"We’re taking this new step to improve the quality of our lives, protect the environment, create jobs and increase national production," Cameron said.
However, it’s not clear how the requirement that companies use Argentine-made components might affect bidding or the construction of power plants.
Energy companies and even government officials have said repeatedly that in the past such requirements have stifled plans to build renewable energy generators. Among other things, one problem has been that local companies lack the capacity to mass-produce such components.
A spokesman for Enarsa was unavailable to comment.
In 2005, the government outlined a $300 million plan to produce more than 300MW at various wind farms across the country – whose most unpopulated areas in Patagonia and elsewhere often receive constant, howling winds.
But most of those grandiose projects have so far gone nowhere. Despite growing interest worldwide in renewable power, volatile oil prices, and a growing shortfall in its domestic output of natural gas and crude oil, Argentina has only managed to marginally expand its wind power capacity – from 10MW a decade ago to 29MW.
According to local media reports, companies that have expressed interest in the new projects include the U.S.-based AES Corp. (AES), the Danish wind power giant Vestas Wind Systems (VWS.KO), Spain’s Endesa SA (ELE.MC), Argentina’s Pampa Energia (PAMP), the Techint Group (TCNT.YY), Brazil’s Petroleo Brasileiro (PBR), or Petrobras, and Germany’s SoWiTec, among others.
Bids will be opened on Aug. 26.
Electricity sector in Argentina
The electricity sector in Argentina constitutes the third largest power market in Latin America. It relies mostly on thermal generation (54% of installed capacity) and hydropower generation (41%), with new renewable energy technologies barely exploited. The country still has a large untapped hydroelectric potential. However, the prevailing natural gas-fired thermal generation is at risk due to the uncertainty about future gas supply.
Faced with rising electricity demand (over 6% annually) and declining reserve margins, the government of Argentina is in the process of commissioning large projects, both in the generation and transmission sectors. To keep up with rising demand, it is estimated that about 1,000 MW of new generation capacity are needed each year. An important number of these projects are being financed by the government through trust funds, while independent private initiative is still limited as it has not fully recovered yet from the effects of the Argentine economic crisis. The need to raise the currently low residential tariffs, which were frozen as a response to the crisis, is still a controversial political issue pending resolution.
The electricity sector was unbundled in generation, transmission and distribution by the reforms carried out in the early 1990s. Generation occurs in a competitive and mostly-liberalized market in which 75% of the generation capacity is owned by private utilities. In contrast, the transmission and distribution sectors are highly regulated and much less competitive than generation.
Wind
The Argentine Patagonia region, has a very large wind potential. The Chubut Wind Power Regional Center (CREE) estimated the theoretical potential for the region at 500 GW of electricity generation. However, this large potential is still largely unexploited. One of the reasons for this underdevelopment is that existing tariffs and incentives do not make wind power development attractive enough yet. However, the main deterrent to wind power development in the region has been the lack of transmission lines that connect the Patagonia region with the National Interconnected System. The completion of the Choele-Choel-Puerto Madryn high voltage line, the first section of Línea Patagónica, under the framework of the Plan Federal de Transporte de Energía Eléctrica eliminated this bottleneck in March 2006.
Nevertheless, wind power has increased significantly in Argentina during the last decade. Total operating wind power capacity in 2005 was 26.6 MW, shared by 13 plants. This is still only about 0.05% of the theoretical potential of wind energy in Argentina. The distribution of number plants and total capacity is:
* Buenos Aires Province: 6 plants, 6,100 kW
* Chubut Province: 4 plants, 17,460 kW
* Santa Cruz Province: 1 plant, 2,400 kW
* La Pampa Province : 1 plant, 1,800 kW
* Neuquen Province : 1 plant, 400 kW
Of the 13 plants, only three have been commissioned after the year 2000, with the remaining 10 built during the 1990s.
www.enarsa.com.ar/licitaciones15.htm
www.enarsa.com.ar/licitaciones15.htm
www.argentinaeolica.org.ar/portal/images/stories/Extracto%20del%20programa.pdf